ABC MADRID 10-12-2017 página 34

34 INTERNACIONAL DOMINGO, 10 DE DICIEMBRE DE 2017 abc. es internacional ABC Vehículos cruzan la frontera entre las dos Irlandas junto a una valla en contra de una frontera dura Cartel anunciador de un encuentro sobre el Brexit y el futuro de Irlanda I. ALONSO Viaje a la línea divisoria entre las dos Irlandas La frontera que nadie quiere volver a levantar ABC recorre un tramo de la única línea que separará al Reino Unido y la UE tras el Brexit, donde desde hace años no existen barreras físicas IVÁN ALONSO ENVIADO ESPECIAL A IRLANDA Y EL ULSTER Muff Recorrido realizado por ABC (60 km) Londonderry Castlederg I R L A N DA DEL NORTE Sl Sligo Belfast I R L A N DA Dun Dundalk Dro rogheda tanto en euros como en libras. En ellas, policías y militares controlaban hace 20 años mediante barreras y puntos fronterizos el paso de personas y vehículos de una margen a otra. Ahora, como Sidean, más de 30.000 personas cruzan cada día estos pasos, ya sea por motivos laborales, familiares o comerciales, sin necesidad de parar ni mostrar documento de identidad. T ras despachar un par de calcetines térmicos y unas botas de nieve a un hombre de avanzada edad que pretende resguardarse del frío que deja estos días la tormenta Caroline Sidean señala una pequeña granja a unos 200 metros. Intentando chapurrear un poco de castellano, explica: Allí vivo yo, justo al otro lado de la frontera Esta norirlandesa de 55 años regenta una tienda de material deportivo para climas extremos, porque, como asegura, aquí en Muff hace mucho frío Se refiere a una pequeña población de algo más de mil habitantes situada en la República de Irlanda, que lo único que tiene de especial a simple vista es este pequeño local llamado Borderland o lo que es lo mismo, Zona fronteriza Ella misma ironiza sobre el título: Menudo momento has elegido para venir a este lugar y encon- trarte con nosotros En Muff finaliza o comienza, según en qué dirección se ponga el mapa la línea imaginaria de casi 500 kilómetros que separa las dos Irlandas. Invisible, porque no hacen falta muchos kilómetros para darse cuenta de que las carreteras por las que transcurre esta división no tienen ni un simple cartel que informe de que se está pasando de un país al otro. En apenas 60 kilómetros se puede llegar a cruzar doce pasos fronterizos en los que una señal de límite de velocidad es el único aviso del cambio, de millas por hora (en suelo norirlandés) a kilómetros Navan Mullingar ull Sin militares Dublín Athlone 60 km ABC Naas por hora (en Irlanda) Carreteras que en España serían comarcales y por las que, en muchos casos, ni dos coches pueden cruzar al mismo tiempo. Ni siquiera al parar en alguno de los establecimientos de comida rápida o gasolineras en torno a estos pasos invisibles se da uno cuenta de en qué lado está, ya que en ambas se puede pagar Liam, dueño de una tienda de souvenirs Los acuerdos de Viernes Santo son lo mejor que ha ocurrido por aquí y nadie debe ponerlos en peligro Casas con el baño en un país y la cocina en otro En una frontera invisible, solo el cambio de kilómetros a millas en las señales advierte del cambio de país Justo en el momento en que cuenta que la gente está expectante para ver cómo resuelven este problema los políticos aparece en escena su marido Ian, de 58 años, autodenominado como escocés independentista Tras dejar un par de cajas repletas de anoraks, explica el sentir de la mayoría de ciudadanos de por aquí: Todos queremos un segundo referéndum del Brexit, creo que esta vez saldría el resultado contrario. Nadie quiere ver cómo perdemos poder adquisitivo y, lo más importante, ninguno está dispuesto a volver al clima de tensión de antes de que se firmasen los acuerdos de Viernes Santo Con el proceso de paz tan difícil de conseguir y que duró años, desaparecieron las instalaciones militares del Ejército británico situadas en esta pequeña población y a lo largo de toda la frontera, objetivo prioritario de grupos terroristas como el IRA que dejó más de 3.000 asesinados en la época