ABC MADRID 21-05-2017 página 12

12 ENFOQUE DOMINGO, 21 DE MAYO DE 2017 abc. es ABC semana La foto de la REUTERS La inmigración en Europa El equilibrio imposible LUIS DEL VAL La señora May acaba de poner un impuesto de 2.000 libras a todos aquellos empresarios que, en lugar de contratar a un británico, contraten a un inmigrante. Es posible que este alumno hindú sea británico de nacimiento, pero un familiar que venga de Pakistán o de la India tendrá pocas posibilidades de trabajar en el Reino Unido. La señora May gana las elecciones y se refuerza políticamente, porque dice con la boca grande lo que la mayoría de los europeos dicen con la boca pequeña: que hay que poner coto a la inmigración porque desequilibra, empobrece y no hay visos de conciliación ni cultural, ni religiosa. Eso sí, cuando hay micrófonos delante todo europeo habla de lo políticamente correcto: solidaridad, no podemos abandonar a millones de seres humanos, nuestro egoísmo puede multiplicar las acciones terroristas, etcétera, etcétera. El problema es tan complejo que no tiene soluciones simples. La señora May abogó por una solución, no simple, sino simplista, que se basaba en una falsa proporción: nos salimos de la Unión Europea y nos libramos del engorro de los inmigrantes. Pero si la Unión Europea no resuelve el pro- blema de la inmigración de una manera ordenada, racional y planificada, el Reino Unido sufrirá igualmente las consecuencias, porque su principal mercado son los países de la Unión Europea. No hace ni dos semanas que las personas conscientes de lo que podía suponer el triunfo electoral en Francia de una tendencia semejante a la de May, contuvieron la respiración porque si Francia abandonaba la Unión Europea, expresándolo en un lenguaje nada diplomático y poco académico, la Unión Europea se iba a hacer puñetas, dicho sea con perdón. La Historia, con mayúsculas, se ha construido sobre las consecuencias de los movimientos migratorios, desde la caída del Imperio Romano hasta la conformación de América. Si al campo no se le pueden poner puertas, a millones de personas huyendo de la muerte y del hambre, no hay valla, ni muro, ni foso, ni océano que les detenga. Y con estos políticos pendientes de las próximas elecciones, de sus guerras internas, de su visión a corto plazo, parece difícil que se reflexione y se estudie lo que conviene hacer de aquí a mediados del siglo próximo, porque de ello depende el futuro, no de Europa, sino del mundo. Pero seamos pesimistas: la mitad de los políticos se dedican a explotar demagógicamente la situación, y a exhibir sus fórmulas simplistas. Y lo peor es que se las compran, desde la orilla de la izquierda y desde la orilla de la derecha. Véase el ejemplo de esta señora para convenir que nos quedan pocos mimbres para construir un cesto de esperanza. May, una escuela La primer ministro británica, Theresa May, con los alumnos de la escuela primaria Nishkam de Birmingham, donde estudian niños de origen paquistaní