BLANCO Y NEGRO MADRID 28-04-1929 página 72

DEPORTES CURIOSIDADES DEPORTIVAS Un Extraño Pájaro y una Pista Enorme. E L afán renovador aéreo no tiene comparación, en todo caso, más que con una actividad industrial: el automovilismo. Aquí también los ingenieros y los técnicos estudian constantemente nuevos perfeccionamientos e idean dispositivos originales que satisfagan las exigencias de una de las clientelas más extendidas del Universo. Pero en el avión el caso no es el mismo. La clientela particular, el aficionado turista, no alcanzan todavía número considerable, y pese a los esfuerzos de las Compañías que sostienen líneas regulares, el único cliente verdaderamente considerable en cada país es el Ejército. Al amparo de la defensa nacionail se han creado formidables flotas del espacio, de donde salen con preferencia los pilotos excepcionales que de vez en cuando se lanzan a las aventuras de las grandes travesías. También esos hombres que tripulan un día y otro los aparatos de las líneas postales y de viajeros llegan a ser pájaros encariñados con el aire, que es su m. ejor elemento. Y de esa legión de hombres que viven en eJ espacio surgen de continuo los héroes, cuyo caso -tipo es el coronel Lindbergh. Las modificaciones más o menos llamativas de los más pesados que el aire están ahora a la orden del día, como si muy de prisa quisieran llegar a la meta de las seguridades, de donde no pueda lanzarles el dirigible, que con paso más lento pero trazo más firme progresa también de modo indudable. Este extraño aparato que reproduce hoy nuestro grabado es una muestra más del esfuerzo técnico constante. Su inventor, Earl Mac Clary, ha ideado esta rara máquina voladora, tanto para alejar peligros de los que son comunes a los aviones, como para alcanzar ventajas prácticas sobre ellos. De la forma del uniplano dice más la fotografía que la descripción que nosotros pudiéramos hacer. Hay que añadir, sin embargo, que ese ala extendida como un toldo, única que lleva el aparato, tiene una silueta piriforme, el lado más ancho en la parte anterior. Rasgando el ala, en una abertura especialmente destinada, giran las paletas de la hélice, que mueve un motor corriente de aeroplano, y tras él va la pequeña cabina del piloto, enteramente cerrada, donde sólo cabe una persona. La disposición de este ala- techo tiene, en opinión del técnico- constructor, numerosas ventajas, pero entre ellas las más interesantes serían las que permitieran al aparato elevarse siguiendo una línea muy próxima a la vertical. Su fuerza ascensional es mayor que la de los restantes tipos a ¡igualdad de fuerza; el aterrizaje podrá hacerse en un campo más reducido que los aeródromos normales, y, finailmente, los peli- EL UNIPLANO DEL INVENTOR EARL MAC CLART