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CULTURAL MADRID 18-05-2002 página 22
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CULTURAL MADRID 18-05-2002 página 22

  • EdiciónCULTURAL, MADRID
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MEMORIAS ¡4i hros Las serpientes la vida y Lascosas fueron. como Memorias FRANCISCO NIEVA Espasa. Madrid, 2002 662 páginas, euros 23,25 con el ejerciciopropiamente memoria lislicoyporello, másvolcadoalacró nica que un hombrede teatro puede hacer de su experiencia vital y profe sional. Ahora bien, lo más notablede Las cosas como fueron es elpensamientoatt tobiográflco (el conceptoy la expresión son de Janette Rainwatery tienen que ver con la voluntadde dar un sentido coherente a la trayectoria vital) Está muy presente a lo largo del libro, in cluso diría que constituyeuna relativa novedad, delmodocómose formula, en el contextohispánico. Da la impresión de que Nieva lleva muchotiempopen en sus manifestaciones y apariencia. parecido ocurrió con Carlos Edmundo sando en la historiade su vida, en las Hijo de padres maduros, su autor cons de Ch- y Juan Goytiso! o os tres, por decisiones que ha tomado, en cómo o truye el relato de esosaños cruciales de cierto, con resultadossimilares) Ya hay que robar la felicidad a la desdi formación analizando e! hecho de ha casado descubre Nieva en toda su pie cha. El resultado, decía, no es tantouna ber sido objeto de unos cuidados ma nitud los matices de su bisexualidad crónica delos sucesosvividoscomoun y ternos excesivose inapropiados: çQué se dejallevar por una vida de progre diálogo con el tiempo, un pensar el necesidad tiene una pobre criatura de sivo esnobismoque cuimina en Vene tiempo en la práctica de. existencia una que! eechen encima, como iniciación a cia con aparatosasexperienciasmon que se intentacomprender desde den la vida, la prolífica y muy pesada carga daines (la que cuenta de! entierro de ho. de una neurosis materna! só! o mani una esculturade Tingue! y happening Deboadvertir que e! argumento no festada a caño libre y en secreto para el al que asistió toda! a pomada vene puede ser más sencillo: El que luegofue hijo de sus entrañas ciana, empezandopor Peggy Guggen conocido escenógrafo y dramaturgo heim, es francamentegrotesca) En la Ñrnwisco Morales Nieva, nacido 129 MatrimonIo en París tercera parte el lector asiste al naci de diciembrede 1924, espaialnwnte muy Tniendo en cuenta e! dominio que miento de! escritor, una vez liberado de iniciado por su propia madre en el cul su madreejerciósobreél durante años la insinceridad de sus sentimientosha tivo de las Bellas Artes, d iai la mayor se comprende muy bien! a segunda cia Geneviéveque le impedíanacep parte de su juventud al empeño de ha parte del libro donde Nieva, lleno de tarse a si mismo y concentrarse en ser cerse admitir como artista plástico. En confusión sobre sí mismo, contrae ma lo que ya era, aún ignorándolo. epi la raya de la madurez cambió repenti El trinionio en Paris con una mujer, Gene sodio de su ruptura matrimonial y su namentede oficioy se dedicóal teatroy a viéve Escande, con la que apenas en inmediato regreso a España es uno de la literaturael restode su vida Se casóy cuentra afmidades. Es un casamiento los pasajes más vibrantes de! libro y divorció una sola vez. llevado a cabo con disgusto de su parte permite comprender la autentici que As! de simple. ¿Para qué más? y só! opara evitar la pobreza de la bohe dad en un relato de estas caracterís Bueno. Pues pordebajode esa planicie mia o e! regreso a la España cerrada y ticas elude cualquier criterio moral, corría un anchorío de serpientes) casiradora de! os años cincuenta, pers sólo hace referencia ámbito de las re al Es un pasaje que puedeleerse al co pectiva poco halagüeña para alguien laciones intimas. mienzo deLas cosascomofueron, y una con su hambre de mundo y su ambi Nieva combinael ejercicioautobio dura verdad. Nieva remonta sus me en güedad sexual. Acepta pues el matri gráfico- -que dominala primera mitad morias ese rio que le ha conducido, fi monio con una mujer de posición rele del libro, con la búsquedade unas li nalmente, a la plenitud. vante en el mundo intelectual, vién neas de fuerza que vinculen sus años do! o comouna tabla de salvación- -algo infantiles a su evolución posterior- -AnnaCahallé UCHOS textos autobiográficos tienen su origen ene! deseoma nifiesto de un escritor o de un drama turgo