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BLANCO Y NEGRO MADRID 11-10-1978 página 59
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BLANCO Y NEGRO MADRID 11-10-1978 página 59

  • EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
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Teatro fcM- 7 Cataldnía EIS lOGlARS, BORRÓN y CUENTA NUEVA ASI al mismo tiempo que la Constitución terminaba su estancia purgatoria! en el Senado, la cartelera teatral madri leña acogía con honores de estreno en España el último espectáculo de Els Joglars titulado M- 7 Cátalonia. Estrenar en Madrid, no en Barcelona; reaparecer d e s pues del desastre con un espectáculo firmado por Boadella y construido en el exilio (Catalunya Nord, se dice en el programa) venir a un teatro madrileño con un montaje en catalán, cuando ya están difíciles las cosas para los que trabajan en castellano, son hechos que piden una explicación, porque la tienen. C M- 7 Catalónia Retrato de familia de una cultura en trance de extinción Corona, el Ejército y la unidad de España) Sólo las fotos de los joglars en el exilio y en prisión a la entrada del teatro y los aplausos a escenario vacío cuando termina la función, recuerdan que el problema aún no se ha solucionado. 1 resto es una meditación amarga, pesimista, sobre las raíces culturales y sobre las posibilidades de supervivencia de Cataluña como nación, no ya por la amenaza de restricciones autonómicas que se deriven del nuevo marco de convivencia que se establezca en el Estado español, sino porque otras culturas más poderosas, representadas en el espectáculo por la anglosajona, harán de Cataluña- -y acaso de los otros pueblos mediterráneos- -una provincia más de su expansión imperialista. una conferencia para la aplicación práctica de culturas extinguidas dentro de la planificación general del informe Wallace Mülier que es el subtítulo de la obra. Los únicos rasgos que ss recuerdan de aquella cultura extinguida son sus formas de vestir, sus hábitos culinarios, sus ritos religiosos, sus maneras de relación elemental... Es decir, una colección de fotografías para turistas o clichés de la vida cotidiana, nada heroicos, nada edificantes, nada prepotentes. ¿Cómo se interpretará esta negra meditación en Cataluña? ¿Entenderán los catalanes, encaramados en la nueva ola nacionalista, como injusta esta simplificación de los ideales por los que luchan? ¿Se sabrán sobreponer a la gélida ironía de Boadella, metido ahora a aguafiestas de las esencias nacionales? Porque lo cierto es que aunque el espectáculo se haya estrenado en Perpignán y pase unas semanas en Madrid. su destino es Barcelona. El recorrido es el de todos los retornos d e s d e que volvió Tarradella. Lo que se ignora es el recibimiento. Donde hay pocas pegas que poner es en la construcción del espectáculo, absolutamente profesional, de una extraordinaria belleza, en un espacio diseñado por Fabiá Puigcerver, que hace retrotraer la memoria a la época de Mary d Ous del grupo catalán, espectáculo e n el que la huella de Albert Boadella era también todopoderosa. Justo es dedicar al retorno (que no i retorna de Joglars los mejores deseos y nuestra hospitalidad de madrileños. 59 Aibert Boadella Se asegura que asistió ds cógnito al estreno PERPIÑAN- BARCELONA CON ESCALA EN MADRID El estreno en Madrid de Els Joglars integrado por nuevos actores, con el único punto de continuidad de la dirección de Boadella, tiene el sentido de un recordatorio; el de la causa de la libertad de expresión que aún, mientras no diga lo contrario la Constitución, sigue encontrando notables dificultades en este país. No ha habido amnistía para Els Joglars y un proceso semejante, el de Ramón Sagaseta del grupo Lagunak en el País Vasco está a punto de comenzar. En la Constitución que termina su paso por el Senado se relega la jurisdicción militar a delitos cometidos por militares (Art. 110) pe; -o el proceso podría celebrarse antes del referéndum. Estaremos en Madrid cuando se apruebe la Consttiución- ha declarado Boadella- -porque lo sucedido con el grupo es algo propio del franquismo. El discreto recordatorio de Els Joglars exento de revanc hismo y de demagogia, en la cartelera madrileña, no quiere hacer referencia al pasado inmediato del grupo porque piensan que la fuerza del argumento político reside en la afirmación de su trabajo, en la continuidad y en la supervivencia. M- 7 Catalónia no plantea problemas de censura, ni raya en los linderos de intocable hoy por hoy (la Els Joglars como los lectores saben, es el grupo teatral de Cataluña con más años (16) y más prestigio Internacional y también uno de los puntales de la vanguardia teatral en nuestra península. Su anterior espectáculo, La torna fue un homenaje a la memoria de Hein Chez (que fue cómico antes que apatrida polaco acusado del asesinato de un guardia civil) ajusticiado junto con el anarquista catalán Salvador Puig Antich en las penúltimas penas de muerte del anterior régimen. Para Els Joglars la simultaneidad de las dos ejecuciones (un delincuente común y un militante político) contribuía a desdibujar, delante de la opinión pública, la personalidad del anarquista catalán. El polaco Hein Chez cumplía en la opinión del grupo de teatro la función de torna que en catalán significa el trozo que el tendero añade a la balanza para redondear el precio que ha pedido su cliente. La metáfora les costó a Els Joglars un proceso memorable desencadenado por la jurisdicción militar que terminó con la condena de dos años ds prisión a cuatro miembros del grupo y con el exilio de los demás, entre ellos el director Albert Boadella. El proceso acarreó también una movilización de fuerzas políticas y culturales de la que quedará noticia en la crónica de la transición democrática de este país. EL RAPTO DE CATALUÑA Els Joglars o mejor dicho Boadella, porque es su firma la que predomina en el espectáculo, a u n q u e esté construido a través de improvisaciones de todos sus miembros, proponen una situación teatral metida a profecía y a advertencia futurista, por otra parte ya utilizada abundantemente en otros géneros literarios: dos doctoras en antropología conservan como residuo de una cultura ya extinguida, perteneciente al enclave 7 del mapa del Mediterráneo a cuatro ancianos con los que ensayan la reproducción de los gestos cotidianos, ya olvidad -s, que fueron comportamien, is sociológicos en la ancestral Catalónia. Estos cuatro ancianos serán la ilustración de

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