BLANCO Y NEGRO MADRID 06-05-1923 página 45
- EdiciónBLANCO Y NEGRO, MADRID
- Página45
- Fecha de publicación06/05/1923
- ID0005516855
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iNii ri EL QUIOSCO ES XUESTRO OBSERVATORIO, Y ESTA ADMIRABLEMENTE ELEGIDO. No tienes papá? -No. Ni mamá? -No- ¿Ni marido? -No. Ni una hiiita? -No. ¿Ni un hijito? ¿No tienes un liijo? A esta interrogación respondió, con la voz alterada -Tenía uno y lo perdí. -i Lo perdiste? ¿Cómo? En un bosque? L- ma me ha contado que en los bosques hav muchos lobos que se comen a los niños malos. Era bueno tu hilo? -No. -Entonces se lo habrán comido. ¡Qué miedo ¿Le querías mucho? -Sí. ¿Cómo se llamaba? Gerardo. -i Pobre Gerardito! Rezaré por él todos los días SI quieres tú. Tal vez no se lo hayan comido los lobos y vuelvas a encontrarle. Mira, en mis oraciones nombro a muchas personas; no me cuesta nada decir un noiiibre más. ¿Estás llorando? i- No se debe llorar! Y añadió en voz baja: -El tío Gerardo tenía una mamá; ¡esto es un secreto muy grande! pero creo que ya no la tiene... Casi siempre está triste; yo le acaricio así, asi, y entonces me mira y se sonríe... Rosita enjugaba con su pañuelo las lágrimas de la señora de Ailly, pero ésta no se sonreía Las ing enuas preguntas de la niña despertaban sin duda, sus agudos dolores pasados, v el llanto brotaba de sus ojos más abundante cada vez, más amargo. Experimentando imperiosa necesidad de estar sola, rechazó a la niña.