ABC MADRID 27-02-2014 página 5

ABC JUEVES, 27 DE FEBRERO DE 2014 abc. es ENFOQUE 5 Don Felipe, en el monasterio de Poblet La historia sepultada ÁLVARO MARTÍNEZ Don Felipe, ayer, junto al abad del monasterio de Santa María de Poblet, Josep Alegre, y el padre prior, Lluc Torcal EFE La historia, lo que de verdad ha pasado, volvió ayer a dar un par de revolcones a los picores independentistas surgidos en la corte del rey Arturo Ocurrió en el monasterio de Poblet, donde Don Felipe puso fin a su visita de cuatro días a Cataluña, tan oportuna como fundamental en estos días de tramontana soberanista, pues ha servido para reafirmar el compromiso de la Corona con esa tierra y para, seguramente, pulsar la opinión de agentes referenciales de la realidad catalana en esa parte de España. Veamos. Primera lección. En el cenobio cisterciense está enterrado el que fuera primer Príncipe de Gerona, Juan I de Aragón, que allí yace desde 1396. Hoy, más de seiscientos años después, el título lo ostenta Don Felipe, lo que demuestra el devenir real de esta vida compartida y la inextinguible ligazón de esas tierras con las del resto de España. Los seis siglos que separan a aquel Juan de este Felipe propinan la enésima estocada a las manipulaciones soberanistas, basadas en reinos de nunca jamás, que se intentan recrear en un estúpido intento por tunear un pasado y presente comunes. Segunda lección. Poblet acogía la reunión de la sociedad que vertebra los homenajes a Juan Prim i Prats en el bicentenario de su nacimiento. La fama y gloria alcanzadas por el conde de Reus, catalán de pura cepa, también desmoronan el disparatado victimismo de los independentistas, cuya traca más sonora fue el congreso España contra Cataluña organizado por la corte artúrica para bochorno de historiadores serios. Prim fue diputado por Tarragona, Barcelona y Madrid; gobernador de Puerto Rico; ministro de la Guerra y presidente del Consejo de Ministros del Reino de España... ¿Un catalán? ¿Pero no quedamos en que España estuvo siempre contra Cataluña? Ningún consejero de Mas se pasó ayer por esos muros multicentenarios para honrar a un catalán universal; no se le fueran a venir encima los cascotes de la historia y la gran mentira nacionalista quedara aún más a la intemperie. ESPAÑA