Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
BLANCO Y NEGRO MADRID 04-05-1974 página 27
BLANCO Y NEGRO MADRID 04-05-1974 página 27
Ir a detalle de periódico

BLANCO Y NEGRO MADRID 04-05-1974 página 27

  • EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
  • Página27
Más información

Descripción

ese prepósito, probablemente asfixiado por el cerco y la intimidación de la ortodcxi a salazarista, presta a fulminar con el anatema de desviacionJsmo cualquier tentativa de reforma, cualquier intento de salvar el abisme entre un pueblo sin voz y sin pulso y una superestructura p o l í t i c a de fantasmagórica ficción. 4. No es argumento de entidad suficiente intentar descalificar el golpe portugués en razón de la quiebra de la legalidad constitucional que supone, soslaya- ndb una mínima profundízación en la naturaleza de la sedicente legalidad quebrada. En último término, el conceoto de legalidad remite al de legitimidad y éste, sociológicamente, sólo puede ser entendido como la sintonía entre el poder y el conjunto de aspiraciones, ideas, valores y creencias que gocen de una vigencia social generalizada. El mismo curso de los acontecimientos acredita suficientemente la calidad de la legalidad cancelada. ¿Qué pensar de un orden político que no encuentra otros defensores que los funcionarios de una policía política cuya resistencia encuentra explicación suficiente en el desesperado intento de evitar el tener que dar respuesta de sus conductas? ¿Cómo explicar a cerrada unanimidad militar? ¿Cómo explicar la falta de cualquier asistencia popular a l Régimen desalojado? Es falaz calificar de incoherencia el que quienes lamentamos intervenciones militares de otro signo acojamos con viva simpatía la intervención militar portuguesa. Las similitudes no pasan de ser formales. El artificio electoral portugués no resistía la más leve consideración crítica. En todo el área occidental resultaba muy difícil encontrar un ejemplo más desalentador qí ¡e el portugués de atonía cívica, desinterés, vuelta de espaldas a la cosa pública, auténtica postración ciudadana. La experiencia, casi inacabable, de que su voluntad era un factor absolutamente irrelevante para e! rumbo de las decisiones públicas, habían convertido al pueblo portugués en un inerme convidado de piedra ¿Cómo defender la legalidad que aboca en resultados tales? 5. Portugal ofrece uno de los más increíbles ejemplos de concentración monopolista, económica y financiera. Los Mellos, los Champalimaud, los Quina, los Brito, los Copertino de Miranda... sobran dedos en a mano para agotar el abanico del poder económico- -el poder real- -portugués. Aunque resulte prematuro aventurar ninguna hipótesis, por lo insuficiente ds la información, no parece verosímil, dada la significación de Spínola y el cursc de los acontecimientos, que este tcdcpodercso clan sea del todo ajeno al golpe (o al menos, que io vea con hostilidad) Acontece que la comprensible impotencia del ejército portu- gués para hacer frente a las luchas de liberación africanas, colocan un punto de grave incertidumbre sobre las inversiones en Angoia y Mozambique; si a ello se añade la práctica inexistencia de un mercado linterior suficiente y, la marginalidad portuguesa respecto a la C. E. E. se comprenderá que el capitalismo nacional opte también por la liberalización. El fascismo ya no es ni siquiera un buen negocio para los grupos que siempre y en todas las latitudes lo alentaron y financiaron. Los grandes intereses portugueses no podía ensayar la vía neocapitalista con la ortopedia del postsallazarismo. 