BLANCO Y NEGRO MADRID 10-09-2000 página 61

4. 5. r- Tr- J SrV Jli f J f: Tif: tlTiT: V T T- -Sa de las butacas, un traje de B 6. a la tHDiiOKca, decorada con muebles de época. E regencia y está firmada por Jacob. La enorme cocina, donde se encuentra un Ubro de firmas de visitantes de ta casa. La biblioteca coronada por un lucernarío. Al fondo, un retrato de la abuela deE actual marqués, firmado por Bonnat; a la derecha, un cuadro de Renoir. s que en el se unen el pasado y el p r e s e n t é S m H B f r a l Hay alegría de vivir en esta casa tan antigua. Será por la música, tan importante para sus dueños, pero allí siempre se respira un aire de fiesta. Bailar un vals en el salón de baile del Castillo, con Guy D Arcangues, es una de las sensaciones más fascinantes y difíciles de olvidar que he podido tener. El juego es también importante para ellos y recuerdo que organizaban divertidas partidas de billar y de backgammon, pues su carácter lúdJco favorece el reto, la aventura y el riesgo. La casa es una casa mágica, como los son sus habitantes y esta virtud se ha transmitido de generación en generación. Quizás su carácter alegre, vivo y aventurero viene dado por sus propios orígenes más latinos. En los Arcangues, se mezclan las sangres boliviana, francesa, española y brasileña, como lo hacen también fantasía, música, tradición, cultura y alegría popular. De este modo, puedes estar en una cena con la gente más importante y que, de pronto, interrumpa una fanfarria del pueblo vecino que está en fiestas y todo el mundo se pone a bailar. Ya mis padres fueron muy amigos de los dueños de esta casa y yo no recuerdo cuándo comencé a ir a jugar a Arcangues, pues esto forma parte de mi memoria infantil. Son una familia entrañable, llena de amigos, llena de alegría de vivir, que ha hecho mucho por Biarritz. BXN 61