Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 10-03-2017 página 56
ABC MADRID 10-03-2017 página 56
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 10-03-2017 página 56

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página56
Más información

Descripción

56 ABCdelOCIO E n portada VIERNES, 10 DE MARZO DE 2017 abc. es ABC El fundador La codicia y el éxito del consumismo La historia de McDonald s llega de la mano de Michael Keaton en la piel del hombre que alimenta al uno por ciento del planeta a diario MARÍA ESTÉVEZ Éxito estrepitoso EL FUNDADOR ximo exponente en la generación de a gran sorpresa del direc- los baby boomers El Fundador tor de El fundador (John retrata a Ray Kroc de la forma que lo Lee Hancock) en su pelícu- hizo La red social con Zuckerberg o la es el título: desde los pri- Jobs con el creador de Apple. Pionemeros compases descubri- ros de grandes compañías que no dumos que Ray Kroc no fue daron en engañar a sus amigos y fael creador de la famosa cadena de ham- miliares. El filme te obliga a pensar burgueserías, sino los hermanos McDo- si es posible dirigir una corporación nalds, Dick y Mac. El amargo sabor de sin perder el alma y el corazón en el ese descubrimiento, del que se des- proceso. En este microcosmos vemos prende el tufillo de la codicia, permi- cómo no todo el mundo entiende el te entender el carácter de uno de los sueño americano de la misma forma billonarios norteamericadice el director. nos que vendieron en el Vivimos en una socieresto del mundo la idea del dad, y este filme es un resueño americano. Al frentrato de ella, que se ha rente del reparto, interpretan- MICHAEL KEATON dido al consumismo. Condo a este visionario hostil Los europeos sumimos y tiramos. y sin escrúpulos, se enNuestra narración habla ven este filme cuentra un combativo Midesde el punto del capitalismo y lo que rechael Keaton. Hay una presenta explica Keaton. de vista del gran diferencia entre enLo queramos o no, toconsumismo, tender el sueño americados tenemos un McDola codicia. no desde una perspectiva nald s cerca. Son sus valoEn EE. UU. es europea y entenderlo res fundados en una doble muy diferente moral más que cuestionacomo americano. Me fascina ver cómo los perioble, según la película, la distas europeos entienden este filme causa del declive de aquel primer modesde el punto de vista del consumis- delo de la compañía. La persistencia, mo, los desperdicios, la codicia. Cuan- ese mantra que Kroc se repite cada do me lo dicen, siento que me he per- mañana, contribuyó al éxito de la redido algo. Los europeos creen que el volución de la comida rápida. Duransueño americano significa tener man- te muchos años trabajó de comercial siones y billones, un estilo de vida ex- de una empresa de maquinaria de batravagante, aviones privados, islas y tidos y, frustrado por la falta de intetodo eso. Me fascina porque el concepto real, el del americano, es muy distinto. Nosotros lo vemos más simple: un trabajo, una casa, un coche, un par de hijos, una buena escuela, unas va- Laura Dern caciones y, tal vez, un segundo coche. interpreta a Creo que eso no es malo y, que conste, la esposa de que no tengo problemas con los billo- Ray Kroc narios, especialmente Bill Gates Lo cierto es que el filme entra de lleno en la historia del capitalismo, en la posibilidad de ejercitarlo de forma saludable (los hermanos McDonald s) y poco saludable (Kroc) y de sus consecuencias en el nuevo milenio. Cada uno elegimos vivir nuestra vida de la forma que queremos. Ray se volvió loco por su codicia. Al final no era por dinero, imagino, sino por poder. Como actor, me pareció una historia realmente interesante de llevar al cine reflexiona Keaton. El origen de la comida rápida, del concepto usar y tirar, encontró su má- Dirección: John Lee Hancock. Con: Michael Keaton, Laura Dern, Nick Offerman FEDERICO MARÍN BELLÓN L lega El fundador a los cines dos días después de la histórica remontada del Barça. Son curiosos los paralelismos entre ambas proezas, visibles desde ángulos contrapuestos. En la película, un implacable Michael Keaton aprende que la perseverancia es la mayor de las virtudes, muy superior al talento o a cualquier otra. El actor da vida a Ray Kroc. El tipo robó una idea y el mundo se la comió como dice una frase de promoción. Con tenacidad y falta de escrúpulos se puede conseguir cualquier cosa. El fundador es eficaz en su relato, de por sí apasionante, pero el fondo carece de grandeza. Al texto de Robert Siegel e incluso a la dirección de John Lee Hancock cabe achacarles su escaso romanticismo. Los hermanos McDonald son la otra cara de la moneda. Caen simpáticos y están desaprovechados, dentro y fuera de la pantalla. Los verdaderos creadores de la marca abrieron un revolucionario restaurante, eficaz hasta el milímetro y diseñado para cocinar la hamburguesa perfecta. Nick Offerman y John Carroll Lynch están fantásticos en la piel de dos sibaritas que anteponían la calidad a los beneficios. Son dos empresarios que se hicieron moderadamente ricos. Para la historia oficial, los perdedores. En Tucker Coppola contaba la vida de otro soñador de fracaso aún más amargo, convertido por el barniz mágico del cineasta en un visionario mitológico. El fundador elige su propio punto de vista, más cínico y prosaico, un ciudadano Kane menor, salvo en la cuenta corriente. Nos comeremos su hamburguesa fabricada en serie, que gustará a muchos, pero nos quedamos con las ganas de saborear la carne que preparaban los verdaderos hermanos MacDonald en San Bernardino, allá por 1950. L Ray Kroc (Keaton) inaugura un restaurante Historia de una ambición LUCÍA M. CABANELAS Mientras la mayoría de sus coetáneos soñaba con una plácida jubilación, Ray Kroc se imaginaba comiéndose el mundo. Vendedor ambulante en pleno ocaso y cincuentón frustrado, en 1954 se topó de repente con unos arcos dorados, los del diseño de McDonald s, un humilde negocio gestionado por dos hermanos que se habían

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.