ABC MADRID 20-05-2014 página 27
- EdiciónABC, MADRID
- Página27
- Fecha de publicación20/05/2014
- ID0006335070
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ABC MARTES, 20 DE MAYO DE 2014 abc. es internacional INTERNACIONAL 27 DE LEJOS La dura caída de Hollande En PEDRO RODRÍGUEZ Sondeo Ipsos Steria Sondeo TNS Sofres Sopra Sondeo BVA Orange Frente Nacional (Marine Le Pen) 23 24 23 FRANCIA SE AMERICANIZA Hollande se ha convertido en una precoz caricatura de los úlitmos días de un presidente de EE. UU. UMP (Nicolás Sarkozy) 24 22 21 Partie Socialiste (Francois Hollande) 16 17 17 ABC cadas, el poder adquisitivo de las familias francesas retrocedió el año pasado. Los franceses se consideran víctimas del mal gobierno nacional y del mal gobierno europeo. Y ese euroescepticismo creciente se traduce en sentimientos de hostilidad hacia Europa, acompañados de un profundo repliegue nacionalista. Un 63 de los franceses piensan que la UE utiliza muy mal el dinero de los contribuyentes. Un 51 de los ciudadanos piensan que Europa agrava la crisis. Un 38 de los franceses afirman que la UE es motivo de inquietud Valls cae diez puntos en 50 días Mucho más popular que el presidente, el premier sufre un rápido desgaste J. P. QUIÑONERO PARÍS D da y a la derecha del espectro político. A la izquierda, el anuncio de 50.000 millones de euros en recortes cayó como una dolorosa bomba. A la derecha, los gestos fiscales de Valls hacia la izquierda son percibidos como un oportunismo electoral que no augura nada bueno. Europa, adieu! Valery Giscard d Estaing, expresidente de la República, elegido el 19 de mayo de 1974, estima que Francia atraviesa una fase de crisis y angustia. Y teme percibir síntomas de decadencia El último presupuesto equilibrado de Francia data de la presidencia Giscard (1974- 1981) Desde entonces, todos sus sucesores han gobernado recurriendo a la droga dura de la deuda soberana. Mitterrand provocó una crisis grave con su programa de ruptura con el capitalismo y construcción del socialismo a la francesa Chirac fue incapaz de cumplir ninguno de los compromisos europeos de Francia. Sarkozy prometió la ruptura con el inmovilismo de izquierdas (Mitterrand) y el inmovilismo de derechas (Chirac) Hollande prometió cambiar el rumbo del modelo económico europeo, con más crecimiento y menos austeridad Seis meses más tarde, Hollande firmó el Pacto fiscal europeo: pero Francia sigue sin cumplir sus compromisos contraídos con Bruselas. Peor: Francia está pasando del estancamiento al retroceso económico. Las previsiones de la OCDE y la Unión Europea anuncian para el país menos crecimiento y peores resultados que sus vecinos. Y los franceses viven con verdadera angustia ese retroceso nacional. Un rumbo peligroso Manuel Valls sigue siendo el político más popular de Francia, con mucho. Pero la caída de 10 puntos en apenas dos meses parece anunciar un rumbo peligroso de su credibilidad. El semanario Le Point ha publicado un informe de una docena de páginas preguntándose si Valls podrá resistir y sobrevivir a los ataques de su propio campo. El primer ministro francés es mucho más popular al centro y la derecha que entre los electores y dirigentes socialistas. El estancamiento económico de Francia, las previsiones económicas, muy modestas, y los 50.000 millones de recortes anunciandos, durante los dos próximos años, perfilan un horizonte muy conflictivo e imprevisible. En cincuenta días como primer ministro, Manuel Valls ha perdido 10 puntos en cota de estima popular, que continúa siendo alta, pero comienza a ser víctima de la crisis y la impopularidad excepcional de François Hollande y el PS. Según el último sondeo del semanario Nouvel Observateur Valls todavía se beneficia de un 52 de opiniones positivas, cuando Hollande apenas es apoyado por un 16 o un 18 de los franceses. Días antes de ser nombrado primer ministro, el pasado 30 de marzo pasado, Valls tenía entre el 62 y el 65 de opiniones positivas. Mes y medio de gobierno han tenido un coste inquietante. Manuel Valls pierde terreno y credibilidad a la izquier- Videoanálisis del desencanto francés con Europa entro de la peculiar jerga política de Estados Unidos, los presidentes que alcanzan la recta final de su paso por la Casa Blanca no se libran de ser etiquetados como lame ducks lo que podría traducirse algo así como patos lisiados Es el precio que todos los actores, en sistemas políticos con el suficiente dinamismo, deben pagar cuando empiezan a tener más pasado que futuro y un margen de maniobra cada vez más menguante. En el caso de François Hollande, desde hace tiempo, esa prematura cojera le ha convertido en un pato confitado con síntomas que recuerdan demasiado a los generados en América desde que la XXII enmienda constitucional limita a tan solo dos mandatos las ambiciones de los ocupantes de la Casa Blanca. El problema es que Hollande fue elegido en abril de 2012 para un primer mandato de cinco años y no debería haber entrado en barrena de forma tan precoz. Es verdad que en su momento, a Sarkozy se le reprocharon sus intentos de americanizar de mala manera la presidencia francesa. Sin embargo, su sucesor parece haberlo conseguido con creces. Desde la irrelevancia prematura a la melancolía sexual, pasando por un desgaste político tan tóxico que no se arregla ni con una proyección internacional de cetrería. En los recientes comicios municipales, como si fueran unas elecciones midterm del otro lado del Atlántico, los franceses ya tuvieron oportunidad de emitir un evidente voto de castigo y respaldar cualquier opción posible- incluso la abstención o la extrema derecha- antes que confiar en los socialistas de Hollande. Y ante las elecciones europeas de este fin de semana, con el ocupante del Elíseo más impopular en la historia de la V República, todo apunta a un nuevo cataclismo que podría convertir al Frente Nacional en la fuerza política más votada por una Francia más euroescéptica que nunca. Con el dudoso honor para François Hollande, a pesar de haberse reinventado ya más veces que Madona, de presidir sobre una república con demasiadas dudas y miedos sobre su futuro.