BLANCO Y NEGRO MADRID 21-07-1929 página 101

BRÍGIDA Y SU BODA I Q TM BIEN HBMOS HECHO E BESE TEKBEI. N 0 S D E L PHOTOCOLO. X BLmiK ESTA MADKINA! miedo de que mi hija sea una mujercita u g sta, y de la cual se ve privada la voluntariosa y colérica. Hoy ha tomado una rabieta como no las tomaron nunca, de fijo, ppbrecilla. Se expansionaba con su ahijalos Hauteville. ¡Pícara Rosalinda, que quie- dita, y, sm darse cuenta, con Dionisio, que la quiere tímidamente, de un modo muy disre parecerse a su madre! Chonchón contemplaba a la rebelde niña tinto al de los novios de su hermana María. Yo solicité que bautizara a mi hija el con el mayor desconsuelo durante la ceremonia del bautismo. Así y todo, ¡qué bien mismo sacerdote a quien vi a la cabecera representaron su papel la madrina y el pa- de mi tía Renata moribunda, y que se ha drino! Un poco conmovidos los dos, tan hecho amigo nuestro. Dejando un momento jóvenes, tan agradables, contestaron en a sus aniados apaches, atravesó todo París nombre de la niña con una convicción con- para venir a una parroquia elegante a immovedora. Chonchón está volviéndose pia- poner sus manos a un lindo rotro vestido dosa como un ángel, y Dionisio, después de de seda y encajes, y yo me regocijaba al iin periodo borrascoso, ha entrado por el dar a Rosalinda como padre espiritual el buen camino. Las Pascuas señalaron la re- padre de los pobres. ¿Confesaré mi vanidad surrección moral de este muchachote Y maternal? Pues bien; creo que la niña le ademas, la seducción de Chonchón va la- pareció encantadora, en comparación con borando... Sin que ella lo sospechfr- ¡es los enfermizos nenes del Arrabal Rojo. Sus tan ingenua! Dionisio se ha enamorado manos, acostumbradas a palpar harapos t e de la mirada, triste e infantil al mismo man una levedad asombrosa para colocar tiempo, de sus ojazos de color de malva el gorrito de encaje de Malinas en la caque brillan bajo una frente coronada dé beza ungida por el óleo santo, mientras contemplaba con bondadosa sonrisa la deliricitos castaños. Hoy no tenía los ojos tristes. Chonchón cada carita y sus ojazos. se expansionaba en la vida de familia que (CONTINUARA EN EU NUMERO PRÓXIMO)