ABC MADRID 06-11-2018 página 5

ABC MARTES, 6 DE NOVIEMBRE DE 2018 abc. es ENFOQUE 5 Teodoro García Egea, secretario general del PP, explica ayer en rueda de prensa la dimisión de Cospedal de su cargo en el partido EFE Las grabaciones de Villarejo Cospedal y el McDonnald s ÁLVARO MARTÍNEZ Para la izquierda y sus merindades ideológicas del momento (populistas, separatistas, filoetarras) no existe otra cosa en estos días que María Dolores de Cospedal y las grabaciones del excomisario Villarejo, el sujeto que desde la cárcel quiere seguir siendo el productor de la música política que se escucha en España aprovechando la inmensa fonoteca secreta que conformó desde las alcantarillas del Estado a lo largo de dos décadas. El serial tuvo ayer su tercera toma y seguro que habrá más, demasiadas para que la ex secretaria general del PP aguantara en la dirección actual del partido. Ayer dimitió de ese cargo orgánico y antes de fin de año seguramente deje el escaño, aunque ella sostiene que hizo lo que tenía que hacer Pues precisamente por hacer aquello, hoy se encuentra en ese rincón donde parece que falta el aire, allí donde los púgiles que están recibiendo una paliza intentan guarecerse y donde para ella, hoy por hoy, todas las mañanas son un calvario. En ese mismo inhóspito lugar se halla la ministra de Justicia, Lola para los alegres comensales de la peña Rianxo Allí está también aunque ella no lo crea y puedan establecerse varias diferencias entre una y otra. Por lo pronto, Dolores Delgado sí mintió reiteradamente a todos los españoles al negar los contactos con Villarejo, embustes que incluso llevaban el membrete oficial del Ministerio de Justicia, con lo que embarcaba al departamento en ese engaño masivo. Tampoco Cospedal celebró que Villarejo contara cómo montó un puticlub para extorsionar a políticos y empresarios, como hizo Delgado al lanzar un jubiloso ¡éxito garantizado! y otros aleluyas al crimen confesado. ¡Siendo ella fiscal en ejercicio! Pero Delgado no dimite. Porque para la izquierda hoy todo es Cospedal y nada más que Cospedal. Bueno no, también está el McDonnald s, que en el jeribeque más descacharrante que se recuerda, ayer la prensa progre recogía como noticia, y venía a afeárselo, la indignación que ha provocado que Pablo Casado almorzara con su familia en una hamburguesería de Sevilla en vez de ir a una tabernita local a pedir una de caña de lomo y otra de huevas aliñás, imaginamos. A tal finura pejiguera, ridícula y estulta ha llegado la izquierda de la era Sánchez, donde la oposición, esa colección de peligrosos derechistas crispadores lo mismo osa manifestarse a favor de la Guardia Civil en Alsasua que entra en un McDonnald s... los muy fachas ESPAÑA