BLANCO Y NEGRO MADRID 24-03-1935 página 129
- EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
- Página129
- Fecha de publicación24/03/1935
- ID0005479567
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I. K. llL, -SlAKIA BKU r PKPB SSBKB. T. EN UNA B. SCEXA UI- -B I GKAIf CIUDADANi. VUtrVA OBRA DB I R MUÑOZ SJiXÍA. BKTRRNAUA COS GRAN ARMT. JO KX El. T E A T U O R Í X A V! Í N T B (FOTO DUOl E) S Xí mujer. El nombre es ún seudónimo. La au- liberales. Los hombres inteligentísimos que tora tiene, desde lueg: o, un conocimiento per- dirigen aquellas formidables organizaciones fecto de la vida rústica en Injílaterra (el saben que tratan con artistas í no con merprimer acto se desarrolla en un pueblecito cancías. He llegado al convencimiento de de Leicestersliire) y de la vida americana que no hay casi nada sobre lo cual no se moderna (los dos actos restantes transcurren les pueda convencer. en el despacho de un hombre de negocios E! trabaje de Hollywood es duro. -Se en JN ueva York E n ambos casos, el dia- echan de menos los amigos ingleses. Dulecto local es perfecto. rante los primero. s meses de mi estancia allí, -Usted tiene. contrato con las Casas pro- trabajaba en el sel desde por la mañana ductoras dé Hollj vvood, y a pesar de ello hasta por la noche. Regresaba a mi casa quiere actuar en los teatros de Londres: tan cansada, que no n e quedaban ganas niás ¿cómo va usted a resolver la dificultad? que Dará reposar; por consiguiente, no podia crearme amistades. Más tarde las encontré, -continué interrogando a miss Wynyard. -En teoría, no habría dificultad alguna. desde luego. Pero hay que tener en cuenta Pero en la práctica, las hay. El ideal sería que uno no vive en su país, que se echa de trabajar seis meses del año en Hollywood menos a Europa, que Hollywood es un país y seis meses en un teatro de Londres, al extraño, y que se siente a menudo la nostalque debo los primeros éxitos de mi ca- gia de olver a un sitio donde el mundo rrera. Actualmente las cosas no se presen- no sea tan nuevo a Londres, a París, a tan todo lo bien que sería de desear; es Viena. No quiere decir esto que no haya decir, iles: ar a Londres y empezar a traba- aprendicTo mucho en Hollywood. í í e dejajar en se. aruida; primero hay que buscar una do amigos e- xcelentes. Y, sobre totlo. el haobra a propósito, y esto es a veces ctiestión ber estado allí es una experiencia que. ahode nieses; luegro, la formación de la com- ra que la tengo, no quisiera haber perdido pañía, la preparación de una pequeña tour- de ninguna manera. ttée para poner la obra a punto antes de- ¿No ha pensado ustetl en hacer pelícupresentarla en Londres, y una vez en Lon- las en Inglaterra? dres, buscar teatro. Todo esto, como stetl- -Ya lo creo. Me gustaría mucho hacercomprenderá, lleva mucho tiempo, y seis las algún día. Las mejores películas inglemeses son muy cortos, si no se tiene suerte. sas debieran ser (y lo son) tan buenas ci nio Sin olvidar, naturalmente, la despedida y ei las mejores del mundo. Pero Hollywoo l tieregreso a HOHVVVOCKI... ne todavía, en cierto sentido, reservas enor- -4 Qué compromisos y qué derechos tie- mes de experiencia y de recursos técnicos ne usted adquiridos en Hollywood actual- para que nadie se le adelante. Nunca hacen mente? -huliie de preguntar- ¿Tiene usted un film enteramente nialo. Por el argumenalgún control sobre las películas que hizo to de ía película nadie puede decir cómo se alii? va a desarrollar o a terminar, porque la di- -Los contratos eo Hollywood pueden ser rección en Hollywood es fiecididamente magmuy libres- -me contestó miss Wynyard- nífica. Es decir, que en íloilvwootl sa! en, No me refiero a las cifras actuales de los como en ningiin sitio de! mundo, cómo se sueldos. Si alguien tratase de disminuirlas hacen las películas malas o si ios artistas pretendiesen aumentarlas, las autoridades (con razón sobrada) interTiuhert Griffith, vendrían inmediatamente para que se cumpliese al pie de la letra lo pactado. Pero, tCoinfrifjht Londwi tíeufraí Presíf, SvrpitAo aparte de esto, repito, los contratos son muy e. Tvkf. ivo poní Bí. Aíí co x X K G B O