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ABC MADRID 28-12-2013 página 15
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ABC MADRID 28-12-2013 página 15

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC SÁBADO, 28 DE DICIEMBRE DE 2013 abc. es opinion OPINIÓN 15 UNA RAYA EN EL AGUA EL ÁNGULO OSCURO JUAN MANUEL DE PRADA MANERAS DE VER LA VIDA No entiendo la manía que tienen algunos en discrepar, cuando sólo tienen ciencia para trepar L A alguacilesa Cristina Cifuentes, felizmente recuperada después de pegarse una morrada con la moto, salió del hospital diciendo que ahora veía la vida de otra manera Nosotros, conociendo el kilometraje de la alguacilesa como motera y tertuliana televisiva fetén, imaginamos enseguida que habría entrado en el hospital con una visión de la vida a la manera de Paolo Coelho y salido del hospital con una visión de la vida a la manera de Jorge Bucay; o acaso a la viceversa. Pero de su nueva manera de ver la vida no supimos más, hasta que el otro día afirmó ¡oráculo de Delfos! que ella la vida la ve sometida a una ley de plazos, en vez de sometida a una ley de supuestos, que es como la ven otros en su partido. La alguacilesa Cifuentes es la propia que tiene Rajoy en la corte y checa para que le cuente los figurantes de las manifas; y la alguacilesa Cifuentes no acierta en el cómputo ni de casualidad: a veces, cuenta como manifiesteros a los abueletes que sacan a pasear a la nieta; y, a veces, no cuenta como manifiesteros ni a quienes enarbolan la pancarta. Pero sus errores en el cómputo le dan vidilla al cargo de alguacilesa; y ahora le ha dado más vidilla todavía con su manera de ver la vida, sometida a plazos. Y es el caso que la alguacilesa Cifuentes no es la única pepera que se ha significado por su manera de ver la vida sometida a plazos; la alcalduela de mi ciudad levítica, por ejemplo, que así que llega la Semana Santa se pone la mantilla y corre detrás de las imágenes, portando una vela que le derrama estalactitas de esperma en la mano, también ha querido discrepar de la manera de ver la vida que tiene su partido. A mí estas discrepancias en la manera de ver la vida de alguacilesas, alcalduelas y demás mamandurrios peperos me hacen una gracia que me matan: primeramente, porque no entiendo la manía que tienen algunos en discrepar, cuando sólo tienen ciencia para trepar; y luego, porque tampoco entiendo que en todas las otras cuestiones los mamandurrios peperos bailen al mismo son, con perfecta sincronía, como las varillas de un limpiaparabrisas, y, en llegándoles al comedero que todos comparten en amor y compaña la patatica caliente del aborto, empiezan todos a disputar de repente, como si fueran los albañiles de la torre de Babel. ¿Que el Gobierno decide congelar el salario mínimo? Todos quietecicos, prietas las filas. ¿Que el Gobierno sube los impuestos y expolia al ahorrador? Calladicos como profesionales del amor mercenario. Pero, ¡ay! que no les toquen su manera de ver la vida con nuevas leyes del aborto, que enseguida se desmandan. ¡El muerto al hoyo y el vivo sin bollo! parece que estén diciendo, mientras se ríen a carcajadas de los pobres cándidos que todavía les votan. A mí todos estos mamandurrios peperos me recuerdan a un plumífero muy señoritingo que conocí allá en la juventud, vástago de rancia estirpe azul mahón, que escribía unos artículos infestados de empalagos políticamente correctos y baboserías progres. Una vez le pregunté: Pero, hombre, ¿por qué escribes esas cantamañanadas que dan grima? Y él, tan encantado de haberse conocido, me espetó: Coño, es para ver si se fijan en mí en El País y me fichan de una puñetera vez Sentí pena de aquel pobre diablo, como ahora la siento de estos mamandurrios peperos, tan miramelindos y cagapoquitos, tan ablandabrevas y culitiernos en sus maneras de ver la vida, que uno nunca sabe si corcovienen o corcován con sus plazos y supuestos. Claro que más pena siento de mí mismo, por dedicarles un folio de mi escritura; pero, a veces, uno también tiene que hacer pilates con las palabras, aunque lo suyo sea la maratón. IGNACIO CAMACHO DESGUACE INCOMPLETO Si piensa derogar todas las leyes del Gobierno, Rubalcaba podría presentarse con el programa del PP, que está casi inédito IENTRAS soluciona sus problemas de liderazgo interno Rubalcaba va perfilando una singular oferta electoral que consiste en derogar todas las leyes aprobadas por el PP: la de reforma laboral, la de la administración, la de seguridad ciudadana, la de educación, la del aborto y las que vayan cayendo de aquí al final de la legislatura. Su compromiso abolicionista es tan intenso y prolijo que en caso de gobernar tendría que dedicar al prometido desguace la mitad de su mandato. Si logra superar el trámite de las primarias, pequeño escollo atravesado en su estrategia de asalto al poder, ni siquiera necesitaría tomarse el trabajo de elaborar un programa: podría concurrir a las elecciones con el del PP, que está casi inédito. Lo único que el dirigente socialista no parece dispuesto a revocar es la subida de impuestos, mecachis. Tiene su lógica: es la medida más socialdemócrata que ha tomado Rajoy. Pero también es la que más irrita a su electorado natural pese a la regocijada complacencia con que la defiende Montoro, que lejos de mostrarse arrepentido se ufana cada vez que tiene ocasión del mayor y más clamoroso incumplimiento del Gobierno. El ministro se siente tan orgulloso de su apretón fiscal que incluso se permite corregir las contriciones del presidente; mientras éste insiste en que fue una decisión de causa mayor y que la corregirá lo más pronto posible, el Gran Recaudador anunció esta semana que no nos hagamos ilusiones porque piensa mantener gran parte de la presión vigente. Está encantado y tal vez tenga motivos cuando observa que su escabechina exactiva de las rentas españolas se salva de los propósitos derogatorios de una oposición que le protesta con la boca chica mientras le otorga una suerte de consenso pasivo, de anuencia solapada. Acabará presumiendo de una misión histórica; no sólo ha rebasado el programa tributario de Izquierda Unida sino que va a dejar la carga impositiva tan alta que hasta la socialdemocracia tendrá problemas para seguir elevándola. De momento ha logrado que Rubalcaba pase de puntillas sobre los impuestos en su proyecto de enmienda a la totalidad del marianismo. Los expertos financieros del PSOE van a tener que devanarse los sesos para encontrar una propuesta que por comparación pueda considerarse de izquierdas. Si el líder socialista fuese estrictamente consecuente con su modelo revocatorio prometería un alivio a las clases medias pero un hombre tan poco alegre no tiene madera de flautista de Hamelin; sólo anuncia cancelaciones legislativas sin coste presupuestario porque con las cosas del dinero no se juega. De modo que los ciudadanos- contribuyentes tenemos este día de inocentes la misma certeza que el año pasado: que ocurra lo que ocurra y gobierne quien gobierne seguiremos trabajando para pagar un enorme Estado ineficiente. M JM NIETO Fe de ratas

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