BLANCO Y NEGRO MADRID 27-01-1935 página 54
- EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
- Página54
- Fecha de publicación27/01/1935
- ID0005481606
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S 1 J. Í í Í ARA EL ADORNO DE LA POBLACICV DE SARREBRUCK. ESTUVIERON PREPARANDO CORONAS Y CtriRNALDAS EN LA VIA PUBLICA, NUMEROSÍSIMAS MUCHACHAS DE TODAS LAS CLASES SOCIALES (POTO ORRIOS) movimiento racista turbó un poco la solución más bella, aquella que quizá se liupor ejemplo: el retorno unánime, sin disbiese impuesto con un Gobierno Brünning, crepancias, en una sola romería de fervores. Suscitó el racismo amores y enconos en toda Alemania, especialmente en las comarcas occidentales; a las cuales, por su proximidad a otro tipo de cultura, le son ajenas y poco simpáticas algunas de las tendencias que se agritan en tan copioso y confuso movimiento. Los enemigos irreconciliables se empeñaron en cambiar el sentido del plebiscito, susciriéndole a los sarrenses que era preferible no volver a Alemania a sufrir bajo el régimen hitleriano. Pero los sentimientos patrióticos se impusieron a las querellas de partidos. Una cosa es la patria, entidad perdurable; otra cosa es un partido. Y así los sarrenses votaron, no por el partido de Hitler ni contra el partido de Hitler, no en pro o en contra una parte o fracción, sino por la totalidad de una patria que siempre fué la suya. Y de este retorno del Sarre a Alemania, sean cuales fueren las vicisitudes de un país profundamente- -no superficialmente- -turbado, de eso hay que alegrarse, porque estos puentes del Sarre, en vez de servir para la comunicación entre las dos naciones, sólo servían para que se peleasen por ellos. Eugenio Montes.