BLANCO Y NEGRO MADRID 20-01-1935 página 157
- EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
- Página157
- Fecha de publicación20/01/1935
- ID0005180808
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NO SE MÜIfVAN, QÜE VA A S A U R TOT P A I A R H (De I Oewore, París. Pues del otro lado se podían esperar con- so de su población; es decir, que aumente cesiones en Aírica; una situación más des- el territorio de sus cokmias. H tercer inaliojíaida; estar en eí mismo campo con tei- és consiste en que nada amenace sus Francia e Inglaterra: n e -entuaJ apoyo ded fronteras orientales. Pues bien; el aceKaBanco de Francia. Sí, pero patu dio había tue renunciar a la altra sp- onda: a Dalmacia, y dejar de apoyar el revisionismo magiar. No imporía; todo tiene su precio. En las actuales circunstancias no se puede esperar la anexión de la orilla oriental del Adriático; quizá algún día, si el reino tripartito de Yugoeslavia no puede ya. mantener su unidad... 1 en cuanto a Hungría, el artículo XIX del Estatuto de la Sociedad de Naciones siempcre queda en vigor. Dispone el artículo en cuestión que cada país puede aspirar a la revisión de los Tratados por medios pacíficos, y como los Gobiernos húngaros han declarado vaTJas veces que no querían consesfuir la revisión por medios violentos, el cambio no será nonrinalmente importante. En Budapest se podrá seguir hablando de revisión, aunque sin la esperanza dé una realización próxima. Italia no se casa con nadie Su política e. stá determinada por sus necesidades e intereses. Su primer interés es que Austria no se incorpore a una gran Alemariia; es decir, que su vecina ao sea una potencia poderosa, sino un Estado débil, con el cual mantiene Ja mejor amistad. Su segimdo interés es que se creen tierras para el exceÜ. VliOM AiOISI, REPIlESEíJTANTB DB ITALIA