ABC MADRID 31-01-2015 página 54

54 DEPORTES Liga BBVA Real Madrid- Real Sociedad SÁBADO, 31 DE ENERO DE 2015 abc. es deportes ABC No me arrepiento del fichaje por el Madrid con solo 18 años Entrevista R. MADRID Casillas Varane Pepe Marcelo Illarra Arbeloa Sergio Canales Jugador de la R. Sociedad RUBÉN CAÑIZARES Todo vino muy deprisa. Fue en la temporada 2009- 2010. Un crío de apenas 19 años daba el salto de Segunda B a la élite con la camiseta del Racing de Santander para dar un domingo sí, y otro también, una exhibición por los campos de Primera. Su vertiginoso ascenso tocó cima el 9 de enero de hace cinco años, cuando ante 50.000 sevillistas daba un recital en el Sánchez Pizjuán que aún pone los vellos de punta al propio Palop, principal damnificado de aquella noche genial. Solo un mes después, Sergio Canales (Santander, 16 de febrero de 1991) era comprado, previo pago de cinco millones de euros, por el Real Madrid. Pero la marcha de Pellegrini y la llegada de Mourinho, convirtieron en anécdota su flamante fichaje por el club blanco. Tras una campaña en la que apenas participó en trece partidos emigró al Valencia, pero su suerte tampoco cambió. Esta vez, no fue un entrenador que le acusara de blando quién se le cruzaría en su camino, sino una doble rotura del ligamento cruzado de su rodilla derecha. Finalmente, hoy hace justo un año, el 31 de enero de 2014, firmaría por la Real Sociedad, donde ha vuelto a sentirse futbolista a sus 23 años. Titularísimo para Arrasate y Moyes, Canales regresa al Bernabéu con la grandeza con la que llegó hace cinco temporadas. ¿Qué valoración hace de sus 365 días en San Sebastián? -He logrado recuperar lo que echaba de menos: tener continuidad. Necesitaba muchos minutos y en el Valencia no los tenía. Tomé una buena decisión al venir a la Real Sociedad. ¿Cómo afronta un chico de apenas veinte años romperse la rodilla dos veces seguidas? -He madurado bastante. La verdad que las lesiones me han hecho más fuerte. Fue una pena porque en el Valencia disfruté durante dos años y medio. Estaba cómodo e identificado con el club. Pero mi cabeza me pedía un cambio de aires. Por eso salí de allí. -De donde no tiene tan buen recuerdo es de su paso por el Madrid... -No es exactamente así, hay que diferenciar. A nivel deportivo, mi año en el Madrid no fue agradable. Yo era un chaval de solo 18 años y lógicamente quería jugar. Ese era mi único objetivo. Desafortunadamente, no tuve minutos pero es algo de lo que aprendí bastante y que, además, está más que olvidado. No me gusta quedarme con lo malo, sino con lo positivo, que es lo que nos ayuda a crecer. En el Madrid aprendí lo duro que era el fútbol. Nadie me iba a regalar nada. Nunca me arrepentiré de aquel fichaje. -Mourinho no le dio bola pero en cambio la afición le quiso a raudales. Es la primera vez que pisa el Bernabéu desde su marcha del Madrid, ¿celebraría un gol? -La afición se portó muy bien conmigo y me dio mucho cariño desde el primer día. El Santiago Bernabéu es un campo al que guardo mucho respeto. Será especial visitarlo tras tanto tiempo. Y si marco, no celebraría el gol por el profundo respeto que le tengo a la afición del Madrid. -Vayamos a su actual equipo, ¿por qué una Real Sociedad tan irregular esta temporada? -Pues es una cuenta pendiente que tenemos. Nos está costando llevar la iniciativa de los partidos. Quizás por eso nos fue tan bien contra el Madrid, Barça y Atlético en Anoeta. Ellos llevaban el peso del partido y nosotros jugábamos a la contra, donde nos sentimos más cómodos. Tenemos que mejorar ese aspecto. Espero que los últimos resultados nos hayan dado más confianza y nos ayuden a ser más fiables en la segunda vuelta. ¿Se puede ganar al Madrid dos veces en la misma temporada? ¿Por qué no? Vamos al Bernabéu a ganar, a hacerles un partido incómodo