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ABC MADRID 11-03-2018 página 20
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ABC MADRID 11-03-2018 página 20

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20 ESPAÑA DOMINGO, 11 DE MARZO DE 2018 abc. es espana ABC Significante Podemos es el principal significante del cambio y su nombre debe estar en todos los procesos a los que nos presentemos Los territorios En algunos lugares será más fácil (concurrir con las siglas de Podemos) que en otros, no soy ingenuo Las consultas La decisión no va a ser ni de la dirección estatal ni de las autonómicas, sino de los inscritos Pablo Echenique y Pablo Iglesias, ayer, durante la celebración del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos EFE Iglesias avisa a IU: Podemos no renunciará a su nombre en 2019 El partido quiere consultar este mes a su militancia sobre las coaliciones electorales ALEXIS ROMERO MADRID Portazo a Alberto Garzón y a Izquierda Unida y mensaje alto y claro a los suyos: Podemos concurrirá a las elecciones europeas, autonómicas y municipales que se celebrarán en 2019 con su nombre. Así lo manifestó ayer su secretario general, Pablo Iglesias, en el discurso de apertura del Consejo Ciudadano Estatal que la formación celebró en Madrid y que reunió a los principales cargos estatales, autonómicos y municipales del partido. Iglesias despejó las posibles dudas que podían existir sobre ir o no en coalición con otras fuerzas y anunció que apostarán por la confluencia con las fuerzas políticas hermanas y aquellos sujetos que puedan sumar a un bloque histórico para avanzar en el cambio de Gobierno nombrando específicamente a Izquierda Unida, Equo y Catalunya en Comú. Sin embargo, también despejó otra incógnita: lo hará con sus siglas, con las de siempre. Desde hace unos meses el contexto político había forzado un debate sobre la conveniencia de que Podemos siguiera apostando por su marca en las próximas citas electorales. Su fracaso en Cataluña y el desplome en intención de voto en las encuestas son dos de los factores que habían sembrado la duda sobre un posible agotamiento de la marca Podemos tal y como se la conocía hasta ahora. El otro factor, que iba camino de convertirse en un problema, es Izquierda Unida. Su líder, Alberto Garzón, presentó hace meses ante la Coordinadora Federal de su partido un informe en el que apostaba por continuar con la confluencia con Podemos, pero en el que también se quejaba de la falta de visibilidad que a su juicio IU sufre desde su integración con los de Pablo Iglesias. Desde el entorno de la formación se había planteado la posibilidad de que, de cara a próximas alianzas, se construyera una suerte de sujeto político que no respondiera en sus siglas ni a Podemos ni a IU, sino que tuviera un nombre distinto, en el que ambas formaciones se sintieran reconocidas. El rechazo de Iglesias a esta posibilidad en un momento en el que ambos partidos negocian sus alianzas podría resultar problemático para que esas negociaciones lleguen finalmente a buen término. El líder de Podemos se mostró tajante en este sentido: Podemos es el principal significante del cambio y su nombre debe estar en todos los procesos a los que nos presentemos aunque aseguró entender la dificultad de instaurar esta regla en todos y cada uno de los territorios en los que el partido tiene estructuras: No soy ingenuo y soy consciente de que en algunos lugares será más fácil que en otros manifestó al término de la reunión. De hecho, el líder de Podemos pudo palpar en el Consejo un adelanto de lo que se le puede venir encima en caso de imponer esta directriz. La secretaria general de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, expresó en la reunión su malestar con el hecho de que la norma fuera fruto de la imposición y no de la negociación con los diferentes territorios. Salvo marcas consolidadas Sin embargo, Iglesias contaba con el mismo comodín que le ha permitido sortear la resistencia de los secretarios generales autonómicos en otras ocasiones: la delegación en la militancia. Por eso, al final del Consejo, el líder de Podemos anunció que la decisión sobre la configuración de confluencias de cara a las citas electorales de 2019 incluido el asunto de las siglas no va a ser de ninguna dirección, ni de la estatal ni de las autonómicas, sino de los inscritos y apremió a que las cosultas tuvieran lugar este mes de marzo. En la Ejecutiva ya manejan los modelos de consultas que someterán a la militancia. En todos los casos europeas, autonómicas y municipales preguntarán sobre el apoyo a que Podemos se presente a las próximas elecciones en coalición con las fuerzas políticas aliadas del espacio del cambio y con la palabra Podemos (en el idioma que corresponda) formando parte del nombre de la candidatura En el caso de las autonómicas, habrá una consulta en cada comunidad, y en el ámbito municipal, el texto es el mismo, pero con un importante matiz: con la palabra Podemos formando parte de cada candidatura, salvo donde ya exista una marca consolidada como en los casos del Ahora Madrid de Carmena o del Barcelona en Comú de Ada Colau. Teresa Rodríguez pide que no se imponga la norma de las siglas La primera contestación interna a la directriz de que Podemos no renuncie a sus siglas a la hora de confluir con otras formaciones en las elecciones de 2019 vino de parte de Andalucía. Su secretaria general autonómica, Teresa Rodríguez, tomó la palabra en el Consejo Ciudadano, celebrado a puerta cerrada, para reclamar que las marcas y los nombres sean fruto de las negociaciones en los diferentes territorios, y no una imposición de la dirección estatal. Rodríguez explicó que ya existen listas de confluencia asentadas en lugares como Sevilla o Córdoba que no recogen las siglas de Podemos. Finalmente esta cuestión se someterá a la militancia. La líder de Podemos Andalucía abandonó el Consejo tras tomar la palabra, antes de que terminara la reunión.

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