CULTURAL MADRID 17-04-1998 página 58

h A B C de la ciencia 17 de abril de 1998 Caleidoscopio CENTINELAS DEL CUERPO HUMANO Las células dendríticas (DC) DCs fueron identificadas por del sistema de las células primera vez en el año 1868 presentadoras de antígenos (APC) como células de Langerhans cutáneas, pero su caracterización son un componente destacado de es bastante más reciente la respuesta inmunitaria. Las NUCLEÓTIDOSY RESPUESn INMUNE U N estudio llevado por un equipo de investigadores norteamericanos- del Centro pediátrico Kíng s Daughters. en Norfolk, con un total de 311 niños ha demostrado que ¡a adición de nucleóíidos a las leches infantiles produce una serie de beneficios de relieve, Los nucleótidos son sustancias naturales que intervienen en la estructura de los ácidos nucleicos y participan en los procesos moleculares para codificar y transferir la infornnación genética en las células de todos los or. ganismos. Como explica et profesor Ángel Gil Hernández, catedrático de Bioquímica de la Universidad de Granada, los nucleótidos y los ácidos nucleicos son constantemente formados y degradaddos, especialmente en tejidos con un rápido recarT bio. como la piel, mucosa intestinal, células rojas y blancas de la sang. i- e y el sistema inmune. En ese estudio que dirigió el doctor Pickertng se subraya también que aquellos nifios que ingirieron leches infantiles enriquecidas con nucleótidos produjeron más anticuerpos tras la vacunación frente al Haemophilus influenzae tipo b (Híb) y ta difteria, y además registraron rhenos lasas de pro- cesos diarretcos. Et Hib, como se ha demostrado, está invofucrado en la aparición de laririgttis, conjuntivitis, neumonía atfpicá y endocarditis, entre otros procesos. La iniciativa de enriquecer con nucleótidos tas leches infantiles parte- jde ta demostración de fas bondades constatadas en la feote naatemá; reducción de! riesgo 06 aierjgías V de Bifecciones en vías respíratóms- altas, estimuiación ¿tel sistemair tuney fortaiecimierito del diBsa, rtDBo óérebrai. entre otras. te, s fcfa cpéÉtfetá e; ma- terna tiéine uñ cortíénrdb. -éni, proteínas, grasas, mineráíes- hidratos decaf: bono íde iT? aite- adecáaíte- pjairai el intestino deí recién nasitío. En opinión dét cSúctót Rofand Kteinman, uno de ios, maifíorés; expertos en nutrición pediátrica, que; tábaía en et hospital Massachusetts, én, Boston, ¡o más destacabíe del estudio dé Norfolk es que evidencia! a posibilidad de modular la respuesta inmune en un niño mediante la adición de nucleótidos a tas leches infantiles. Y, en todo caso, es una buena noticia para aquelias mujeres que no pueden amamantar a sus hijos, ya que ta existencia de estas sustancias añadidas a tas leches infantiles tradicionales pueden ayudar de forma decisiva a sus hijos. J. M. FERNÁNDEZ- RÚA L AS células B, precursoras de las células secretoras de anticuerpos (Ab) son capaces de reconocer directamente Ags naturales mediante sus receptores especializados (receptores de células B) sin embargo, los linfocitos T necesitan que el Ag sea previamente procesado y presentado por una APC, Los receptores de antígenos de las células T (TCR) reconocen fragmentos de Ags unidos a moléculas propias del complejo principal de histocompatibilidad (MHC) complejos que son expuestos sobre la superficie de las APCs, Las proteínas que se unen a los fragmentos peptídicos de los Ags procesados son de dos tipos: moléculas MHC de la clase 1 y de la clase 11, que estimulan a las células T citotóxicas (GTL) y a las células T auxiliares, respectivamente. Los Ags intracelulares (por ej. virus) fragmentados enzimáticamente en pequeños péptidos en el citosol de las cen importantes funciones de regulación inmunitaria. La cantidad de complejos MHC- Ag específicos en la superficie de las células tumorales o en las células infectadas, es pequeña; además, los clones de células T que ejercen la vigilancia inmunológica son escasos y sus receptores tienen baja afinidad, A ello se suma el que las células tumorales y las infectadas carecen, frecuentemente, de moléculas coestimuladoras que inciten la BXT pansión clonal de las células T, la producción de citoquinas y su desarrollo como células asesinas. Las DCs proporcionan el medio para solucionar tales desventajas. Las DCs son centinelas móviles cuya distribución optimiza la captura de Ags, que procesan y ofrecen en grandes cantidades sobre su superficie, y migran, mientras expresan moléculas coestimulantes, a los órganos linfoides (bazo y ganglios linfáticos) donde facilitan la selección clonal de las células T. También inician y potencian la respuesta inmunitaria estimulando a los linfocitos B y T en reposo, indiferenciados y de memoria. Ninguna otra célula del organismo exhibe la forma y la motilidad que las CDs. En la piel, en las vías aéreas y en el sistema linfoide son estrelladas e inmaduras (incapaces de estimular células T) Sin embargo, estas células están bien equipadas para capturar Ags que, una vez engullidos, inducen la maduración y ia motilidad de las CDs (células activadas, de perfil arbóreo o ramificado) Las DCs inmaduras procesan los Ags, capturados mediante fagocitosos o macropinocitosis, a través de la vía endocítica, rica en moléculas MHC II que descarga los complejos tras su maduración completa. Durante este p r o c e s o las Las células dendríticas tienen relevancia en trasplantes APCs, se unen con moléculas MHC de la clase 1 (MHC 1) el complejo MHC i- Ag será reconocido por los CTLs que, una vez activados, atacan y destruyen a la célula diana. Los Ags extracelulares son endocitados y procesados por la APC; los fragmentos resultantes se unen a moléculas MHC I i para ser reconocidos por las células T auxiliares, que ejer- 58 Recientes estudios involucran al sistema de las células dendríticas en la inducción de tolerancia antigénica periférica CDs se movilizan y migran, se trastocan a la superficie las moléculas coestimulantes (diferentes Ags de la clase CD: clusters of differentiation y se producen y liberan interleuquinas prolinfocíticas (11- 12) La maduración de las CDs es crucial para la iniciación de la respuesta inmunitaria. Así como la lL- 10 puede bloquear la maduración de las CDs, otras ILs pueden inducir el compromiso dentrítico a partir de diferentes progenitores hemetopoyéticos y de monocitos circulantes. Las DCs también favorecen la respuesta de los linfocitos B y, en especial, intervienen en su viabilidad y diferenciación y en la organización de los folículos primarios de células B. Recientes estudios involucran al sistema de las CDs en la inducción de la tolerancia antigénica periférica, con lo que el papel de las DCs adquiere especial relevancia en numerosas situaciones clínicas hasta ahora protagonizadas por las células T: trasplante, alergia, enfermedad autoinmune, resistencia a la infección y al desarrollo de tumores, inmunodeficiencia y vacunación (Nature Med. 19 marzo 98) Pedro GARCÍA BARRENO