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ABC MADRID 28-12-2014 página 16
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ABC MADRID 28-12-2014 página 16

  • EdiciónABC, MADRID
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16 OPINIÓN DOMINGO, 28 DE DICIEMBRE DE 2014 abc. es opinion ABC POSTALES DIARIO DE UN OPTIMISTA JOSÉ MARÍA CARRASCAL LA MALDICIÓN DE LOS RECURSOS POR GUY SORMAN Hasta después de que cayese la Unión Soviética no se vio con claridad que Rusia era una economía subdesarrollada. Ahora, Putin quiere que creamos que se ha convertido en una economía emergente que en realidad no es ¡ÁRNICA, POR FAVOR! Ya sabemos que en política todo es posible, pero hay cosas que no cuelan, la primera de ellas, que la ignorancia vaya unida a la petulancia L L EO los comentarios que se hacen a las declaraciones de Rajoy y alucino. Decir que está dispuesto a gobernar con el PSOE porque viene alternando con el PP en el Gobierno e insinuar incluso que lo desea porque sólo los dos grandes partidos pueden dar estabilidad a los países es tener una imaginación volcánica. Lo que dijo Rajoy fue lo que ha dicho siempre: que está dispuesto a estudiar cuantas propuestas le hagan, con tal de que se ajusten a sus criterios, a saber: la recuperación económica basada en la austeridad y la unidad de España basada en la igualdad de todos los españoles. Dentro de eso, todo. Fuera, nada. Lo que me hace preguntar por qué, de repente, la izquierda intelectual y mediática ya no ve a Rajoy con cuernos y rabo, sino como un posible aliado. Y la respuesta es miedo. Miedo a que Rajoy se salga con la suya. Miedo a que el PSOE se vaya al garete. Con buenas razones. Viene siendo tema recurrente en esos cuarteles la caída en picado de Rajoy la erosión interna del PP y temas semejantes. Sin querer darse cuenta de que es el PSOE quien está más erosionado internamente, sin que el cambio en su cabeza haya podido evitar su caída, ya que el nuevo líder se equivoca cada vez que abre la boca desde que ordenó a los suyos en Bruselas que votaran contra Juncker hasta ayer, cuando volvió a anunciar que, al llegar al poder, cancelará la reforma electoral, base de la recuperación. No sabemos si lo hace por miedo a Podemos o por miedo al PP. En lo que vuelve a equivocarse, pues sus mayores rivales no son Iglesias y Rajoy, sino Susana Díaz, mucho más ágil, que no ha tenido inconveniente en darse el abrazo protocolario con el de Pontevedra, pese a la barba. Mientras éste pisa cada vez más seguro. Si en 2015 se crean, como en 2014, otros 550.000 puestos de trabajo, quien siga llamándole el presidente más retrógrado de la democracia española no es que meta la pata, es que hace el ridículo. Desde esta perspectiva se entiende que la gran coalición a la alemana empiece a ser una buena salida para la izquierda inteligente. ¡Hay que salvar al PSOE! ¡Árnica, por favor, para Pedro Sánchez! Son los gritos que surgen en ella. Pero ¿y si el PSOE no quiere ser salvado? ¿Y si Pedro Sánchez insiste en que, con Rajoy, ni a La Moncloa ni a ningún sitio? Porque las palabras son letras que tarde o temprano vuelven a cobro y hay que pagarlas. Ya sabemos que en política todo es posible, pero hay cosas que no cuelan, la primera de ellas, que la ignorancia vaya unida a la petulancia. Y la naturaleza, que físicamente ha sido generosa con Pedro Sánchez, no parece haberlo sido intelectualmente. Por lo que me atrevo a decir que dentro de un año es más fácil que Rajoy siga en La Moncloa que Pedro Sánchez siga al frente del PSOE. A dramática recesión de Rusia y el brutal empobrecimiento de los consumidores de ese país a raíz de la caída del rublo no es un accidente. El presidente Putin intenta salvar su imagen, su poder y su modelo de nación haciendo ver que los precios del petróleo son algo que sube y baja. Puede que tenga parte de razón, pero no entiende o pretende no entender las profundas deficiencias de la economía rusa. Debería recordar lo que ocurrió en 1986, cuando comenzó el derrumbamiento de la Unión Soviética. En esa época, Mijaíl Gorbachov se enfrentó a una situación muy similar cuando el descenso de los precios del petróleo y el gas impidió al Estado ruso importar suficiente trigo para alimentar a la población. Gorbachov sabía cuál era el pernicioso secreto que se escondía tras el