ABC MADRID 29-04-2014 página 21

ABC MARTES, 29 DE ABRIL DE 2014 abc. es españa ESPAÑA 21 Análisis Ana Botella, en el Foro ABC El presidente de Vocento, Enrique de Ybarra, conversa con Ana Botella antes de comenzar el Foro ABC La ministra Ana Pastor, acompañada por el exministro y empresario Abel Matutes Gallardón, en el centro, con (de izq. a dcha. el presidente de Técnicas Reunidas, José Lladó; el de Ifema, Luis Eduardo Cortés; el de Iberia, Luis Gallego. A la der. de Gallardón, Antonio Vázquez, de IAG El director de ABC, Bieito Rubido, y el expresidente del Gobierno José María Aznar El presidente de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez, junto a Joaquín del Pino Elvira Rodríguez, pdta. de la CNMV Manuel Manrique, presidente de Sacyr El presidente de Air Europa, José Hidalgo José Manuel Revuelta, presidente de Navantia, y Esther Alcocer, de FCC salada y pularda a la concejal Dancausa, la encargada de hacerle los números a Botella, y al secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, el guardián de las esencias y del cumplimiento del déficit. Beteta, viejo conocedor de los entresijos madrileños (llegó a ser consejero de Gallardón y de Aguirre, y no estar loco, como en la canción) había elogiado minutos antes la gestión de la alcaldesa por el rigor de sus medidas. La escena en la mesa llevó a la comicidad: papá Estado vigilante de que el niño municipal no se desmande. Pero, para mesa sabrosa, la que compartían Esperanza Aguirre, Ignacio González, Cristina Cifuentes y Javier Arenas. Sobra explicar que la reunión se convirtió en una suerte de inmenso ascensor donde, como está mandado, solo se hablaba del buen tiempo madrileño, el despertar de la primavera y, a lo más, lo bueno que es hacer más participativa la política, al calor de las palabras de Botella. Eso sí, todo quedó en su sitio cuando la alcaldesa sentenció que Aguirre y Cifuentes son sus amigas y compañeras. Le faltó añadir que, también y sobre todo, residentes en Madrid. Ha nacido una candidata Que Aznar acudiera a un acto de su mujer auguraba algo: la alcaldesa dice sí MAYTE ALCARAZ CRONISTA DE LA VILLA DE MADRID Ayer en el Casino había tanto presidente, expresidente sin más, expresidenta con más (ganas de ser alcaldesa) expresidente con menos (actos electorales si el PP no lo remedia) y exalcalde (con ganas de quedarse de ministro) que con menos el marido de la regidora confecciona un Consejo de Ministros de cuaderno azul de los de antes. Por cierto, primera novedad: son contadas, muy contadas, las ocasiones en las que Aznar apoya con su presencia un acto público de su es- posa. Segunda originalidad: es de las pocas veces en que se sienta en una mesa donde no se sabe si le han colocado por su altísima magistratura de exjefe del Gobierno español o por compartir libro de familia con la protagonista. Y tercera y definitiva peculiaridad: es la primera vez que Ana Botella dice, casi sin decirlo, que aquí estoy yo; que, mientras todos hablan, yo me dedico a callar, pagar deudas y ceñir el cinturón. Es como si hubiera recordado que ella también tiene su corazoncito: no va a ser todo recibir puñaladas traperas por aquí y por allá, pareció susurrar. Yo tengo un plan para Madrid que, a buen entendedor y en La Moncloa las cogen al vuelo viene a ser un ¿qué hay de lo mío? pero, como corresponde a una dama bien educada y poco aficionada a la lucha de cuadrilátero, con un lenguaje políticamente correcto, trenzado en un discurso personal, muy personal, cuidado con mimo porque lo que contenía no era baladí. Ya se vio, ya. Una de las primeras cosas que hizo fue convidar a una zanahoria de reconocimientos a su antecesor y mentor, Alberto Ruiz- Gallardón, al que ponderó tanto que tuvo que pedir disculpas a otro exalcalde, Álvarez del Manzano, que no recibió las mismas ni parecidas lisonjas; para luego esgrimir el palo, eso sí, dialéctico, ante una de las medidas más controvertidas que heredó del exregidor al llegar a Cibeles (y no es el traslado al excesivo edificio histórico, que también) la tasa de basuras, que obligó a los madrileños a pagar dos veces un servicio ya incluido tradicionalmente en el Impuesto de Bienes Inmuebles. La buena nueva fue recibida con caras de no me lo puedo creer en la mesa donde la casualidad obligó a compartir en- Reunión de candidatos La mesa que compartían Aguirre, González y Cifuentes fue la más vigilada por los periodistas