BLANCO Y NEGRO MADRID 07-08-1892 página 7

BLANCO Y NEGRO 503 brillantez! Las otras pobres madres y suegras que no alcanzan tal fortuna, cómo envidiarán á los novios cuando contemplen el lujo y esplendor de los suntuosos aposentos! -Efectivamente, al penetrar allí se ven magníficos sillones entapizados de lienzo crudo con cantoneras de balduque; los espejos hacen la cara roja ó amarilla, según el color de la gasa que los defiende; los dorados se hallan tristes y como biliosos; las estatuas parecen sacos de ropa vieja puestos de pie; el piano es de hule; los relojes de tul, con felpillas; la lucerna, la gran lucerna simula un globo aerostático á medio inflar; todo está feo por el pronto, pero ¡qué encantos no se adivinan bajo aquellas misteriosas cubiertas! ¡Oh! Ya se descubrirán el día del aniversario de la boda, aunque por ese tiempo suele haber en la casa otras preocupaciones; ó, si no, el día del bautizo de lo que nazca, aun cuando en la li li i -ri -i i i ii 1 I 1i n 1 i i i d i i 11 II 1 il a II li pero taladra- y percude telas y matices; los insectos roedores hacen nido en las concavidades deí almohadillado; las maderas se alabean ó se abren; el gato juega con los flecos y los deshilacha; lo sirvientes, en ausencia de los señores, duermen sobre los divanes; la humedad, el calor, el trasiego de poner y quitar alfombras, las mudanzas, el almanaque, en fin, con su inflexible curso, que envejece nuestro corazón y nuestros pulmones, tan bien enfundados, ¿cómo no han de mortificar y envejecer telas y: esqueletos, colores y barnices? Llega un día en que se quitan las fundas, y entonces ¡oh dolor! los muebles no sólo están ya viejos, sino que están antiguos. ¿Quién enseña rosas y verdura cuando se estilan rayas? ¿Quién muestra flecos y borlas cuando se estilan cordones y agremanes? ¿Quién tiene un salón verde cuando se estila rojo ó amarillo? Además, los bronces se han puesto negruzcos, las cortinas tienen sombras por los dobleces, los relojes no quieren aüdar en fuerza de estar parados, las arañas presentan una