ABC MADRID 23-11-2014 página 64

62 SOCIEDAD DOMINGO, 23 DE NOVIEMBRE DE 2014 abc. es sociedad ABC La médica evacuada desde Malí supera las 48 horas de riesgo sin señal de ébola Seguirá en observación en el Carlos III durante 21 días aunque no tenga síntomas N. R. C. MADRID JOSÉ FRANCISCO SERRANO OCEJA La médica cooperante de Médicos Sin Fronteras, repatriada el jueves desde Malí, superó ayer las 48 horas más críticas sin síntomas de ébola, según ha confirmado la ONG. Han pasado dos días desde que la madrugada del miér- coles se pinchara con una aguja al tratar a un infectado. Ese es el tiempo, según la Organización Mundial de la Salud, que tarda el virus en dar la cara con las primeras señales (fiebre, debilidad intensa, dolores musculares, de cabeza, garganta... Sin embargo, el periodo de incubación intervalo desde la infección a la aparición de los síntomas puede prolongarse durante 21 días, por eso la cooperante seguirá bajo vigilancia en la sexta planta del hospital Carlos III de Madrid donde permanecerá ingresada. Estará bajo observación, no en régimen de aislamiento. No se le ha prescrito ninguna medicación y, de momento, no se le hará ninguna prueba en busca del virus, salvo que presente síntomas. Precisamente ayer se cumplieron los 21 días de vigilancia para el personal sanitario del Carlos III que atendió a la auxiliar de Enfermería Teresa Romero, la primera infectada en occidente. Ninguno de ellos ha presentado síntomas. El martes finalizará el seguimiento para el personal que limpió la habitación del hospital, y un día más tarde, para los miembros de la empresa de biodescontaminación, según han confirmado a Ep. TOLERANCIA CERO Sorprende que el caso de los pederastas de Granada se haya convertido en el caso del arzobispo de Granada U LK Q IV M Y S K JQ IV MQ L l? B 56 PB; 5 h 2 D 851 h D 1025657 Dh 0 6 A 6 B; D 1 8. B 56 8 D D 742 1 B; 6 A; C 8 4 D 2 D 3 A; 1 2 0 1 D 8 7 75 A 10 D 1 10 D 1 n tQP K S OV M L n silencio desgarrado se ha hecho esta semana en la Iglesia en España. Ese horrendo crimen o culto sacrílego como han calificado los dos últimos papas a la pederastia, ha dejado de ser un problema de otros. Y no por el hecho de que no hubiera habido antecedentes. Según lo que sabemos, lo que ha ocurrido en Granada no tiene parangón. La Conferencia Episcopal contaba, desde hace meses, con un protocolo para afrontar con rigor las denuncias de pederastia, elaborado durante el mandato del cardenal Rouco Varela. No es casualidad, por cierto, que las primeras noticias del caso se hayan publicado en vísperas de iniciarse la Asamblea Plenaria de los obispos, ante la inminencia de unas detenciones policiales que luego se han retrasado. Como dijo el Papa Francisco, no hay lugar en el ministerio de la Iglesia para aquellos que cometen estos abusos Recomiendo el libro Tolerancia cero de Juan Rubio. El compromiso de Benedicto XVI y de Francisco en no tolerar el daño infligido a un menor por parte de nadie, independientemente de su estado clerical es un dogma disciplinar. La normativa canónica es clara y está actualizada; y la jurisprudencia de los tribunales españoles es más abundante de lo que imaginamos. Ahí están, por ejemplo, las sentencias de la Audiencia Provincial de Burgos, de octubre de 2001, y de la Audiencia Provincial de Madrid, de octubre de 2006; y las 603 1999; 140 2004; 299 2004; y 848 2005 del Tribunal Supremo, Sala 2 de lo Penal. Pero lo que sorprende es que el caso de los pederastas de Granada se ha convertido, para cierta opinión pública, en el caso del arzobispo de Granada. La distinción siempre es importante porque la credibilidad orgánica de la Iglesia anda en juego. El arzobispo de Granada es un verso suelto que, sin lugar a dudas, habrá pisado charcos y habrá cometido errores. Es un arzobispo del que se suele hablar no por conocimiento cierto de su persona, y de sus obras, sino por sus antecedentes periodísticos como si fueran antecedentes penales. El arzobispo y la Iglesia en Granada. ¿Y el futuro de la Iglesia en Granada?