ABC MADRID 23-09-2018 página 40
- EdiciónABC, MADRID
- Página40
- Fecha de publicación23/09/2018
- ID0006804148
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40 INTERNACIONAL DOMINGO, 23 DE SEPTIEMBRE DE 2018 abc. es internacional ABC Manfred Weber En Europa está creciendo el nacionalismo y el egoísmo CANDIDATO POPULAR A LA PRESIDENCIA DE LA COMISIÓN EUROPEA Tiene el apoyo de Angela Merkel y hasta ahora ningún otro dirigente del Partido Popular Europeo se ha atrevido a competir con él ENRIQUE SERBETO CORRESPONSAL EN BRUSELAS C uando anunció su candidatura a la presidencia de la Comisión Europea a la vuelta de las vacaciones, Manfred Weber produjo un pequeño terremoto en Bruselas. El líder del principal grupo político europeo ha sido durante esos años un dirigente tan activo como discreto, siempre alejado de las gesticulaciones pero en la primera línea de las discusiones en la UE. Si lo logra, será el primer alemán que llega a dirigir el Ejecutivo comunitario y también el primero que lo hace sin haber sido primer ministro. Él niega ser una especie de heredero europeo de la canciller Angela Merkel y reivindica su propio bagaje político de más de una década trabajando en Bruselas, La entrevista tuvo lugar en Salzburgo, donde participaba en la reunión de líderes populares paralela a la cumbre informal de jefes de Estado y de Gobierno. Un escenario perfecto, al lado de su querida Baviera, que es su región de origen y a donde regresa a la menor ocasión. Tal vez en las elecciones que se celebran allí en octubre le van a dejar un sabor agridulce teniendo en cuenta que su partido (la Unión Cristiano Social CSU) puede perder la mayoría absoluta a costa de los nacional populistas de Alternativa para Alemania (AfD) -Como en Baviera, la emigración será una de las cuestiones de la campaña europea, lo que plantea un panorama complejo para el PPE teniendo en cuenta que es la primera vez que su hegemonía está siendo amenazada en el campo de la derecha por fuerzas radicales, populistas antieuropeas y antiinmigración. -Es verdad que es un momento histórico para la UE. Estamos siendo amenazados desde el exterior, ya ve lo que sucede con Putin o incluso con Donald Trump. No son iguales ideológicamente hablando, pero ambos desean debilitar a la UE. Y desde el interior, tenemos el extremismo y el populismo. Por eso creo que se necesita abrir un nuevo capítulo en Europa. Las elecciones europeas deben servir para mostrar a la gente en qué creemos, darles seguridad, defender lo que yo llamo el modo de vida europeo. Este es el marco en el que nos movemos. No podemos continuar como hasta ahora, necesitamos un debate democrático sobre el futuro de Europa. Y por eso me he presentado como posible candidato del PPE a la presidencia de la Comisión Europea, quiero presentar las ideas del PPE hablar con los líderes, recolectar ideas y democratizar a la UE, abrir la caja negra de Bruselas, llevarla más cerca de la gente y así estoy seguro de que Europa sobrevivirá. -En realidad, vivimos el mayor periodo de paz en toda la historia. Seguimos siendo el espacio más próspero, socialmente inclusivo, etc... ¿Por qué cree que prosperan las fuerzas que quieren destruir el sistema? ¿Cómo se elige al presidente de la Comisión Europea? Según el Tratado, el presidente de la Comisión Europea debe ser designado por los jefes de Estado o de Gobierno teniendo en cuenta el resultado de las elecciones. Desde 2014 se ha introducido la figura de los candidatos de cada partido, para aproximar la decisión a los ciudadanos, aunque no sea un mecanismo del agrado de todos los presidentes. Por ahora, Weber es el único que se ha propuesto para abanderar el grupo popular que ha de tomar la decisión formal en Helsinki el próximo 7 de noviembre. Cuenta para ello con el estratégico apoyo de Angela Merkel. Otro posible candidato sería el actual negociador jefe del Brexit, el francés Michel Barnier, pero no ha confirmado todavía si quiere volver a optar a la candidatura. -La gente sabe que estamos ante un periodo de incertidumbre. En el pasado las cosas se hicieron bien pero es verdad que no hemos sabido aplacar esta incertidumbre. Imagínese un camionero que va por la autopista y escucha por la radio noticias sobre el desarrollo de los vehículos sin conductor ¿que cree que va a pensar? La realidad es que tenemos ante nosotros una auténtica revolución del mundo globalizado y digitalizado y la gente no sabe qué va a suponer para ellos y nosotros no sabemos decirles si podremos mantener la vieja promesa del mundo occidental de que sus hijos vivirán mejor que ellos. Por eso creo que el centro de la campaña debe ser dar la seguridad a la gente de que Europa tiene un futuro y que puede proponer un nuevo contrato social. Debemos volver a dar certezas a la sociedad, especialmente a la clase media, y decirles que la UE puede estabilizar la situación y ofrecer la perspectiva de un futuro mejor y pare ello debemos saber ser creativos también. -Creo que ante una situación como la actual, en otra época probablemente habríamos tenido una guerra en Europa. La sociedad parece haber perdido esa referencia tan terrible y las promesas sin fin de los políticos les hacen creer que todo debe mejorar sin cesar y constantemente, cuando no siempre es posible. -La cuestión esencial es definir qué significa mejorar, porque si lo definimos solo en términos económicos no siempre es así. En nuestras sociedades debemos pensar en otros conceptos como la capacidad de cooperar, de ser solidarios, de que la gente participe, porque lo que está creciendo es precisamente el egoísmo, el nacionalismo. Dentro de las sociedades pero también en algunos dirigentes. La idea de Europa es precisamente que cada cual puede tener una posición firme, pero podemos sentarnos juntos y llegar a un compromiso. Y uno de los desafíos más importantes para Europa es precisamente cómo ayudar a África, porque si no les podemos ayudar a tener un futuro a ellos, nuestros problemas también crecerán. -No es la primera vez que hay esta incertidumbre sobre el futuro. Antes del cambio de siglo también se vivió un tiempo en el que se pensaba que podía pasar cualquier cosa. Pero los europeos no eran tan pesimistas. -La diferencia es la tecnología y sobre todo la velocidad. Antes era solo un fenómeno, la industrialización, ahora son varios a la vez, la globalización, Político precoz Nacido en Landshut (Baviera) en 1972, ha sido un político precoz desde los inicios de su carrera en Alemania y podría acabar siendo el más joven presidente de la Comisión Europea. Es miembro del Parlamento de Estrasburgo desde las elecciones de 2004. En la última legislatura ha dirigido el grupo parlamentario