ABC MADRID 04-11-2017 página 36

36 ECONOMÍA El desafío soberanista SÁBADO, 4 DE NOVIEMBRE DE 2017 abc. es economia ABC Impacto económico IGNACIO MARCOGARDOQUI Cataluña no crecerá en 2018 si se encona el desafío independentista La Airef cree que en el peor de los casos restaría 2,7 puntos del PIB a la región JAVIER TAHIRI MADRID EL COSTE DE LA LOCURA La crisis política pasa factura Gobierno Luis de Guindos L a economía es una ciencia muy humilde y limitada. Una de sus principales limitaciones procede del desagradable hecho de que no puede repetir experimentos en un laboratorio. Por eso, cuando se trata de aventurar el futuro se debe contentar con realizar estimaciones más bien genéricas y poco precisas. Da respuestas vagas a preguntas concretas y eso decepciona siempre a la audiencia que exige contundencia y gusta de las certezas. Lo vemos ahora mismo. Una de las preguntas más repetidas en estos últimos meses es ¿cuál va a ser la repercusión económica de la deriva catalana? Una pregunta muy oportuna e interesante que, como le digo, tiene solo una respuesta vaga e imprecisa. El Banco de España ha realizado un meritorio estudio al respecto en el que se dan cifras... en plural. Es decir, se realizan estimaciones del desastre, que están en función de cuál sea el escenario por el que discurran unos acontecimientos tan compulsivos y sorprendentes como son los que vivimos cada día en Cataluña. De lo que no queda ninguna duda es que serán negativos y lamentables, en todo caso, y podrán convertirse en dramáticos y terribles si se confirman las peores expectativas. Si todos los que compran productos catalanes siguen comprándolos; si todos los que invierten en Cataluña continúan invirtiendo allí y si todos los que trabajan se mantienen en sus puestos de trabajo no pasará absolutamente nada. Las economías están hoy muy relacionadas y hay países más pequeños y menos prósperos que Cataluña. El problema reside en que no pasará eso, sino todo lo contrario. Y no pasará porque la inestabilidad política y la inseguridad jurídica son dos enemigos formidables que ahuyentan a los inversores y tras ellos se van la riqueza y el empleo. Esa es la espesa salsa en la que se cuece la situación actual que ya destila salidas de empresas, depreciación de activos y pérdidas de empleo. Cataluña se va a empobrecer y, si la locura dura un rato más, España también. Por eso la única esperanza reside en que el día 21 de diciembre aparezca un buen número de catalanes que hayan recuperado la cordura y calculado estimado los destrozos que conlleva la aventura independentista. Solo así podremos acotar el desastre y solo así podremos recuperar la calma y el sentido común. 3.600 millones El impacto negativo de la incertidumbre política generada por el desafío independentista se contagia a toda España pero se intensifica especialmente en el caso de Cataluña. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) estimó ayer a cuánto puede ascender el impacto económico solo en la región y la conclusión es que la pérdida de actividad puede provocar que el próximo año se estanque y tenga crecimiento cero. El organismo dirigido por José Luis Escrivá calcula que la pérdida de avance del PIB catalán en 2018 oscilará entre 0,7 y 2,7 puntos, según la gravedad y duración del desafío secesionista. Es decir, la factura económica de la incertidumbre política para la comunidad autónoma oscila entre unos 1.500 millones y casi 6.000 millones menos de actividad. El primer escenario es el más probable a ojos de la institución. Como es habitual, la Airef dibuja varios escenarios. En el más extremo, Cataluña tendría un crecimiento nulo el próximo año ya que la Airef preveía un 2,7 de repunte en 2018. Ante ello, no se excluye la posibilidad de que la región entre en recesión técnica, esto es que acumule dos trimestres de destrucción de PIB. La Airef simplemente detalla que para el año que viene espera un crecimiento real cercano a cero en la comunidad, si la crisis política se enquista. Lo que es seguro, según la Airef, es que la crisis pasará factura a la región. La Autoridad Fiscal calcula dos shocks sobre la comunidad: uno idiosincrático y el otro común al resto de España. Por ejemplo, en el escenario central en el que el PIB catalán deja de crecer en siete décimas en 2018, en el conjunto de España el efecto negativo sería de tres décimas. En el más extremo, el conjunto del país cedería 1,2 puntos que en el caso de Cataluña sería de 2,7. El impacto, por tanto, siempre empeora en la comunidad. El Gobierno redujo su previsión de crecimiento en tres décimas 3.600 millones al 2,3 para 2018, y la de creación de empleo en 78.000 puestos menos. Banco de España Luis María Linde 30.000 millones El supervisor cifra dos escenarios: uno en el que el crecimiento entre 2017 y 2019 se resiente en tres décimas y otro en más de 2,5 puntos: casi 30.000 millones. Los trabajadores de Nestlé temen por el boicot a productos catalanes Los trabajadores de Nestlé España expresaron ayer su inquietud por el temor a perder su empleo ante la llamada a boicotear los productos de origen catalán que corre por redes sociales, informó UGT. El sindicato exigió el cese de este boicot ya que miles de puestos de trabajo en toda España dependen de la situación de la multinacional suiza. Así, los productos Nestlé se fabrican en toda España, con lo que los centros de producción, así como las familias que trabajan en la multinacional y los proveedores, están repartidos por todo el país. Funcas baja su previsión El impacto propio de la autonomía se suma a este efecto general. Si se da el escenario más pesimista y el PIB catalán se deja 2,7 puntos de crecimiento, en el conjunto de España el efecto negativo sería de 1,2 puntos. En todos los casos, Cataluña añade un impacto mayor al shock común. La Airef había calculado previamente el efecto sobre el conjunto del PIB español, de entre 0,4 y 1,2 puntos. Fun- cas, sin ir más lejos, redujo ayer su previsión de crecimiento de España en 2018 en una décima, al 2,6 por la crisis independentista. Cataluña es la comunidad con mayor PIB de España, al suponer un 19 de la economía, por lo que lo que ocurre en la comunidad se contagia al resto del país. Este menor tirón de la economía también impactará sobre las cuentas públicas de la Generalitat, que engordarán sus números rojos. Bajo el supuesto central de resolución a corto plazo de la inestabilidad política, el impacto global shock común más idiosincrático) sobre Cataluña implicaría una pérdida de 0,7 puntos porcentuales en el crecimiento y un impacto sobre los ingresos propios y la evolución de los gastos de una décima de PIB desgrana la Airef. que ve factible que la comunidad cumpla el objetivo del 0,4 del PIB de déficit para el próximo año en este escenario. En el peor de las hipótesis, el déficit de Cataluña crecería en cuatro décimas. Ello también agrandaría el déficit del conjunto de España. Junto al impacto del desafío independentista otro factor influye en el devenir de las cuentas autonómicas: el que haya o no Presupuestos en 2018 y, con ello, que el Gobierno reparta los recursos de financiación que preveía hace meses para las regiones. Si hay cuentas con estos recursos, Cataluña cumplirá el déficit en 2018, según la Airef. El Ejecutivo empeoró el crecimiento estimado para el año que viene a causa del órdago independentista, lo que se traducirá también en menores recursos para las comunidades que los anunciados en julio si los revisa. Si el Gobierno actualiza las entregas a cuenta o prorroga los Presupuestos y los recursos de 2017, Cataluña superará su meta fiscal y por lo tanto no se adecuará al objetivo del 0,4 En todo caso, si el desafío independentista se agrava, los recursos poco importan: en este caso, Cataluña no cumpliría su objetivo de déficit en ningún escenario según la Airef.