de iluminar su obra mediante una indagación abierta en su vida per sonal (y pienso, por ejemplo, en una pieza magistral como es la Linterna mágica de lngmar Bergman, concebida con esa intención) Cuando ese ejer cicio autobiográfico, complementario a la obra e igualmente creativo, se lleva a cabosiendo su autor conscientede la trascendencia de su empresa- -hacer explícito e! cañamazode la que surgióel resu! tadopuede ser magnifico. Lo es, sin reservas de ninguna clase, en e! caso de las memorias de Francisco Nieva, Las cosascomofueron. que Nada ver con! a retahila de personajes y anécdotas de algunos libros, o con e! re! ato pazguato y pusilánime de quien preserva! os aspectos más conffictivos de su vida en la recámara de! disimulo y la ocultación. Tratándose de Nieva además, un autor barroco y excéntrico (en e! mejor sentido) resulta difíci! imaginarse que el producto fina! de sus memorias sea un libro de contenido es cueto. Por e! contrario, e! libro sobrepasa peligrosamentelas 600 páginas de letra menuda a lo largo de las cuales Nieva se toma su tiempo para exponer los hechos de su vida y sobre todo la trama emocional en que se fundaron. Las cosascomofueron se estructura en tres partes. La primen refiere su in fancia y adolescencia manchega desa rrolladas en una atmósfera cultural de cimonónica y atrasada, aunque sólida M Un grancestode cerezas propio autor nos confiesa que la es Y todavía sigue. tructura caótica y azarosa de este Memoriasdeunhombredecineestá directamente inspirada en li bro la JUAN ANTONIO BAADEM novela Eyelessin Gaza (Ciegoen Gaza, EdicionesBarcelona, O. 2002 370 páginas, euros 16,50 1936) de AldousHuxleM maestro del el contrapunto, que siempreha sido uno de sus autores predilectos (pág. 101) Juan Antonio memorias es, para SCRIBIR Bardem (Madrid, unas 1922) comometerla mano en un cesto de cerezas: tiras de un recuerdo y, en redados con él, vienen muchos otros que, aparentemente, nada tienen que ver con el primero. De tal modo que, por ejemplo, la narración de algo acontecido en 1940 evocade inmediato un suceso de 1987, y éste nos lleva luego a otro de 1949. Esto explica el de sorden cronológico y la peculiar es tructura de estas memorias de un hombre de cine) Por otra parte, el E focos de interés de estas memorias. En primer lugar, claro, está la ca rrera cinematográfica de Bardem, en la que, además de las películas efecti vamente rodadas y estrenadas, im portan mucho los pmyectos que, por una razón u otra, no ha podidoreali zar o llevar a feliz término a lo largo de su vida, y que, de alguna forma, dan tambiénla medida de su gran ta lento. Después, destaca su actividad política y sindical y su compromiso cívico, que aquí se traduceen un in Focosde Interés Sin duda, tres los principales son tento de recuperar no sólo sus recuer dos personales, sino también la memoría histórica del franquismo y la transición y del papel desempeñado por los comunistas en la construc ción de la democracia. Y, por último, aunque no menos importante, está el continuo recuerdo de su familia. Hijo y nieto de actores y patriarca de un conocido clan de cineastas, Juan An tonio Bardem ha querido rendir en este libro un homenaje a los (cómi cos) y a la gente del show business. Por lo demás, son tambiénfrecuentes las críticas y los reprochesa la socie dad actual y a la industria cinemato gráfica, y, por supuesto, los ajustes de cuentas, principalmentecon los de mócratas de toda la vida los socia listas en general y ciertos rivales y colegas, pero también, y de manera muy especial, con algunos viejos camaradas. No creo, en fm, que, a estas alturas de la película, sea necesario recordar que Juan Antonio Bardemes uno de los pocos nombres fundamentalesde la historia del cine español. De todas formas, hay que reconocerque su ca rrera como director y guionista ha sido un tantoirregular, que, junto a ya verdaderas obras maestras, encontra mos también algunos trabajospura mente alimenticios y fracasos más o menos estrepitosos. Por no hablar de todos esos proyectoscinematográficos que se quedaronpor el camino. No es extraño, pues, que, en más de una oca sión, Bardemse vea a sí mismo en es tas memoriascomo un autor en gran medida desaprovechado o, incluso, como un perdedor nato Un peÑedon eso sí, que no ha tiradonunca la toalla, Y todavía sigue. Luis GarS Jambrina 22 ABC Cultural t 8- 5- 2002

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