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ABC MADRID 07-09-2014 página 96
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  • EdiciónABC, MADRID
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96 DEPORTES Ajedrez Copa Sinquefield DOMINGO, 7 DE SEPTIEMBRE DE 2014 abc. es deportes ABC El italoamericano ha encadenado siete victorias consecutivas en el torneo más exigente de la historia Caruana, el nuevo Fischer FEDERICO MARÍN BELLÓN MADRID Magnus Carlsen le ha salido un hueso duro de roer. Cuando nadie creía que pudiera aparecer un ajedrecista digno de disputarle la corona, un (aún más) joven italiano, un chaval de 22 años con pinta de empollón y un pasado de trotamundos, se perfila como la principal amenaza para el prodigio noruego. El arranque de Fabiano Caruana en la Copa Sinquefield, en San Luis (Misuri) es el más espectacular que se recuerda en los últimos tiempos, sobre todo en un torneo de ese calibre. La valoración de la copa creada por Rex Sinquefield no es gratuita, como casi nada de lo que posee el multimillonario estadounidense; ninguna competición había logrado superar los 2800 puntos Elo de media entre sus participantes. En la primera vuelta del torneo, Caruana despachó sin miramientos a sus cinco rivales, incluido el propio Carlsen. Luego encadenó otras dos victorias más y amplió su racha a siete, al más puro estilo Bobby Fischer, que en 1971 endosó dos sets consecutivos a Larsen y Taimanov. Fue precisamente Carlsen quien logró pararle los pies con unas tablas más que sudadas. Una ronda después repitió empate contra el estadounidense Nakamura, a quien Fabiano Luigi también tuvo contra las cuerdas. Pese a haberse anotado ocho puntos en las nueve partidas más duras de su carrera, la decep- A ción podía leerse en el rostro del italiano, de aspecto engañosamente inofensivo. Había tenido a su alcance un increíble cien por cien de efectividad. El propio campeón del mundo, que lo ve acercarse por el retrovisor a peligrosa velocidad, se mostró comprensivo y entendió que el cansancio era la causa de apenas dos o tres errores en cincuenta horas de competición. Para algunos, el logro de Fabiano Caruana tiene más mérito que las exhibiciones de Fischer, quien también ganó un campeonato de Estados Unidos con once puntos de once posibles. Las mejores rachas de Karpov y Kasparov tampoco tuvieron un plantel de rivales tan exigente. En San Luis, Fabiano se ha enfrentado cada día a un gran maestro del exclusivo top 10, en un deporte en el que las tablas son el resultado más frecuente al máximo nivel. Hijo de italianos, Fabiano Caruana nació en Miami y creció en Brooklyn, una nueva coincidencia con Fischer. A los diez años, derrotó a su primer gran maestro, y a los 14 se convirtió él mis- Fabiano es un prodigio desde su más tierna infancia Peligro de un nuevo cisma A menos de dos meses del duelo entre Carlsen y Anand por el título mundial, el noruego aún no ha firmado el contrato. El campeón ha logrado un aplazamiento, pero está claro que no le gusta la sede elegida, Sochi (Rusia) ni la bolsa de premios. Como respuesta, la FIDE ha dispuesto que su sustituto sería el ruso Karjakin, en lugar de Aronian o Caruana, los dos siguientes en el escalafón. La posibilidad de un nuevo cisma como los que abrieron Fischer (al no defender su título) o Kasparov (al separarse de la Federación) sobrevuelan el torneo de San Luis. Pero la exhibición de Caruana podría tener otro efecto positivo: Carlsen necesita derrotar a Anand, si puede, y esperar a Fabiano, si llega, para demostrar que sigue siendo el mejor. mo en GM, superando en precocidad a Bobby. Su aprendizaje ha sido ecléctico e internacional. Ha estudiado en la escuela de ajedrez de Susan Polgar y con el entrenador Bruce Pandolfini, un mito en Estados Unidos que fue interpretado en el cine por Ben Kingsley, en la maravillosa película En busca de Bobby Fischer A los doce años vino a Madrid, donde recibió la ayuda de Boris Zlotnik, y luego pasó por Budapest para seguir mejorando con Alexander Chernin, antes de asentarse en la ciudad suiza de Lugano, aunque parece que el año pasado volvió a pasar mucho tiempo en la capital de España. Tiene la doble nacionalidad, pero juega para Italia desde 2005 y ha sido cuatro veces campeón de su país, la primera a los quince años. En ajedrez rápido es número uno del mundo. Tan bueno que no tiene estilo En la Copa Sinquefield, ha destapado su mejor ajedrez, tan perfecto que, como decía un comentarista, no tiene estilo Juega bien cualquier tipo de posición y no le da miedo meterse en complicaciones, en un derroche de confianza sin igual. Solo sus fallos en las dos últimas rondas han disipado la sospecha de que sus gafas eran un arma secreta de Google. En San Luis ha ganado partidas de todos los colores. A Topalov lo ha derrotado dos veces. Con el francés Maxime Vachier- Lagrave dio un curso de sacrificio de peones. Magnus Carlsen le arañó medio punto en dos partidas de milagro. Al armenio Levon Aronian lo sacó del tablero con una facilidad pasmosa y la caballería siempre al trote, y al estadounidense Hikaru Nakamura le perdonó la segunda humillación. Caruana ha demostrado, por otro lado, que conoce los puntos débiles de Carlsen. El marcador entre ambos todavía favorece al número uno, pero no puede ser más apretado, con cinco victorias frente a cuatro y siete tablas. Después de los duelos K- K entre ajedrecistas rusos, los Car- Car pueden marcar una nueva era. Fabiano Caruana es el primer gran maestro que ha logrado recortar puntos a Magnus Carlsen en la clasificación mundial

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