Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
CULTURAL MADRID 17-10-2009 página 42
CULTURAL MADRID 17-10-2009 página 42
Ir a detalle de periódico

CULTURAL MADRID 17-10-2009 página 42

  • EdiciónCULTURAL, MADRID
  • Página42
Más información

Descripción

C. LIBRO Y BANDA SONORA Comienzos MI PRIMERA PELÍCULA: TOMA 2 STEPHEN LOWENSTEIN TRADUCCIÓN DE MANU BERÁSTEGUI ALBA, BARCELONA, 2009 408 PÁGINAS, 26 EUROS MANUEL MUÑIZ MENÉNDEZ Una de las cuestiones sobre el mundo de las artes que resultan más intrigantes desde el exterior es el comienzo de los autores, la forja de su primera obra. Más aún en el cine, donde el talento personal no basta y son necesarios recursos para poder pasarse al largometraje. Stephen Lowenstein ya había publicado un libro en el que entrevistaba a directores como Almodóvar, Frears o los hermanos Coen sobre sus primeras películas y ahora repite la experiencia con otro variado grupo de cineastas. La selección cubre muy bien prácticamente todo el abanico de posibles debuts. En un extremo, Richard Linklater, que tras curtirse con varios cortos amateurs realizó sin salir de su Texas natal Slacker (1991) una película de mínimo presupuesto 23.000 dólares que se convirtió en un clásico de culto. En el otro, Sam Mendes, que ya era un prestigioso director teatral cuando llegó a Hollywood para dirigir la oscarizada American Beauty (1999) Uno de los puntos fuertes del libro (en comparación con la primera entrega) es el contar con directores procedentes de diferentes partes del globo, lo que nos permite una mirada desde dentro a industrias muy dispares. Así, Shekhar Kapur (Masoom, 1983) cuenta anécdotas delirantes del cine indio, en el que a menudo el mayor competidor para contratar a una estrella no es un gran estudio, sino un terrateniente que se ha enriquecido con una buena cosecha y decide gastarse todo su dinero en hacer una película (o, más bien, en alternar con actores y actrices un par de semanas antes de volverse a su pueblo) Alejandro González Iñárritu se queja del nepotismo y el corporativismo de la industria mexicana, al margen de la cual buscó mantenerse para hacer Amores perros (2000) Similares en su empeño de imponer su propio estilo en sistemas conservadores y cerrados son los casos de Takeshi Kitano (Violent Cop, 1989) Lukas Moodysson (Fucking m l, 1998) o Emir Kusturica ¿Te acuerdas de Dolly Bell? 1981) quien empezó a hacer cine durante los últimos coletazos de la Yugoslavia de Tito. Algo que tienen en común muchos de estos directores es su vinculación previa al mundo del espectáculo. Kitano, Kapur y Terry Gilliam (La bestia del reino, 1977) eran actores; González Iñárritu, discjockey y publicista; Mendes, director teatral; y Richard Kelly (Donnie Darko, 2001) y Agnès Jaoui (Para todos los gustos, 2000) guionistas. Parece claro que el de la dirección es el camino de entrada al cine más duro. COLORISTA PESADILLA. A LA DERECHA, IMÁGENES DE LOS 5.000 DEDOS DEL DOCTOR T UNA PELÍCULA DE CULTO DENTRO DEL CINE INFANTIL LOS TESOROS DE LA CRIPTA JUAN MANUEL DE PRADA Los 5.000 dedos del Doctor T EN OCASIONES UNA PELÍCULA PUEDE SUPERAR A SUS MISMOS AUTORES. ES EL CASO DE ESTA CINTA, FABULOSA Y DELIRANTE MÁS ALLÁ DE LO HABITUAL PARA SU CREADOR, EL DR. SEUSS A unque no demasiado divulgado por estos pagos, Theodore Seuss Geisel (1904- 1991) más conocido por su nom de plume Dr. Seuss, se cuenta entre los más conspicuos cultivadores de la literatura infantil del pasado siglo. Reputado cartelista y dibujante de tiras cómicas en su juventud, tras la Segunda Guerra Mundial encauzaría su creatividad hacia la escritura, haciendo gala de una imaginación férvida y surrealista y de una habilidad endiablada para el retruécano, el calambur y, en general, el malabarismo lingüístico que lo torna casi intraducible. Adaptado con cierta asiduidad a la pantalla, el arrebatador universo del Dr. Seuss sólo cuenta con una versión cinematográfica capaz de emular su imaginería desquiciada, su apabullante despliegue onírico y su infatigable contorsionismo de las palabras. Nos referimos a la estupefaciente y extrañísima Los 5.000 dedos del Doctor T (1953) que sin hipérbole podríamos considerar que desempeña en la Historia del cine idéntico papel al que el ornitorrinco ¡o incluso el unicornio! desempeña en la historia natural. EL ARTESANO DELIRA. Basada en un guión original del propio Dr. Seuss, Los 5.000 dedos... fue producida por el celebérrimo Stanley Kramer; y estaba previsto que la dirigiese Carl Foreman, antes de que su adscripción comunista le valiera una condena al ostracismo. Kramer recurre entonces a un artesano de trayectoria más bien impersonal, Roy Rowland, quien aquí se revelaría inopinadamente personal, personal hasta la extravagancia o el delirio; o quizá tan humilde y discreto y no se me ocurre virtud más encomiable en el artesano que supo trasladar al celuloide el bizarro universo del Dr. Seuss sin interferencia alguna, logrando una obra tan singular, tan insobornablemente marciana... que al propio Dr. Seuss se le antojó un fiasco. Y, como al Dr. Seuss, al público de la época, que castigó Los 5.000 dedos... con el desprecio que las masas cretinizadas suelen dedicar a la poesía. Porque eso es, en síntesis, ABCD 42

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.