Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 13-01-2019 página 3
ABC MADRID 13-01-2019 página 3
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 13-01-2019 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página3
Más información

Descripción

ABC DOMINGO, 13 DE ENERO DE 2019 abc. es opinion LA TERCERA 3 F U N DA D O E N 1 9 0 3 P O R D O N T O R C UAT O LU C A D E T E NA EL SELFIE O LA VIDA POR MARI PAU DOMÍNGUEZ En el mito de Narciso, éste no muestra interés alguno por nada ni nadie en el mundo más que por él mismo. Narciso se contemplaba en el espejo del agua hasta morir, y los jóvenes de nuestro tiempo lo hacen en una pantalla digital y también se dejan en ello la vida haciéndose un selfie Se matan más los hombres que las mujeres. ¿Son ellos más atrevidos o más narcisos? ta responder a la pregunta de qué lleva a una persona en apariencia normal a arriesgar su vida por hacerse una fotografía. He revisado los estudios más recientes sobre la fiebre de los selfies realizados en lugares tan dispares como Hamburgo, Nueva Delhi, Reino Unido, Milán o Estados Unidos. Las conclusiones no son precisamente alentadoras. Se han demostrado graves alteraciones de la personalidad y pautas de comportamiento en jóvenes de entre 14 y 21 años adictos a los selfies El rasgo que predomina es el narcisismo, que los expertos asocian con la tendencia a sentirse superior, a aprovecharse de los demás y a la búsqueda permanente de visibilidad. En el mito de Narciso, éste no muestra interés alguno por nada ni nadie en el mundo más que por él mismo. Narciso se contemplaba en el espejo del agua hasta morir, y los jóvenes de nuestro tiempo lo hacen en una pantalla digital y también se dejan en ello la vida. Se matan más los hombres que las mujeres (el 71 por ciento de las víctimas eran varones menores de 30 años) ¿Son ellos más atrevidos o más narcisos? Un análisis de referencia es el elaborado por las investigadoras Jesse Fox y Margaret Ronney (2015) de la Universidad de Ohio, Estados Unidos, en el que alertan de que el excesivo uso de las tecnologías relacionadas con los selfies y las redes sociales genera rasgos psicopáticos y maquiavélicos, y provoca una merma del autocontrol y la empatía hacia el prójimo. Nada menos que una quinta parte de la población podría correr el riesgo de desarrollar tales pautas de conducta. Mientras esa quinta parte de la población quema el tiempo en retratarse a sí misma en aquellos lugares que visita, yo seguiré reivindicando lo que un selfie no es capaz de captar: el aroma, único e intransferible, de las sensaciones que experimentamos al recorrer ciudades y parajes desconocidos. Sentir es nuestro patrimonio íntimo que, en algunos casos, compartimos con nuestros seres queridos. o sé qué porcentaje de población acabaremos siendo quienes pensamos así, pero tampoco importa. Seguiremos paseando por lugares descubiertos sin prisas, sin público que sepa que estuvimos allí antes incluso de que nos marchemos. Y precisamente allí, en ese espacio donde primen las sensaciones que nos acercan al placer de sentir, siempre nos encontraremos. MARI PAU DOMÍNGUEZ ES ESCRITORA Y PERIODISTA B ARRIO residencial en Ciudad de Panamá. Octubre de 2018. La mañana es tranquila, el sol lucha contra las nubes por hacerse sitio, ajeno a que en unos segundos alguien retará a la vida en una batalla absurda. Una turista portuguesa de 19 años se asoma a la terraza en el piso 27 de un edificio de lujo. Las vistas son fabulosas pero ella se coloca de espaldas al paisaje antes de encaramarse a la barandilla. En la mano derecha porta un palo extensible que sostiene en la punta su teléfono móvil. Se dispone a hacerse un selfie un autorretrato que después querrá colgar en alguna red social. Aunque unos obreros de una obra contigua la alertan del peligro, la joven se niega a ver la realidad, sigue pendiente de la pantalla que la está inmortalizando. Hasta que acaba perdiendo el equilibrio y se precipita al vacío. Lo alucinante es que los operarios graban la escena con su teléfono, y el vídeo, en el que el ruido del cuerpo estrellándose en el asfalto encoge el corazón de quien lo ve, se ha hecho viral. Pero más increíble resulta comprobar que la joven, en el inicio de su caída, no suelta el palo de selfie ni deja de mirar a la cámara. Es la última víctima mortal de la que se tiene conocimiento en relación con la práctica tan extendida de los selfies que provocó 260 muertes en los seis años que van desde octubre de 2011 a noviembre de 2017. El número de víctimas, sin embargo, podría ser bastante más elevado ya que hay muchos casos que no se han documentado. Más del 85 por ciento de las víctimas tenían entre 10 y 30 años. Hoy en día, si un joven no se hace un selfie allá donde esté, para colgarlo inmediatamente en alguna red social, creerá para el resto de su vida no haber estado allí. Importa la vida que vean los otros, no la que tú mismo vivas; la que experimentes no es nada comparado con la que los demás crean que has experimentado. Nos mostramos como queremos que nos vean los demás, no como somos. Las redes sociales son crueles y efímeras. Los jóvenes sienten un alto nivel de frustración si no comparten al segundo todo aquello que realizan. Los selfies esos instantes que captamos de nosotros mismos sin necesidad de que nadie nos ayude, han desplazado en importancia a aquello que es fotografiado. Por más impactante que sea lo que tengamos ante nuestros ojos, si no lo capturamos para lanzarlo al mundo virtual sentiremos que no valía la pena haberlo vivido, lo cual, a mi juicio, es una peligrosa disfunción. Muchos arriesgan su vida por hacer un autorretrato digital, en lugar de vivir ese momento para sentirlo y disfrutarlo, y, sobre todo, para que quede en nuestra memoria de una manera deliciosamente indeleble. Ningún paisaje merece el coste de una vida humana. Doscientos sesenta son muchos muertos. Me pregunto qué causará en el corazón de sus familiares cada una de esas imágenes; cada uno de esos instantes mortales en los que se les escapó la vida. España se encuentra entre los cinco países con más muertes por selfies La ciencia inten- N

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.