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BLANCO Y NEGRO MADRID 23-06-1935 página 170
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BLANCO Y NEGRO MADRID 23-06-1935 página 170

  • EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
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Austria se orienta hacía el corporativisma Por KURT V O N SCHUSCHNIGG, canciller de Austrio A obra a la que dedicamos todos nuestros esfuerzos- -un Estado nuevo organizado sobre una base corporativa- -es la expresión contraria, clara y terminante del dogma de la necesidad de la lucha de clases. Nuestro fin debe ser exclusivamente e s t e la unificación de todas las fuerzas, nacionales. E s indispensable que nos ocupemos m u y particularmente de aquellos que son económicamente débiles para impedir que sucumfean en la lucha por la existencia. E l Sindicato General Obrero ha empezado j su labor de organización corjDorativa, de máxima importancia para las clases obreras. T o d o buen austríaco debe tener confianza en el Estado. Cada uno debe llevar a Austria en el corazón y considerar como ofensa personal todo aquello que pueda causar daño a ficantes de la libertad, que la predican y aimismo tiempo la ahogan. H a sido necesario dictar algunas restricciones a la libertad de palabra y de prensa porque sin estas medidas habríamos llegado al caos que constituye precisamente el pror grama de los que han jurado nuestra perdición. Tenemos el deber sagrado de no legar escombros a la generación que nos suceda. La libertad no puede concederse inás que enla medida necesaria para que no dé lugar ai abuso. N o se otorgan mercedes si no se tiene la seguridad de que esas medidas de clemencia no han de ser interpretadas por algunos como síntomas de debilidad. L a indulgencia y la piedad están indicadas únicamente en aquellos casos en que el que las aplicapuede responder de ellas, es decij, cuando está, plenamente convencido de que no puede derivarse de ellas ningún abuso. Libertad e indulgencia serán una vez más practicables cuando no exista nadie en Austria que crea posiblefomentar la revolución con fondos extranjeros y con libelos de excitación impresos al otro lado de nuestras fronteras. Libertad e indulgencia volverán a ser algo, vivo y eficaz cuando el principio Austriapara los austríacos prevalezca integralmente. Con la libertad, el pueblo reclama justiciay la mentira es el enemigo mortal de ésta. Ninguno de entre nosotros ambiciona el papelde dictador y nadie quiere privar a los obreros de sus derechos y libertades. La necesidad de disminuir los retiros de obreros y em- picados fué dictada, precisamente, con vistas a asegurar esos retiros que, sin estas medidas, hubieran sido discutidos. El Sindicato Central Obrero ha sabido evitar toda falta de humanidad en esta materia y ésta es otra prueba de que una representación obrera verdaderamente consciente, de acuerdo con los factores responsables del Estado, sabe velar por los intereses de los obreros y de los empleados. La verdadera justicia social consiste en la coordinación de los distintos intereses y en ia supresión de todos los abusos. T r a s de libertad y justicia, el pueblo reclama pan. La obra constructiva del Estado no se verá coronada por el éxito final hasta que el paro forzoso desaparezca. La justicia, la libertad y el pan no deben escasear en Austria en lo sucesivo y se hará lo necesario para que nadie sufra ya kámbre en nuestro país. Entonces podremos asegurar que éste se ha salvado. -Kurt Von Schuschnigg. Copyright Agence LUteraire Internationale) Servicio exclusivo para BLANCO Y NEGHO. agüella. S i todos los austríacos se sienten animados del deseo y de la voluntad de actuar, ante 3) oniendo a todos los intereses del país, todos deben también, obedientes a un solo mando, inspirarse exclusivamente en las consideraciones de la salud de. la patria. Cuanto a ésta aprovecha es bueno; cuanto le es perjudicial, debe ser combatido; cuanto pueda destruir los bienes de la nación o sea susceptible de pervertir a la generación joven, o tienda, en fin, a hacer revivir el odio de unos contra iros, es nocivo para la patria y debe ser destruido sin cuartel. P o r el contrario, ios que se esfuerzan en c u r a r las llagas, en persuadir a los hombres de la necesidad de una colaboración común, d e una entente general, realizan una labor fructífera y deben ser ayudados. E s preciso hacerse a la idea de que por encima de todas las divergencias de opinión existe una voluntad común y un solo camino que conduce a la nueva Austria. Con el fin de crear trabajo y de asegurar jin jornal al mayor número posible de trabajadores, hay que luchar sin tregua contra la despreocupación de los que se imaginan que, después de todo, nuestro país no padece de íantos males y que no son tantas las tumbas que én su suelo se han abierto prematuramente. Querernos oponer la revolución de la razón a la de la sinrazón y destrucción. La libertad se confunde demasiadas veces con el libertinaje, su mayor enemigo. Sepan cuantos predican que libertad significa autorización para jugar con e! fuego, u ocasión para despertar o acumular odios, que los consideramos como enterradores de esa snisma libertad que precisamente defendemos. Sabremos apartar de nuestro lado a esos tra-

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