Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
BLANCO Y NEGRO MADRID 17-02-1935 página 153
BLANCO Y NEGRO MADRID 17-02-1935 página 153
Ir a detalle de periódico

BLANCO Y NEGRO MADRID 17-02-1935 página 153

  • EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
  • Página153
Más información

Descripción

Francia defiende el estado fijado por los Tratados de KLZ. Y para que la defensa sea completa, quiere que tocios los países se compronjctan a observ ar el statu quo y a deíenderio en caso necesario. El Pacto general, e! famoso Protocolo de Ginebra, ha fracasado hace diez años y pico. Pero desde entonces, la difilomacia francesa ha elaborado una serie de Pactos regionales, que convergerian en un Pacto europeo. Se comprende que la tese de todo Pacto sería la conservación del statu qno; el compromiso de reunir las fuerzas de los leales para castigar al agresor. Si el interés de. todos los países fitese idéntico, la realización del sistema francés no encontraría la menor dificultad. Pero- por citar un ejemplo- ¿cómo se. puede esperar que Hungría firme de buena gana su mutilación, lá pérdida de las dos terceras partes de su territorio? Otro ejemplo: ¿cómo se puede pretender que la Alemania racista renuncie para siempre a la unión con sus hernmnos de Austria y se comprometa, adranás, a etnptuiar las armas para defender la indepertdencia de aquella Austria que desde el punto de vista racista no tiene derecho a existir? Y precisamente porqué la adhesión de Alemania al statu quo, al sistema de los Pactos multilaterales ele mutua ayuda, puede ser correcta, siendo consecuencia de un comproníiso, pero nunca fruto de íntima convicción, Francia no tiene entera confianza en las intenciones del Reich. Aunque Alemania firme todos los Pactos qíie le presenten y aunque regrese a Ginetora, existirá siempre suspicacia por, parte de sus cofirman. r tes. La igualdad entre vencedores y vencidos no será completa; por lo menos pasarán varios lustros antes de que lo sea. El día siguiente a la firma de los acuerdos de Londres, Flandin se apresuró a tranquilizar a sus corr patriotas, diciéndoles que aun en el caso de que Alemania entre en el nuevo Pacto, y aunque se le autorice pa, ra aumentar sus fuerzas armadas, los aliados seguirán siendo más fuertes. La superioridad cierta e indiscutible de los defensores de ia paz constituye la medida preventiva más terminante para toda clase dé proyectos bélicos. Con estas palabras, el. jefe del Gobierno francés indica que dentro de la comunidad de las potencias se seguirá vigilando a Alemania y el acuerdo entre París, Londres, Roma y Moscú (por no haMar niás que dé los principales) bastará para impedir que el Reich pueda realizar sus eventuales planes de desquite. La coalición de fuerzas aéreas de los eventuales defensores de la paz- -añaíle- lebe asegurar á priori un convenio de tal naturaleza que nadie pueda caer en la tentación de apelar a la fuerza. EKTBIS ÜSTEÜ, CABAULXRO. JUAl A l- t a t A N -i í O H JUE ME INVITA líSTEP COIT TANTA ENTB? ¿NO PODRÍAMOS OHARÍLAB UNA VEZ A SOUtS? (De SimpUeH mtis, Muni i) nía, sus ex adversarios le volverían la espálela y la considerarían potencia con anhelos belicosos. Pero Aleniania dispondría, a pesar de todo, de fuerzas annadas más numerosas que las concedidas por el Tratado de Versalles. La disposición del Tratado que se refiere al desarme de Alemania ha caducado ya, quiéranlo o no adniitir los aliados. ¿Qué conseguiría el Reieái dando su firma? Únicamente la legalización de un hecho consumado. ¡Si al menos pudiese conseguir la igualdad de derechos! Pero ya sabemos que aunque pudiera hacer subir a la cifra de trescientos mil el número de sus soldados, quedaría siempre en vigor el artículo qué prescribe la desnrilitarización de toda la zona renana. Adeniás, como indican las palabras de Flandin, s c i r í a también la desconfianza; es decir, íá desigualdad en el orden moral. Lo que concederíáíi los aliados a Alenmnia, no sería sino la repetición de lo concedido solemnemente en Ginebra en diciembre de 1932, seis senjanas antes del advenimiento del régimen nacional- socialista. Los aliados retiraron entonces su ofrecimiento que habían hecho a la Alemania de Scihleicher. Prectsaimente por esto se ha retirado Hitler de la Sociedad de Naciones en octubre de 1933. La concesión fué lá ignaldad de derechos dentro de la seguridad para todos. Para Frandia, la seguridad consiste en los Pactos ¿Qué hará Berlín? de mutua grarantíá y ayuda. Para Alemania, Como véanos, AJemanta no conseguiría más bien en los acuerdos bilaterales de nomucho firmando los Pactos. Negainlo su fir- agresión y en un Ejército suficientemente

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.