ABC MADRID 08-05-2016 página 78

78 CULTURA DOMINGO, 8 DE MAYO DE 2016 abc. es cultura ABC Música clásica Más dentro MELODRAMAS Obras de Franz Liszt. Intérpretes: Miriam Gómez Morán, Clara Sanchís. Iluminación: Fer Lázaro. Traducción rimada: Luis Gago. Dirección artística: María Ruiz. Lugar: Fundación Juan March. Fecha: 4- V Para la cultura occidental es difícil apreciar la belleza de lo oscuro. Tras la sombra asoma la ruina, lo misterioso y lo sobrenatural, lo irracional y lo inexpresable. El claro de luna, castillos encantados, duendes, la caída del agua, fantasmas y aparecidos, lo antiguo y lo histórico. Todo ello puede asimilarse con la sola contemplación del espectáculo que estos días ofrece la Fundación March. Articulado alrededor de la integral de los melodramas para narrador y piano compuestos por Franz Liszt, tiene el valor de explicar la voluntad tenebrosa del romanticismo y de sus opacos héroes. Hace tiempo que la March indaga en formatos escénicos que se adapten a su salón de actos. Que ahora se ocupe del melodrama es un nuevo giro sobre el proyecto con consecuencias especialmente felices. De un lado está la decisión de establecer un marco formal coherente: poco más de una hora de concierto, sin descanso, buscando la continuidad y también la progresión del discurso. Los cuatro melodramas de Liszt suenan a partir del sostén sonoro que proporciona un piano vienés Friedrich Ehrbar de 1883. Hay una verdad indudable en ese sonido sutil y matizado que permite a la voz expresarse sin aspavientos. Miriam Gómez Morán es responsable de la parte musical; Clara Sanchís de la narración. La sincronía, el ritmo, son formidables. Y aún la interpretación del Vals Mephisto 1 intercalado entre las obras, adquiere matices novedosos, aunque el oído actual adivine la complejidad de defender semejante partitura ante un instrumento tan moroso. El contexto acaba por redondearse con la iluminación de Fer Lázaro, penetrando en el negro escenario ordenado por María Ruiz. Apenas sutiles cambios de color, una bruma envolviendo a los intérpretes, una banqueta, un atril. Y por encima de ellos, gracias a su propia capacidad de comunicación, los textos de Bürger, Lenau, Jókai y Tolstoi rimados en castellano por Luis Gago para hablar de Lenore de El monje afligido de El amor del poeta muerto y de El cantor ciego La novedad del programa es indudable y la ciencia que le da forma también, pero con todo sus consecuencias van mucho más allá de la mera curiosidad. Axl Rose cantó sentando todo el concierto, al no haberse recuperado aún de una fractura en el pie AFP La incorporación de Axl Rose no merma un ápice de fuerza a AC DC Los 30.000 asistentes al concierto de Lisboa se rindieron al vocalista de Guns N Roses FRANCISCO CHACÓN CORRESPONSAL EN LISBOA La lluvia tuvo piedad y remitió en Lisboa justo cuando AC DC salió al escenario en la noche del sábado 7 de mayo. Todas las miradas estaban puestas en Axl Rose, sustituto de Brian Johnson al micrófono. La polémica por semejante cambio quedó atrás en cuanto se apagaron las luces y las 30.000 almas congregadas en el Paseo Marítimo de Algés se apercibieron de que la historia del rock llamaba a sus puertas. No había margen. Todo o nada. O ingresar en los anales de la banda australiana o naufragar sin paliativos. Axl no dudó en hacer frente al en- vite, pero sus limitaciones a estas alturas quedaron en evidencia. Primero porque no se ha recuperado del todo de la fractura en un pie y se permitió estrenar su propio trono para poder cantar sentado. De paso, resultaba menos patente que cada cierto tiempo le viene bien una dosis de oxígeno después de tantos excesos. La descarga de decibelios arrancó con In Rock we trust sobre imágenes de una hipotética llegada de AC DC a la luna, y Shoot to thrill dos de los clásicos que atronaron como la apisonadora. Nadie puede decir que Axl se arrastró para mantener el tono vocal. Su adaptación encajó en la locomotora del incombustible Angus Young, solo que resultó un poco raro verle tanto tiempo con la pierna en alto. La tormenta eléctrica se sucedía como un guión automatizado. Y sí, llegó Back in black cómo no. También obsequiaron al público portugués (con cientos de españoles en la explanada antes del concierto de Sevilla) a través de una insólita recuperación de Riff raff fuera de su repertorio desde 1979. El boogie- hard- rock de AC DC no ha sufrido ningún bajón y los que se rasgaron las vestiduras por el desembarco de Mr. Rose tuvieron que tragarse sus prejuicios. Porque Axl lucía como la megaestrella que es en el juego de tronos al que se abandonó. No va más No defraudó Los que se rasgaron las vestiduras por el desembarco de Mr. Rose se tragararon sus prejuicios