BLANCO Y NEGRO MADRID 12-05-1962 página 22

ALTA COSTURA FRANCESA EN LA BODA DE PRINCIPES DE ATENAS LOS TALLARES D LOS MODISTAS PMECEN Ci ónica de nuestro corresponsal Federico ENTRO de breves días, cuandio hajo el ielo medáteíráneo el sol dore una vez más las minortaI 3 (piedras de Atenas, que coronH majestttosamenle el Partenón, las campanas de iodos sus tentplos estallarán de júibilo reipicando alborozadamente a nuipcias. Entonces, la ciudad, vestida con siis mejores galas y florecida de un extreifao a otro ipor los colores de Grecia y España, será el marco espléndido e incomparafaile que retendrá el eco unánim, e de los emocionados vivas a Ja joven paireja de Príncipes. Vivas espontáneos y calurosos en boca de miles de personas de toda condición, aipiñadas estreohamemte al paso del Regio cortejo, camino d e la iglesia católica de San Dionisio. MemoiíaHe boda d Príncipes a la qoe asistirá la más briilanée y florida representación del Gotha, con los nomlbres más rancios e ilustres de la v i q a aristocracia sipañola, mezclados a otros miles de españoles que a este solo título y a su profunda raíz Inonárquica se habrán ya desplazado eh crucero mediterráneo para asistir a tan íausto e histórico acontecimiento. Nuestra crónica de boy es lun breve preludio de fiestas y sólo tiene I objeto el desvelaí el misterioso secreto de una treintena de g r a n d e s toilettes las cuales iserán lu- cMas por diversas reinas y princesas en dichas fiestas niipeialés, y especialmente para dar a la estampa algunos de los trajes que forman parte del trousseau de la joven y ncantadora novia del Príncipe D. Juan Carlos. El g i r a n modista Jean Dessés, con quien hemos hablado ün cuarto de hora para intentar sacarle algunas confidencias personales respecto al trousseau de la Princesa Sofía, i nos Tecibe de una manera simpática y afable, se escuda irredactiJ lement oWe ciertos detalles esenciales que, según sus palabras, serán hasta el mismo momehto de la ceremonia un riguroso secreto de Estado: el traje de novia y los vestidos de las odio Princesas ¡qoe co- mpondrán su cortejo de honor. Sin embargo, ganado p o r nuestra inistencia y con un gesto espontáneo que CASAS DE LOCOS GARCÍA- REQUENA en el tan esperado acontecimiento pola Reina María- José ide Italia y suis Altezas Reales las Princesas María Gabriela de Saboya, María Cristina de Saboya y Aosta, Anne y Claude de Francia, y María Cristina de Bavíera y Borbón, algunos de cuyos croquis insertamos hoy en estas páginas. Del famoso modista Guy Laroohe, reproducimos seis modelos que llevará la Princesa Grace de Monaco, y dos para la señora de Gou landris, rico armador griego. Estos ocho diseños acreditan una vez más el gasto sobrio y refinado del modista preferido por Jacqueline Kennedy, esposa del Presidente de los Estados Unidos, y de la vizcondesa de R ¡bes, famosas en ios círculos de la moda por ser dos de las diez damas más elegantes y mejor vestidas del mundo. Y por último, el español Antonio Castillo (creador de lá firma LanvinCastillo) nos facilita cuatro croquis cuyos modelos serán lucidos por la Princesa Joseíina- Carlota de Luxemburgo, hermana del Rey Balduino, y por la marqueisa de Casa- Vaidés. Entre sus encargos figuran también varios trajes para la condesa de Motrico, esposa del embajador de España en París, y los de otras damas de la más alta aristocracia española, de las cuales no ha sido posible obtener la autorización a tiempo para que sean poblicados los diferentes croquis que marcan sus respectivos encargos. íNsturalmente, existe un gran número de Altezas y damas de la aristocracia española y extranjera, que sobre sus fabulosos trajes se adivinará la tijera maestra del creador número uno Cristoba! Balenciaga. Pero, como hemos repetido infinidad de veces, todo lo que concierne a esta casa es poco menos que íaibú o dicho en otros términos, más en consonancia con el greimio, el telón de acero de la alta costura de París. He aquí de qué poderse ilustrar ampliamente con dos días d e anticipación, de toda una serie de preciosos modelos, los cuales nos han sido galantemente facilitados por gus creadores en obsequio exclusivo de las lectoras de BLANCO Y NEGRO. D jj y 9 K í fe r- w -i j j j I j dejó al descubierto su buen deseo de complacernos de algún modo, tratándose de BLANCO Y NEGRO, puso en nuestras manos un puñado de croquis, extraídos de la gran carpeta que encierra las copiáis de todos los modelos que constituyen el rico trousseau de la joven Pnimcesa. Jean Dessés vive desde hace dos meses en completo vértigo. Los talleres de este gran modista, de origen griego, baten el pleno de su actividad. Las petites mains se afanan día y noche en el minucioso trabajo de aguja que supone el llevar a fecto los costosos bordados que lluego serán lluvia de perlas y brillantes sobre finísimas telas y brocados. La calle bulle como una imnensa colmena, y Mme. Quilleret, la directora do los alones, va de un lado a otro tebrilmente dando órdenes lo mismo qae un general en jefe en pleno campo de operaciones. Pero el agobio que hace denso el ambiente en estas fechas de la casa Dessés no es sólo el numeroso trousseau de la Princesa, que abunda en trajes de mañana, de tarde, de cock- tail y d e noche (siempre en una tónica de colores pastel, según el gusto ipersonal d- í la Princesa, sin olvidar el importante capítulo del equipo de To: pa interior) sino una buena cantidad de vestidos para la Reina Feíderi ca, la Princesa Irene, Altezas de la Casa Real griega y damas de la aristocracia ateniense, más los ocho trajes de las Princesas qae forman el cortejo de honor: Princesa Irene de Grecia, María del Pilar de España, Alejandra de Kent, Ane Marie y Benedicte de Dinamarca, Irene de Holanda, Anne de Francia y Tatiana de Radziwill. Todos ios fines de semana, Dessés da el salto en Caravelle hacia Atenas, en donde permanece dos días con objeto d e ultimar mil detalles que faciliten la buena marcha de su arduo trabajo, que abarca de igual manera la complicada selección de todos los accesorios. En casa de Pierre Ba lmain (en mucha más reducida escala) la actividad reina en esta semana crítica d e ispeiras de boda, para poder tener a punto tres docenais de vestidos que serán lucidos