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BLANCO Y NEGRO MADRID 10-11-1935 página 134
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BLANCO Y NEGRO MADRID 10-11-1935 página 134

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i E S T E E X O S EN M A D R I D NATIVIDAD P I N E R O Y LOS S E Í Í O R E S C C E V S Y C O K T t S EN L A I S L A DE LOS S l- E Ñ O S C E f T O L Í R I C O D E MA. N UEL O. BEXÍJOA, AfÚSICA D E f VALERIANO M I L L Á N ESTRENADO COX GKAN A P L A l S O EN E L T E A T R O IDEAL nio O NeílI lleva cuarenta años anunciando que está próximo a terminar su poema teatral La familia norteamericana, varios autores incipientes e impacientes pretenderán anticiparse a O Neill estrenando obras con idéntico asunto familiar. Y cada estreno de esos juveniles comediógrafos será una batalla mucho más imponente que todas las reñidas por la posesión del Chaco boreal. Los críticos descubrirán cuando menos a dos autores norteamericanos indiscutiblemente geniales Inmediatamente los nuevos astros de la dramaturgia se marcharán a Hollywood, y nunca más se tendrán noticias de su existencia. El crítico humorista que firma con el seudónimo de Bisturí, proclamará que una actriz de tercer orden es superior a Eleonora Duse y a Greta Garbo, y la infeliz, tomando en serio los elogios, exigirá, para contratarse, mil dólares semanales y un automóvil para que su doncella pasee a su perro favorito. En el transcurso del mes de enero, una comedia muy mediocre alcanzará excelente acogida de la crítica; el público acudirá al reclamo; una Empresa productora de películas pagará cincuenta mil dólares por el derecho exclusivo de adaptación de la comedia, y luego la cinta cinematográfica será silbada con ensañamiento. La primera obra que lleve a escena la guerra entre el Japón y los Estados Unidos será recibida con explosiones de entusiasmo patriótico. Los dramas que con el mismo asunto se estrenen posteriormente, atm cuando algan más que el primero, se considerarán lánguidos y faltos de originalidad. El renombrado crítico señor Brown continuará, como de costumbre, censurando acremente todo lo que encomien sus compañeros, y elogiando con entusiasmo todo lo que reprueben sus colegas. Seguirán acti ndo de ingenuas colegialas respetables matronas cincuentenarias, en plenitud de juventud v de facultades artística. Ningún actor que pese cien kilogramos o exceda de este peso puede aspirar al beneplácito de la crítica. Tampoco se tolerará que un actor elegante interprete papeles de cargador, marinero, barrendero, mecánico u otro donde no pueda lucir la perfección y buen gusto de sus trajes. Se fundará una revista sefnanal titulada El Arte del Teatro o Teatralerías, que vivirá mientras la subvencionen empresarios y actores, y que tendrá corno fines efectivos publicar retratos de los subvencionadores y atacar duramente a los críticos profesionales. Según acontece cada tres años- -y van dos sin haberse registrado el fenómeno, -el próximo año se revelará como dramaturgo el vaquero- poeta o el picapedrero- poeta El público se romperá las manos aplaudiendo el menos que mediano drama rural firmado por el novel autor, y éste saldrá a escena con el traje propio de su oficio. Luego, un periodiquillo satírico se encargará de divulgar que el vaquero o el picapedrero- poeta no es vaquero, ni picapedrero, ni poeta, sino un vivo que, de acuerdo con el empresario y asociado con un escritor pobre y desconocido, se ha prestado a la farsa, mediante un puñado de dólares. El truco es muy viejo, pero resulta productivo. Si hace falta agregarle más alicientes, se redactan e insertan unas gacetillas insinuando que la obra es un plagio escandaloso de la que tiene en cartera un personaje político de gran autoridad en cuestiones sociales y futuro candidato a la más alta magistratura del Estado -Y aquí- -declaró el crítico- -termina esta crónica, que pudiera proIongar. se indefinidamente. Del valor de estas profecías nombro por juez al mismo a quien Esquilo dedicó sus tragedias: Al Tiempo. Por la transcripción: M. WhiU.

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