ABC MADRID 06-02-2014 página 43

ABC JUEVES, 6 DE FEBRERO DE 2014 abc. es cultura CULTURA 43 Fachada de la SGAE IGNACIO GIL La ventanilla única, último frente en la ley de Propiedad Intelectual Las entidades de gestión, a la greña por el anteproyecto, que el Gobierno prevé aprobar mañana EFE S. GAVIÑA MADRID manentemente a la espera para demonizar o glorificar a alguien sin prestar demasiada atención a la verdad zanja una autora que, tras la novela de Poirot, volverá a sus personajes habituales, los detectives Simon Watherhouse y Charlie Zailer, para seguir adentrándose en los abismos interiores del ser humano. ne de Conan Doyle, pero el problema de Poirot es que, en el fondo, es Sherlock Holmes en versión continental. Agatha Christie, en los años sesenta, estaba harta de Poirot porque le parecía egocéntrico, ampuloso, pesado. Decidió quitárselo de encima. No pudo por la presión popular. Conan Doyle tampoco logró hacer desaparecer al drogadicto Holmes, pero en este caso por contentar a su madre. Vaya lo comido por lo servido. Enano, digno, con cabeza de huevo, bigote tieso, traje pulcro... todo lo contrario de un detective de ahora, que viste casual y se ensucia. El nuevo Poirot lo tiene crudo. Sí va, no va... Sí va, no va... Ese era el runrún de ayer sobre la posibilidad de que el anteproyecto de la ley de Propiedad fuera mañana al Consejo de Ministros. Cuando parecía que todo iba bien encaminado, en la reunión de la Comisión de Subsecretarios celebrada ayer por la mañana, en la que se estudian y deciden cuáles son los temas que van al Consejo de Ministros, afloró un problema que ha obligado a apurar el plazo para limar algún punto del texto. No será hasta esta tarde cuando se conozca con seguridad si el anteproyecto finalmente va. Fuentes consultadas por ABC, que han podido leer el nuevo borrador, aseguran que en el texto no se ha incorporado casi ninguna de las recomendaciones realizadas por el Consejo de Estado, bastante crítico con el contenido y redacción del anteproyecto. Sí se ha incluido una modificación que parece haber abierto una brecha importante. Una modificación que se ha hecho a la medida de una entidad de gestión Se trata de la aplicación de la ventanilla única para gestionar los derechos de los autores, que, según el nuevo texto, si en seis meses no se ponen de acuerdo las diferentes entidades de gestión, la responsabilidad recaería sobre aquella que tenga la mayor red de distribución e infraestruc- tura. Según esta premisa, todo apunta a que se trataría de la Sociedad General de Autores (SGAE) quien asumiría esa ventanilla única, lo que, para muchos, es una clara apuesta del Gobierno por el monopolio, en detrimento de las pequeñas entidades de gestión Una decisión que iría en contra de los objetivos del texto original, donde se incrementaba el intervencionismo hacia las entidades de gestión como consecuencia del escándalo de la SGAE. Ahora, sin embargo, a ella se la beneficia en perjuicio de otros que no fuimos los responsables de aquello Esas mismas fuentes van aún más lejos y consideran que este cambio de rumbo podría deberse al interés del Gobierno por lograr la complicidad y el silencio de los autores. La SGAE suelta lastre Uno de los que habrían negociado esa modificación habría sido el hasta ayer secretario general de la SGAE, Pablo Hernández, cesado tras la celebración extraordinaria de una junta directiva de la entidad. Se adelanta así la salida del que fuera responsable de los servicios jurídicos de la institución durante años, prevista para el 31 de diciembre de 2014 y con una indemnización pactada de 500.000 euros (que no recibirá) La decisión es consecuencia de las informaciones aparecidas en algunos medios sobre las actividades profesionales de Hernández al margen de la SGAE. En declaraciones a ABC, Pablo Hernández mostraba su gratitud por la confianza depositada en él hasta ahora por la institución en la que ha trabajado durante 18 años, tiempo en el que he defendido los intereses de esa casa