y a intentar ser efectivos. ¿Ese optimismo es por la baja de Cristiano? -Si no juega Cristiano, mejor. Pero quién le sustituya será muy bueno. ¿Mejor jugar ahora contra el Madrid que en noviembre? -Me hace gracia quiénes hablan de crisis. La realidad es que el Real Madrid no es que esté obligado a ganar todos los títulos, es que su grandeza le obliga a vencer todos los partidos y cuando pierde uno parece que se va a acabar el mundo. James Benzema Kroos Bale Isco Vela Agirretxe Canales Bergara X. Prieto Granero De la Bella Í. Martínez Rulli Mikel Elustondo R. SOCIEDAD Vigésimo primera jornada de Liga. Estadio: Bernabéu. Árbitro: Á. Izquierdo 16.00 h. C L GolT Ancelotti retorna a su 4- 4- 2 y Bale asume el liderazgo T. GONZÁLEZ- MARTÍN MADRID Bale toma la batuta del Real Madrid. Sin Cristiano, el galés siempre ha adquirido la responsabilidad de decidir y está dispuesto a consolidar su liderazgo. Lleva tres partidos consecutivos con gol y reconoce que sin el portugués busca más el remate en vez del pase de la muerte. Se siente más libre para moverse en ataque. El británico jugará en su lado natural, el izquierdo, en un sistema remozado, el 4- 4- 2 ideal para Ancelotti que contará con Illarra como medio centro. El guipuzcoano recibe el premio a su decisión de quedarse en el club y no fichar por el Athletic. Se medirá a su antiguo equipo, que ha agradecido que Asier no fiche por el eterno rival El técnico italiano espera conceder minutos a Lucas Silva, que debutaría con su nuevo equipo, y a Jesé. El partido es un examen para el líder, que tiene el reto de mantener la cabeza de la Liga sin su estrella. La Real Sociedad buscará la sorpresa con el talento de Vela. EFE GRADA DE PREFERENCIA FERNANDO R. LAFUENTE EL 4- 4- 2 scribió el gran Enrique Jardiel Poncela que se llama experiencia a una cadena de errores El fútbol es como la vida, la cadena de errores se convierte en experiencia. Cristiano, que tiene poco más de una semana para meditar, descubrirá que no merece la pena perderse dos partidos por una salida de tono; Ramos, que la concentración a lo largo de los noventa mi- E nutos es un bien irrenunciable; James que, en ausencia de Isco, debe tomar los mandos de la creación de juego y de la posesión de la pelota y Kroos que no es infalible. La ausencia de Cristiano esta tarde invernal de febrero ante la Real Sociedad (y el miércoles frente al Sevilla) le permite a Bale lucir el galardón de estrella y a Carlo Ancelotti, regresar a la fórmula que mejor le ha re- sultado: el 4- 4- 2. Illarra acompañará en el centro a Isco, James y Kroos. El Madrid ofreció un penoso espectáculo en Córdoba. Parecía ausente. Como si los que jugaron estuvieran en otra parte, a mil kilómetros de distancia. Y ganaron el partido, a balón parado, sin elaborar jugadas y con más que fortuna. Como suele ocurrir en todas las temporadas el fútbol también es muy previsible a la euforia, como a la borrachera, le sucede la resaca. Y la pájara de los madridistas comenzó en una anécdota: el falso partido frente al Milán. Desde entonces van a saltos. Esto es un tobogán. O una montaña rusa. De repente, estás en lo más alto y, de pronto, desciendes al infier- no. Que le pregunten a Luis Enrique. La poderosa plantilla del Madrid le permite a su entrenador mil combinaciones, pero para lo que se le viene encima, en su tramo final, ya no valen experimentos. El 4- 4- 2 significa sacrificar a una estrella por un trabajador. Ya sabemos que Bale no está por la labor; Isco ha demostrado que se merece un lugar entre los once y Kroos es intocable. Si ese dominio del centro del campo, que provoca el jugar con cuatro en esa línea, fortalece al Madrid, Ancelotti, a la vuelta de Cristiano, tendrá una misión digna del admirado Alan Turing como se cuenta en la inquietante película Descifrando Enigma. Nada menos.