Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 15-12-2013 página 17
ABC MADRID 15-12-2013 página 17
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 15-12-2013 página 17

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página17
Más información

Descripción

ABC DOMINGO, 15 DE DICIEMBRE DE 2013 abc. es opinion OPINIÓN 17 UNA RAYA EN EL AGUA EL RECUADRO ANTONIO BURGOS PROTAGONISTA: LUIS DEL OLMO Todas las mañanas le daba los buenos días a la nación, Buenos días, España Entonces en Barcelona se podía decir España M E pregunto pidiendo el verso emprestado a Juan Ramón Jiménez: ¿Cómo era, Dios mío, cómo era? Y el viejo transistor me responde con la voz de la sintonía mañanera. Hasta con su musiquilla. Después que Luis del Olmo le haya dado los buenos días, España canta en los Desayunos Pascual: Aquí está Protagonistas, con la radio y la gente del pueblo, las mañanas se visten de fiesta, Protagonistas Esa sintonía lo mismo te la cantaba Montserrat Caballé que Julio Iglesias, o la gran Rocío Jurado te la metía a compás de bulería, ¿será por vestir por fiestas las mañanas de la radio de España? Cuando esta mañana he tomado el cartón de leche Pascual para echarle un chorreoncito a mi café descafeinado, lo he encontrado tristoncete. Los cartones de leche Pascual, la de los desayunos de Luis del Olmo, también lloran. Como llora la radio de cretona cuando han dicho que el ponferradino ha colgado el micrófono. Creía que los viejos rockeros de la radio nunca cerraban los micrófonos. No recuerdo que Boby Deglané se despidiera una noche de Cabalgata Fin de Semana, ni José Luis Pècker tras darnos a todos la flanera de aluminio del concurso de Gallina Blanca. Y dudo seriamente que Luis del Olmo se haya retirado. Al menos sin recibir el homenaje que sus millones de oyentes le deben por inventar aquellas mañanas de radio que eran la alegría en el madrugón. Luis del Olmo es un hombre de radio. Integralmente de radio. Vivía para la radio. Por eso tiene que se- guir viviendo para la radio, Luis, pues de lo contrario vas de palmatoria total. Recuerdo aquella tarde en Jerez como retrato: sólo pensaba en sus Protagonistas todo el día. Habíamos ido a Jerez a hacer los que Pilar Blanco, su productora, llamaba coros y danzas el programa fuera de su sede, para aprovechar los parneses de un patrocinio. Yo había leído mi Chispa en el auditorio de la Caja de Ahorros de Jerez y Luis me dijo que si quería a la tarde ir con él a los toros. Hablo de la Feria de Jerez, la del poema de José María Pemán. Sin gastarme un duro en vino y almejas ni en un tendido de sombra, allá que fui a los toros con Luis del Olmo. En el cartel, Rafael de Paula. Y estaba Rafael de Paula doblando por bajo a su primero, tras haberle pegado siete lambreazos de ensueño con el capote, cuando fue que Luis me habló en el solemne silencio de la plaza. Yo creía que me iba a decir que viva la madre que parió a Paula. ¡Sí, sí! Me dijo... ¡con Paula allí abajo echándose ya la muleta a la izquierda! -Oye, Antonio, ¿qué te parece si después del resumen de prensa nacional de Fernando Ónega hacemos una selección de los periódicos regionales y lo damos antes de la tertulia? ¡Vete a tomar por saco, Luis! Vamos a ver a Rafael de Paula y mañana me lo cuentas... Luis del Olmo es un locutorio de radio permanente; por eso no me creo que se haya retirado. Hizo lo que ahora sería impensable: radio para toda España desde Barcelona, sin producir rechazo. Concretamente, desde Radio Miramar o desde Las Ramblas. De costa a costa, inventó el que ahora llaman magazine matinal Puso en regadío radiofónico las tertulias que había inventado Alejo García con La espuela Si hoy decimos tertulianos y yo estudio su espantoso idioma, el tertulianés, es porque todo eso lo inventó Luis del Olmo, quien llevó a la flor y nata del periodismo patrio a su programa, de Vázquez Montalbán a Jaime Campmany. Como inventó abrir los micrófonos a los oyentes, que eso sí que tenía guasa y no el WhatsApp de ahora. Una radio hecha desde Barcelona ahora produciría rechazo en media España. Ah, pero Luis cree en España. Todas las mañanas le daba los buenos días a la nación: Buenos días, España Entonces en Barcelona se podía decir España El hijo del ferroviario de Ponferrada es tan hombre de radio que convirtió las ondas hercianas en personalísimas ondas bierzanas. El auténtico Protagonista de la mañana de la radio se ha retirado. Bienaventurados sean sus imitadores. IGNACIO CAMACHO NO HAY DERECHO Ni pregunta ni respuestas: Cataluña no tiene derecho de autodeterminación y por tanto no cabe discutir una entelequia Q JM NIETO Fe de ratas UE no, que no se trata de la pregunta, por mucho que resulte ambigua, capciosa, preintencionada. Que no es tampoco la respuesta, o las respuestas posibles, lo que importa. Ése, el de las preguntas y las respuestas, es el debate al que quiere conducir el nacionalismo: a una especie de encuesta, con o sin urnas, sobre quién se quiere separar de España y quién no. Lo veremos estos días: morbosos sondeos sobre porcentajes que traten de anticipar un resultado fantasma de una consulta fantasma. Pero no es el caso porque hay una cuestión previa, esencial y principalísima, que se antepone a este juego perverso en que los soberanistas catalanes han envuelto su delirio de secesión: el derecho. El derecho que no tienen a plantear ninguna clase de propuesta que implique su capacidad de autodeterminarse al margen del resto de los españoles ni de decidir su destino por su propia cuenta. Éste y no otro es el único marco en el que hay que abordar el desafío secesionista. No existe el derecho de autodeterminación para Cataluña, y por tanto no se puede discutir sobre una entelequia. No caben respuestas porque no cabe ninguna pregunta. El que quiera plantearla debe reunir primero una mayoría suficiente para cambiar la Constitución, y debe reunirla en toda España porque somos los españoles el sujeto indivisible de la soberanía. Tal vez ni siquiera el Congreso de los Diputados podría autorizar en este momento un referéndum como el propuesto en Cataluña porque incumpliría la norma fundamental por mucho consenso que alcanzar pudiese. Y esta supremacía jurídica del orden constitucional sobre el político es lo que no quieren aceptar los independentistas y sus compañeros de aventura, que tratan de plantear un inexistente conflicto de legitimidades. No hay ninguna legitimidad superior a la de la Constitución, de la que emana la arquitectura institucional de la democracia y del Estado. Por eso no es posible consulta alguna ni decisión de rango menor que quiebre el modelo supremo. Si el Gobierno o el Parlamento autorizasen la celebración del referéndum, confiados como Cameron respecto a Escocia en que ganaría el no a la independencia, estarían concediendo de facto a Cataluña un derecho de autodeterminación inexistente, y por tanto inconstitucional. Amén de que abrirían la puerta a la independencia catalana cuando sus partidarios lograsen reunir la mayoría necesaria: insistirían en repetir la votación más adelante y no habría modo legal de impedírselo. Y eso, sencillamente, no puede ocurrir porque los españoles acordamos que sólo nosotros, en conjunto y no en parte, tenemos la potestad de decidir sobre la unidad de España. Y hasta para suicidarnos como nación, balcanizar y destruir nuestra convivencia y convertirnos en una especie de Yugoslavia necesitamos volverlo a acordar entre todos, reforma de la Constitución mediante. Y por ahora no estamos por la labor. Me parece.

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.