6. En los medios de opinión conservadora se han dejado sentir voces de preocupación y alarma por el estallido del júbilo popular y, sobre todo, por la inequívoca significacic n izquierdista de tales manifestaciones. Confiamos y deseamos, naturalmente, que Portugal no caiga en el caos y las propias características del golpe y la rectoría del general Spínoía excluyan la hipótesis de un curso revolucionario extremoso de los acontecimientos. Lo que no se puede pretender es que unas fuerzas políticas reales, una clase obrera, sujeta a medio siglo de persecución, no dé, en semejante oportunidad, testimonio de alborozada comparecencia. En cualquier caso, si tal hipótesis se verificase, las responsabilidades plenas recaerían sobre la situación cancelada y no sobre los militares alzados. Salvo que se crea preferible la injusticia y la opresión al desorden, o se piense que el tapón de una botella de champán salta por causa de la mano que desanudajsus alambres y no por efecto del gas del vino espumoso. Proscribir ia realidad apareja siempre estos riesgos. Si el golpe, lamentablemente tardío- -sobre todo de cara al problema colonial, difícilmente abordable ya con las fórmulas federativas sugeridas por Spínola en su libre- se hubiera producido años atrás, los temores tendrían menor fundamento. Si los militares alzados aciertan a no prolongar indebidamente su permanencia en el poder; si el anunciado proceso constituyente se desarrolla con el ritmo y energía que es de desear; si no se producen nuevas proscripciones y la legalización del pluralismo restituye a Portugal la olvidada vitalidad ciudadana, parece posible- -aunque erizada de dificultades- l a tarea de reconducir la vida pública del hermoso país hermano por el deseable sendero democrático. La presencia en el país de una figura tan mod erada como el dirigente social- demócrata Mario Soares es un síntoma elo cuente de la posibilidad de sostener con energía y tino, sin contraproducentes desbordamientos, e I proceso liberalizador. Emprobrecido y desangrado por una guerra sucia y sin sentido; aislado en un auténtico iazareto internacional por su inconcebible aferramiento al colonialismo; con una pavorosa tasa migratoria. impulsada tanto por el subdesarrello como por el afán de evitar la participación en una lucha sin sentido; retrasado sensiblemente en el concierte europeo; en pcstracción- económica, política y social, éste es el Portugal que heredan los patrióticos miembros de la Junta de Salvación Nacional. En el libro de Spínola, se puede leer: Debemos deshacer el mito de que estamos defendiendo el Deciden- te... Debemos también deshacer el mito de que la esencia de la nación portuguesa es la misión civilizadora... En f i n el libro de Spínoia es una recopilación de palmarias desmitificaciones, transidas de buen sentido... Su triunfo, el triunfo del golpe, es el triunfo de la realidad sobre la ficción, regla política de valor universal. Y es que, como Ya escribía en su editorial del pasado domingo sobre el gran tema nacional de las asociaciones, servir a la realidad es el primer rnandato del político. Empeñarse en configurar las cosas a la medida del deseo es querer lo imposible. La realidad acaba vengándose, tarde o temprano TELEGRÁFICAMENTE E L suceso portugués reclama nuestra atención preferente y espacio. Anotemos, telegráficamente, otros temas de la actualidad, cuya entidad exigiría posteriores abundamientos. Ha aparecido en el Boletín Oficial de las Cortes la Ley Orgánica de la Defensa. Absolutamente importante. Una visión reformista de nuestro Ejército. Europa, telón de fondo de nuestro debate político. Conferencias destacadas sobre el tema de José Luis Cerón, en Madrid, y Luis Jáudenes, en Granada. Y un libro de obligada recensión: el de Antonio Sánchez Gijón, El camino hacia Europa Otro libro político de atención obligada: la recopilación de discursos de Licinio de la Fuente. Presentación de los premios Fraga de periodismo. Bastante más que un acto social o literario. Por si fuera poco el ancho repertorio de méritos de Manuel Fraga, alguno de sus eventuales competidores de futuro parece empeñado en autodescalificarse con estrambóticas actitudes de discrepancia gastronómica. Es normal que sean cada vez más y más expectantes los ojos que se vuelven hacia Londres. Al tiempo de escribir, expectación y mayoría de movilización azul en torno a la presencia del ministro secretario en Alcubierre. Que uno recuerde, ss ésta 1 a primera vez que el acto conmemorativo del más heroico episodio de la Falange aragonesa recibe el espaldarazo de una presencia ministerial. Y más: los precios. Gabriel Cisneros 27

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.