BLANCO Y NEGRO MADRID 17-09-1960 página 94
- EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
- Página94
- Fecha de publicación17/09/1960
- ID0005257784
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C i NE El presideriite del Centra Experimental de Cinematografía de Roma y supePintendente del famoso teatro de La Fenlce de Venecia, señor Ammannati, cambia impresiones con nuestro enviado especial, Vicente- Antonio Pineda. Ammannati ha dirigido el Festival durante cuatro años. Bardem; I vitelloni de Fellini, y Crónica de un amor de Aníonioni, con indudable y manifiesta supijrioridad de aquéllas sobre ésta. Otro tanto puede decirse de Adua y sus compañeras que parle de una idea valiente e importante: la readaptaoión a la vida normal y a la sociedad de ciertas mujeres. La secuencia inicial parece indicarnos que estamos frente a una gran película, pero después todo se disipa, en una acción torpe que incurre en la sensiblería y el artificio con situaciones fáciles y absurdas. Antonio Pietrangelii no ha sabido enfrentarse con el problema y se ha quedado en una producción mediocre y. equivocada. ALEC GUINiNES, PENDIENTE DEL RELOJ El paso de Alee Guinnes- -perdón, de sir Alee Guinnes- -por El Lido fué fugacísimo, batiendo un verdadero record de actividad contra reloj. Llegó al aeropuerto de Treviso el domingo, a las cinco de la tarde; media hora después celebraba una conferencia de Prensa, más larde hizo una visita al Consulado inglés en Venecia para resolver el problema de un amigo que le acompañaba en el viaje y tenía caducado el pasaporte. De vuelta al Lido con el tiempo justo para ponerse el smoking acudió al Palacio del Cine, para asistir a la presentación de sil p e lícula Whisky y gloria escoltado por cuatro gaiteros que vinieron expresamente de Escocia para esta ocasión. Terminada la proyección del film fué a cenar, y a las cuatro de la mañana se dirigía al aeropuerto, para estar en Londres, actuando en un teatro, a los ocho de la tarde del lunes. La mayor ovación que se ha tributado en el Festival ha sido la que los mii doscientos espectadores que llenaban la sala ie dedicaron, rompiendo la indiferencia y la rutina de los aplausos corteses de otras noches. Guinnes recibió el homenaje caluroso y sincero del público. Gracias al rigor con Claudia Capdinaie, Tomás Millan y Betsy Blair forman un trio de ases del cine q u e se m u e s tran felices. C o n naturalidad complacieron a los inevitables cazadores de autógrafos que nunca faltan en ios Festivales,