ABC MADRID 07-11-2013 página 57

ABC JUEVES, 7 DE NOVIEMBRE DE 2013 abc. es cultura CULTURA 57 La Cena de los Cavia Doña Sofía posó junto a algunos fotógrafos de ABC: Ángel de Antonio, Eduardo San Bernardo, Ernesto Agudo y Jaime García A la izquierda, Pinto Chinto, tras recibir de manos de Doña Sofía el premio Mingote Jorge Edwards, durante la lectura de su discurso DISCURSO DE JORGE EDWARDS PREMIO MARIANO DE CAVIA Isabel Tocino y Santiago de Ybarra se saludan afectuosamente La belleza de la lengua como parte de la naturaleza humana ajestad, es un honor, un motivo de orgullo, una gran alegría personal, recibir de sus manos el premio Mariano de Cavia. La lectura de los grandes poetas, novelistas, ensayistas, cronistas, de la España moderna y la España de siempre, fue el descubrimiento esencial de mi remota adolescencia, en el Santiago de Chile de los años cuarena y cincuenta, y se transformó casi de inmediato, sin que yo en un comienzo me diera cuenta, en un destino. La belleza de nuestra lengua, en la poesía de Fray Luis de León, de Lope de Vega, de Góngora, en los sonetos de don Francisco de Quevedo, en los versos de Jorge Manrique y de San Juan de la Cruz, en la prosa de Cervantes, de Santa Teresa, de Baltasar Gracián, como también de Rubén Darío y José Lezama M Adolfo Suárez Illana junto a Ángel Expósito Visión de la actualidad El premio otorga carta de naturaleza a la caricatura como una de las formas en las que el oficio periodístico puede presentarse toja imprescindible. Y, por supuesto, también va nuestro agradecimiento a los miembros del jurado, que han considerado nuestro trabajo merecedor de tan alta distinción. Queremos acordarnos hoy de mucha gente. Empezando por Fernando Quesada, humorista gallego que recibió el Mingote en 1969. De este modo, deseamos hacer partícipe de este que se nos entrega hoy a una larga tradición de humoristas gráficos que ha- cen de Galicia una de las canteras más fructíferas en este campo. Ahí están para corroborarlo los Castelao, Cebreiro, Cao, Xaquín Marín, etc... Dedicamos este premio también a nuestros compañeros de El Correo Gallego, donde iniciamos nuestra andadura hace ahora veinte años, y a los actuales de La Voz de Galicia en la que llevamos trabajando los últimos diez. Es un honor pertenecer a esta plantilla de profesionales. Para terminar, decir que querríamos poder dividir este premio y entregarle la mitad o seguramente más de la mitad a alguien que es el principal culpable de que hoy podamos recogerlo. Esa persona es Siro, sin duda uno de los humoristas gráficos y caricaturistas más importantes de España. Su magisterio ha sido crucial, determinante en nuestra formación. Está sentado hoy aquí con nosotros, y si algo sabemos de este oficio es gracias a él. Va por ti, Siro. Muchas gracias. La vida y la literatura A mis años, puedo estar agradecido del lenguaje que recibí en herencia, de sus maestros ancestrales Lima, se convirtió a poco andar en una fidelidad, en una vocación permanente, en algo muy parecido a una identidad. Conozco la historia del Mariano de Cavia, discreta- discreta en el mejor de los sentidos- segura, de calidad auténtica, de inteligencia e ironía elegantes; he leído con atención la lista de los premiados, y puedo asegurar que muchos de ellos fueron maestros para mí, guías, preceptores literarios, inspiraciones. Su sintaxis impecable, su ritmo, su música y su juego verbal, me marcaron y me encantaron en el sentido más literal de esta última palabra. No solo aprendí maneras, modos, usos. La fuerza, la vida, la belleza de la lengua me contagió y entró en el proceso de hacerse parte de mi naturaleza: proceso que no termina, que me mantiene en la ilusión de un aprendizaje permanente, de una continuada iluminación. Por eso, a mis avanzados años, puedo estar agradecido de la vida que me ha tocado vivir y del lenguaje que recibí en herencia, de sus maestros ancestrales, sus precursores, sus cultivadores, con quienes me doy el lujo de conversar, de intercambiar ideas, visiones particulares, experiencias, a cada rato. Majestad, no pretendo abusar de mi tiempo de palabra. Creo que lo dicho, breve, conciso, hondamente sentido y vivido, es más que suficiente.