ABC MADRID 04-10-2018 página 61

ABC JUEVES, 4 DE OCTUBRE DE 2018 abc. es espana madrid MADRID 61 La semana pasada, otros neonazis hinchas del Real Madrid, los antiguos Juventudes Canillejas, se manifestaron por el barrio en contra de la presencia del Wanda Metropolitano, estadio del Atlético, en su barrio. El peticionario de la convocatoria a la Delegación del Gobierno era Fabio Martínez Luiggi, conocido por la Policía, y también asistieron Ana Pavón (ultraderechista, que dio un discurso) y otro histórico, Alberto Ayala de Cantalicio. Acudieron unas 150 personas. De cualquier modo, los investigadores destacan que la actividad violenta en las calles de estos sujetos ha mermado. A ello contribuye mucho la labor policial de prevención, como ocurrió el viernes pasado, la noche antes del encuentro entre el Madrid y el Atlético. La Brigada de Información hizo una batida por la zona de Marceliano Santa María y sorprendió, a las 23 horas, a una treintena de Ultras Sur armados con palos, bobinas industriales y puños americanos de plástico. Se sospecha que habían quedado con miembros del Frente Atlético para pegarse. Identificaron a 27 personas, aunque no pudieron levantarles actas por posesión de armas porque las tiraron al suelo antes de ser interceptados. Pero se logró abortar una reyerta. Monovolumen donde quedó encerrada la menor en Sanchinarro con la escuela infantil detrás GUILLERMO NAVARRO Muere una niña de 21 meses olvidada por su padre en el coche Estuvo casi siete horas encerrada, al lado de la guardería. La tragedia se descubrió cuando su madre fue a recogerla M. J. ÁLVAREZ MADRID FOTOS: ABC Un olvido letal, inexplicable y terrible, ha destrozado a una familia española y ha causado una profunda consternación entre los residentes del barrio de Sanchinarro (Hortaleza) Las lágrimas y las preguntas sin respuesta se repetían ayer por la tarde detrás del cordón policial. En un hospital de campaña yacía el cadáver de una niña de 21 meses, a la que su padre olvidó dentro del coche. Estuvo encerrada en él casi siete horas. La tragedia comenzó a fraguarse por la mañana, cuando un hombre de 43 años acudió a llevar a la guardería a la menor de sus dos hijas. Eran las nueve o nueve y media de la mañana. Siempre lo hacía su mujer, de 39, pero ese día no pudo. Él aparcó junto a la verja de la escuela infantil Ana de Austria (en la calle del mismo nombre) Lo hizo en la vía lateral, Isabel Clara Eugenia, a escasos 15 metros de la entrada. Luego se fue a trabajar en transporte público o a pie. Según explicaron algunas madres, esa era su rutina habitual, estacionar por esa zona y encaminarse a su puesto de trabajo. Poco antes de las cuatro de la tarde, la madre de la pequeña fue a recogerla. No estaba en clase. Preguntó por ella y le respondieron: Hoy no ha venido Sorprendida, llamó a su marido, quien, horrorizado, se percató de que se había olvidado de la niña. Está en el coche acertó a decir. El pánico se adueñó de la mujer, quien se dirigió al monovolumen con varias profesoras. En la sillita estaba la niña, inmóvil. Con la copia de las llaves que tenía abrió el vehículo. Un hilo de vida La criatura estaba inconsciente. Las docentes y las pediatras del centro de salud aledaño comenzaron a practicarle los primeros auxilios hasta que llegó el Samur. Tenía un hilo de vida: estaba en parada, indicó un portavoz. El teléfono de Emergencias del 112 recibió la primera llamada de auxilio a las cuatro. Los sanitarios estuvieron realizando las maniobras de reanimación cardiopulmonar por espacio de 45 minutos. Fue inútil. Vi correr al padre, venía desencajado, descompuesto. No sé cómo podía sostenerse en pie, la verdad. Jamás olvidaré su rostro relataba Ja- Investigación El padre, que llegó con la cara desencajada al lugar del suceso, fue detenido por homicidio imprudente vier. En los corrillos repetían: Dicen que trabaja por aquí cerca, en El Corte Inglés o en el BBVA En la guardería pública, que abrió sus puertas hace un mes, reinaba la desolación. Ahí trasladaron a los desconsolados padres (a los que no les dejaron acercarse a la cría) hasta que fueron conducidos a dependencias policiales. Ambos tuvieron que ser atendidos por psicólogos del Samur; el padre, en estado de shock, estaba totalmente hundido. Fue detenido por homicidio imprudente. Anoche se le estaba tomando declaración. El Grupo V de Homicidios investiga el suceso para esclarecer si se trata de un olvido involuntario u otra circunstancia. Todo apunta, según los primeros indicios, a un hecho accidental, informaron fuentes policiales. La pareja, de la que nadie pudo precisar si está separada o si constan denuncias por malos tratos, tiene otra hija de 4 o 5 años. Así lo atestiguaban las sillitas del monovolumen en el que permaneció encerrada la menor, con los cristales tintados. La directora y las profesoras de la guardería, con el rostro enrojecido por el llanto, se marcharon cuando levantaron el cadáver. En los corrillos, la gente, consternada, opinaba: Creo que la peque se durmió y el padre, como nunca la dejaba en el cole, se despistó y se fue. Luego, la niña acabó desmayada decía Lucas. Otros, como María, recalcaban: ¿Cómo puedes olvidarte de tu propio hijo tantas horas? No me cabe en la cabeza