aparente poder soviético: desde su nacimiento en la década de 1930, la Unión Soviética había dependido de las exportaciones de sus recursos naturales para poder importar suficientes alimentos para sus habitantes. Debido a que Stalin había destruido la agricultura y toda clase de iniciativa empresarial, la única riqueza verdadera que quedaba eran el petróleo, el gas y la minería. Pocos rusos lo sabían, puede que la mayoría de los líderes soviéticos tampoco fuesen conscientes de ello, y la mayor parte de los kremlinólogos no repararon en ello. La Unión Soviética nunca fue una economía desarrollada, y Rusia tampoco lo es. Únicamente sobre el papel aparentaba y sigue aparentando serlo, ya que en la década de 1930 la planificación para el desarrollo industrial reemplazó a un desarrollo auténtico de ese sector. Todas las estadísticas soviéticas eran un engaño hasta que Gorbachov lo admitió e intentó salvar la Unión Soviética abriendo las fronteras, aunque demasiado tarde para poner a salvo la ilusión de poder. Ni una sola industria soviética sobrevivió a la competencia, y ninguna las ha reemplazado desde entonces. La Unión Soviética sufría lo que los economistas llaman la maldición de los recursos naturales El petróleo en Arabia Saudí, el gas en Argelia, la soja en Argentina, el estaño en Bolivia, o el oro en la España del siglo XVII, son algunos ejemplos en los que la explotación de los recursos naturales ha sustituido a la innovación y a la auténtica creación de riqueza, propiciando una entrada de dinero fácil, normalmente en beneficio de una minoría, y sentando así las bases para la aparición de las oligarquías. El paradigma de los recursos naturales nunca había sido aplicado a Rusia hasta que en 2007 se publicó The Fall of the Soviet Empire La caída del imperio soviético un libro de Yegor Gaidar, antiguo ministro del presidente Yeltsin e instigador de las privatizaciones en Rusia. Gaidar demostraba con toda claridad cómo el poder y la influencia de la Unión Soviética aumentaban y disminuían cíclicamente, siguiendo estrictamente los precios del petróleo y el gas. La Unión Soviética fue más peligrosa que nunca en la década de 1970, bajo ABC Y SUS LECTORES El nombre de España Se queja CARLOS ALONSO de las vueltas que damos los medios para evitar el nombre de España, en este caso en las páginas deportivas. En el ABC de hoy dice en referencia al ejemplar del pasado lunes y hablando de la medalla de plata de la selección española de balonmano femenino, se referían a ellas con el apodo de las Guerreras que ya sabemos que las acompaña desde determinados ámbitos. Pues bien: tal vez sea uno demasiado susceptible, pero en esta súbita moda de buscar apodos a las distintas selecciones que tanta gloria han acumulado en los últimos años, creo ver una maniobra de los diversos nacionalistas que nos afligen. Ya que no pueden evitar que todo el país vibre con los éxitos, especialmente de la selecciones de fútbol y baloncesto, pero también de tenis y otros deportes más minoritarios, han puesto en circulación diferente apelativos, como son el citado de las Guerreras la Roja la Armada los Espartanos para evitar que el nombre de España se cite con demasiada profusión. Como he dicho, quizá sea demasiado susceptible, pero tal como están las cosas, no me gusta ver a ABC secundando tales tendencias La Academia limpia, fija y manda Pese a su creciente manga ancha a la hora de admitir términos cada vez más discutibles, la RAE sigue siendo la referencia para limpiar, fijar y dar esplendor al idioma español. Escribe Antonio Burgos en su artículo de 21 de diciembre recuerda ANTONIO TURMO que no debe decirse Navidades, sino Navidad, siempre en singular. Lo curioso es que apela al DRAE, que según él no admite más plural que el que se refiere a la Navidad de más de un año Pepe tiene muchas Navidades encima Sin embargo, consultado el DRAE en su versión digital, la acepción 3 de Navidad dice: Tiempo inmediato a este día, hasta la festividad de Reyes. U. t. en pl. con el mismo significado que en singular: Se harán los pagos por Navidades... Lo mismo dice el Diccionario Panhispánico de Dudas. Según esto, no es incorrecto decir Navidades, plural práctico, además, para distinguir el día 25 del período navideño en general

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