Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
BLANCO Y NEGRO MADRID 30-06-1935 página 138
BLANCO Y NEGRO MADRID 30-06-1935 página 138
Ir a detalle de periódico

BLANCO Y NEGRO MADRID 30-06-1935 página 138

  • EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
  • Página138
Más información

Descripción

que son hoy del dominio público, pero que entendemos íue no hacen al caso. Nuestro punto de vista, completamente ob etivo, es el siguiente: Al concurso de radiodifusión nacional, a este tercer concurso que parece qtie va ia venció, han acudido afortunadamente la toalidad, puede así decirse, de las mejores casas constructoras de emisoras de radiodifusión que hay en el mundo. Son las casas que tienen inundada la superficie terráquea de altos mástiles, que a todas horas lanzan ontias hertzianas moduladas por las más bellas sinfonías musicales, por las mejores gargantas de los actuales artistas de canto, por los más elocuentes oradores, por las noticias de más actualidad e interés mundial. Seguramente cualquiera de las Memorias que acompañan a las proposiciones presentadas ofrece en orden de batalla centenares de nombres de emisoras en funcionamiento que merecen la mejor conceptuación y que han sido construidas por las marcas que avalan. técnicamerite cada propuesta. No faltará, de seguro, ningún sistema nuevo ni ninguna potencia extraordinaria, liasta la misma poter. cia de 500 kilovatios en antena, que es hasta ahora ía máxima potencia alcanzada, y de la que hay, como todo él mundo sabe, sólo dos ejemplares, uno en Rusia y otro en los Estados Unidos de América del Norte. Por otra parte, no es nada aventurado suponer que ninguna de las casas concursantes haya propuesto ningún tipo de emisora de radiodifusión ya anticuado, sino, por el contrario, lo mejor que haya salido de sus respectivos laboratorios, dada la innegable importancia del concurso y la enconada competencia con que de antemano se contaba. La Administración española que ha de resolver este concurso tiene ahora en sus manos una serie de ofertas que de seguro han de satisfacer cumplidamente las mayores exigencias de la técnica moderna. Gisi podría decirse que a cierra ojos cualquier proyecto elegido al azar corresponderá a una emisora de radiodifusión magnífica. Al menos, esto parece que sea lo lógico, pues ninguna de las casas concursantes es novicia en estas materias ni se trata de un concurso de meros aficionados a la emisión. Gomo consecuencia de lo expuesto, es, a nuestro modesto juicio, en este caso, la parte económica la que manda, parte económica que indudablemente es bastante, compleja, pero que, en definitiva, cuando existen diferencias tan enormes como la de 3, millones y medio entre la proposición más cara y la más económica, tiene desde lueSfo que influir forzosamente en la adjudicación la cifra total presupuestaria. íps hacemos perfectamente cargo de que en la parte económica, juntamente con esta cifra total presupuesta, han de tenerse en cuenta ía forma de pago (anualidades ofrecidas) y el mejor rendimiento, que si ciertamente puede no ser demasiado interesante cuando se trata de estaciones de no gran potencia y no excesivo servicio, tiene una importancia máxima cuando son emisoras de 20, de 30, de 50, de 60 y de 150 kilovatios en la antena, y han de estar en funcionamiento continuo durante catorce horas cada día. De un rendimiento de n 25 fwr 100 a un rendimiento de un 28 ó un 29 por 100 hay una diferencia muy grande del gasto anual de número de kilovatios- hora que habrá iue pagar de energia eléctrica para el funcionamiento de la emisora. Otro punto que también puede ser interesante en el complev jo económico es el de porcentaje de producción nacional, aunque en realidad casi puede asegurarse que todas las proposiciones han de tener un elevado porcentaje de construcción nacional, pues los edificios, mástiles, trefilería de cables de vientos y de hilos de antena y contrantena o tierra, transformadores, alternadores, grupos diversos, etcétera, etc. a más de la mano de obra de instalación, montaje y transporte dentro de España, tiene que ser incluido en el porcentaje considerado nacional, así como también en este porcentaje entran todo el gasto que supone la preparación de planos de construcción y memorias. En una palabra, no creemos que entre una y otra proposición de cualquiera de las cuatro presentadas el porcentaje de producción nacional pueda variar en más de tm 15 por 100; es decir, que si una proposición sólo Umilía su importación a un 20 por 100 de la cifra presupuesta, podrá haber otra proposición que llegue con su cifra de importación a un 3; por l o a Pero aun así sigue mandando la cifra total de la oferta, pues es obvio que el 20 por 100 de 40 millones, por ejemplo, son ocho millones, y que el 35 por 100 de 25 millones son sólo 8.750000 pesetas; es decir, una diferencia muy pequeña para compensar un mayor desemboüso que alcanza hasta 15 millones de diferencia. Porque, en resumen, creemos que España necesita un buen servicio nacional de radiodifusión, con unas emisoras que respondan a las últimas exigencias de la técnica; pero que, como después de realizado este primer paso, no habrían acabado los que haya que dar para conseguir ese buen servicio que pretendemos, sino que, por el contrario, quedan muchos millones que gastar para construir estudios en las poblaciones más importantes, líneas de transmisión de los estudios a las emisoras, etc. etc. es preciso andar con tiento y sin delirios de grandeza ra que pueda acabarse todo, ya que ni los tiempos son de demasiada abundancia, ni las posibilidades económicas extraordinariamente grandes. F de Jíragón,

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.