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BLANCO Y NEGRO MADRID 27-02-1960 página 117
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BLANCO Y NEGRO MADRID 27-02-1960 página 117

  • EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
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establecimiento, y le acompañaron en Ja ambulancia hasta la Casa de Socorro, no h a n podido demostrar dónde se hallaban durante la medía hora aue precedió al, instante en que Jacques Tarrier cayó al suelo desmayado. El inspector Delar levantó una mano. ¿Qué móvil tenía Javier Goras para maitar al pintor? -La venganza, puesto, que Tarrier había inutilizado u n lienzo en el que Goras llevaba trabajando cerca de dos años. ¿Y la chica? Había disputado con él la notíhe anterior. Al parecer, el pintor se había cansado de lia y saJía con un corista del teatro Mandor -Adelante. -HNO se h a n hallado restos del veneno ni en la copa, ni en los pinceles (pues Jacques Tarrier tenía la costu 0ii bre de chuparlos cuando eran nuevos antes de emjbadurnar- los de pintura) n i hemos podido averiguar si comió alguna otra cosa durante el cuanto de hora que- precedió a su muerte. En el Museo entra y sale u n a multitud de gente y nos h a sido imposible hasta el momento localizar u n testigo que, suministre información sobre el caso. ¿Se h a n encontrado huellas dactilares en los instrumentos de trabajo del pintor? -Únicamente ¡as suyas. ¿Tenemos el lienzo que estaba pirutando? -Sí. Ha a el favor de decir que lo traigan. Unos minutos después, Paden y Delar contemplaban, el retrato de una mujer de unos treinta años, de facciones delicadas, vestida con un traje de noche negro. Un collar de perlas rodeaba su cuello laxgo y transparente. Tenía el cabello oscuro, la boca cansada y unos hermosos ojos grises; sin embargo, en el izquierdo una pequeña mancha parda turbaba la mirada y la armonía de aquel rostro. Bien- -dijo el inspeetpr, después de irnos minutos de silencio- ¿Ha interrogado a los detenidos? -íEstán esperando abajo. Los he traído a. Jefatura por si deseaba usted personalmente someterles a un interrogatorio. ¿Sospecha usted de alguno de ellos? ¡Del muchacho, señor. ¿Etor qué? Es el que está más asustado, y sus antecedentes son pésimos. Ha pasado dos años en un correccional. ¿y la mujer? No creo que sea ella. Faden enrojeció ligeramente. v- ¿És guapa? -S í señor. -Está bien. Cirea que ya sé quién ha envenenado a ese desgraciado artista. ¡Lá ima que no esté en la ciudad mi colaboradora, para, exponerle este curioso caso! ¿Quién lo mató? itfi BflMili yimrfg 1 r Carias a mí Por Luis de Acedo -i- -1 I í- m nomfee dé r fi Wk, tíeae dinero, fe? i uM mmr con. SiVU V- mentim U iLaaes n o QS WrWr I f e i T H 07 zá 4 Polo qi; ¡myrjJÁmriz que vr WÍ U ¡y J ¿z- son- sea Soa- siirt NMB

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