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ABC MADRID 01-12-2013 página 14
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ABC MADRID 01-12-2013 página 14

  • EdiciónABC, MADRID
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14 OPINIÓN POSTALES PUEBLA DOMINGO, 1 DE DICIEMBRE DE 2013 abc. es opinion ABC JOSÉ MARÍA CARRASCAL LA FÓRMULA RAJOY Nada tiene más éxito que el éxito, dicen los norteamericanos, ni atrae más a las moscas que la miel, decimos nosotros M IENTRAS la oposición española ese amasijo de partidos de izquierda, nacionalistas de derechas, independentistas radicales, sindicalistas orgánicos e indignados inorgánicos se desgañita contra Rajoy, las agencias de calificación, las bolsas y los inversores le aplauden. ¿A quién creer? Cada uno es muy libre de elegir, pero Rajoy parece satisfecho de cómo le van las cosas no sólo fuera, sino también dentro, pues aunque sus rivales le atacan a matar a todos ellos les va bastante peor que a él. Los nacionalistas catalanes ni siquiera se ponen de acuerdo sobre la fecha y la pregunta de la consulta, lo que crea dudas sobre si se celebrará. Los nacionalistas vascos empiezan a tener dificultades económicas, pese a las ventajas fiscales de que gozan. Los socialistas andan buscando líder y programa. Los sindicalistas no consiguen apagar los fuegos declarados en sus centrales y los indignados se consumen en su propia indignación. Nada de extraño que todos ellos tengan un cabreo inmenso que les impide, primero, ver que son los culpables de sus desgracias y, segundo, cerrar el pacto de Estado que España necesita para salir definitivamente de la crisis. Es de suponer que a Rajoy le gustaría cerrar ese pacto con ellos, aunque sólo fuera por lo mucho que le facilitaría las cosas. Pero si con los nacionalistas parece imposible, al pedirle lo que no puede darles, y con el resto se lo impide el caos y la cerrazón que reina en ellos, siempre le quedará el consuelo de que podrá decir, si es que finalmente saca el país adelante, que lo ha sacado él solo, sin ayuda de nadie, incluidos los y las que, desde dentro de su propio partido, no han querido acompañarle e incluso le han metido alguna cuchillada de frente o por la espalda. Hasta el momento, ninguno de esos críticos ha cambiado de postura y decidido echarle una mano. Pero no descarto que, de concretarse las buenas noticias que van llegando desde el exterior, pronto lo harán algunos. Nada tiene más éxito que el éxito, dicen los norteamericanos, ni atrae más a las moscas que la miel, decimos nosotros. Rajoy no es un hombre simpático. Le cuesta incluso sonreír y cuando lo hace se le nota el esfuerzo. Posiblemente tenga que ver con el carácter, ya que hay gobernantes de todos los tipos. Él no pertenece a esa clase de políticos que confían en su poder de persuasión, ni a los que piensan que gobernar es seducir a la gente con palabras melosas y gestos espectaculares. Se le clasificaría más bien entre los que, tras examinar los males del país, se pone a remediarlos cuanto antes y lo mejor posible. Sin desviarse un milímetro del camino trazado ni ceder ante las amenazas ni las lágrimas, convencido de que no se puede contentar a todos si se quiere gobernar para todos. En una España acostumbrada a lideratos demagógicos o dictatoriales, esto es completamente nuevo. Pero parece que está funcionando, contra pronóstico y para suerte incluso de los agoreros. Aunque nunca lo reconocerán. Tampoco es tan necesario. PROVERBIOS MORALES JON JUARISTI PITORREO En la práctica, la izquierda abertzale goza de una impunidad virtualmente protegida por el Tribunal de Estrasburgo UANDO se habla de ilegalizar Bildu o Sortu me pregunto si los que plantean tal posibilidad se han preguntado por las consecuencias que tendría proscribir a medio País Vasco. El precio por el apaciguamiento de ETA fue eso, precisamente. Medio País Vasco, que se dice pronto. Si nos perdonas la vida, te daré la mitad de mi reino, como le decían al dragón los reyes de los cuentos de hadas. En nuestro cuento no hubo un héroe con agallas, sino un gobierno que se pasaba de listo. El dragón no se lo pensó mucho, porque la oferta era un chollo: Guipúzcoa, toda para ti; la Vizcaya profunda, ídem de lienzo, y medio patatal alavés, ¿cómo lo ves? Ah, ¿que no se le prometió tal cosa? Sí, hombre. No sé lo que se le ofreció en concreto, pero en el fondo era eso, y el dragón supo entenderlo. Sabía que el pueblo más antiguo y valiente de Europa se le iba a entregar en masa en cuanto viera que el gobierno de Madrid se conformaba con que dejase de matar para permitirle presentarse a las elecciones bajo una enésima marca blanca. Porque el pueblo más antiguo e indómito de Europa es tan listo como el dragón o más, y está harto de ver cómo el nacionalismo convierte cada una de sus derrotas en victoria y avanza así, de derrota en derrota, hacia la victoria final. Y al pueblo más antiguo y chulo de Europa sólo le interesa saber quién es el amo, quién tiene el poder real, que nunca ha confundido con el oficial. Se la bufa quién C mande en Madrid. Lo importante es quién manda en casa. O sea, el dragón. Al dragón le va el pitorreo. Incluso prefiere el pitorreo a la independencia. Le divierte más. Su congénere catalán es un pobre dragoncillo de Sant Jordi, que embiste directo a la lanza porque no tiene sentido del humor y cree en las grandes palabras. Cree que las grandes palabras como independencia tienen detrás algo sustantivo y sustancioso (la felicidad, la sardana interminable, la repera, la Catalunya mes rica i plena) Al dragón del cuento vasco le basta con vivir del cuento. No hay nada que al dragón le ponga más contento que el pitorreo. Las recepciones festivas a sus asesinos domésticos son puro pitorreo, no tienen otra función. Se trata de hacer la pedorreta a Madrid: ¿Creíais habernos vencido, eh, maketos de chichinabo? Pues, mirad: nuestros angelitos en la calle; sus víctimas, ajo y agua, y la Excelentísima Diputación Foral de Guipúzcoa perdón, Gipuzkoa organizando su particular tamborrada soviética. Y esto es sólo el principio. ¿Cómo se puede pretender que no se pitorree? ¿En qué cabeza cabe que Bildu, Sortu o como quiera que se haga llamar condene el asalto a la sede del PP de Baracaldo? ¿Por qué iba a hacerlo? No tienen ningún miedo al gobierno de Madrid le han perdido todo respeto. Saben que, si el dragón no mata, no lo ilegalizarán jamás, por muy enfáticos que se pongan los ministros de Justicia e Interior o el sursum corda. El Tribunal de Estrasburgo no lo permitiría, y a las pruebas me remito. ¿No estaban de acuerdo gobierno y oposición, ambos reversibles, en que ETA ha sido definitivamente derrotada? Entonces, ¿a qué viene tanto aspaviento por unos cuantos desahogos pirómanos y pirotécnicos, sanas manifestaciones del júbilo de familiares y amigos? El dragón ya no mata. Ni siquiera amenaza con consultas a la población. Sencillamente, ha bajado del monte y se ha merendado a la mitad de la administración local vasca, pero en ello no hay nada de delictivo, ¿no habíamos quedado en eso? El dragón sabe muy bien que el ataque a la sede del PP de Baracaldo, pese a lo que afirma Arantza Quiroga, no es un atentado contra todos, sino contra el PP de Baracaldo. O sea, una minucia.

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