BLANCO Y NEGRO MADRID 11-08-1929 página 87

GRAN MUNDO mienzan las fiestas de la season de p r i m a vera, los propietarios de la insigne Abadía convocan a sus aniig- QS; bajo las gióticas a r c a d a s el piano, vestido de rico brocado, invita al baile, V es un espectáculo extraño, que suena casi a psrofanación, ver las arii síocr áti cas parejas ataviadas ellas con las últimas creaciones de la moda, deslizarse al compás de la música ultramoderna sobre el duro pavimento, que aira parece conservar las huellas flue allí dejaron los pies desnudos de los piadosos cistercienses. Por el claustro ojival pasaban e n a n i m a d o s grupos los i n v i t a d o s allí diplomáticos como el embajador de Italia y la condesa Silvia Manzoni; Altezas R e a l e s aristócratas, p o l í t i c o s a r t i s t a s t o d o lo que constituye el ígfrujpo más selecto de la sociedad cosmopolita. La hiedra, abrazándose a las esbeltas columnas, ha puesto la nota romántica en este claustro, iue aimíjue restaurado, conserva todo el misterioso encanto de los tiempos que fueron. Y así los visitantes, subyug ados por la magia del lugar evocador de tantos históricos recuei dos, más que en las fis; uras actuales, fijaban la m i r a d a- -l a VIIVGEN DB PIEDRA D E L SIGX. 0 X I V mirada de la imaginacaños en que monsieur de Vander Mersh, ción- -en las que ya no existen, dejando a reunía en su recinto a lo más granado de la memoria caminar hacia el pasado... la nobleza francesa. E s por esto por lo que el cronista no Dada la afición de los condes de Segur- pudo apuntar los nombres de los concuLamoignon- hoy señores de Royaumont- -rrentes ni la elegancia de las toilettes pria la vida de sociedad, que se traduce en maverales que se lucieron en la fiíesta. E n brillantes fiestas, nada tendría de extraño aquellas estancias monacales, aunque embeque en fecha próxima se reprodujeran allí Uecidas y animadas por la mano de una representaciones teatrales como aquellas de dama aristocrática, el pretérito triunfaba antaño, para las que M. de Flotow escribió del. presente. las partituras. El hennoso claustro, cuyo grabado ilustra esta crónica, fué repro luaMoTlte- CnstO. do para la decoración de Roberto el diablo. Pero mientras el caso llega, apenas co (FOTOS DB VIAKMES)