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ABC MADRID 07-10-2013 página 14
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ABC MADRID 07-10-2013 página 14

  • EdiciónABC, MADRID
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14 OPINIÓN POSTALES LUNES, 7 DE OCTUBRE DE 2013 abc. es opinion ABC A LOS CUATRO VIENTOS La falsa superioridad moral de la izquierda El debate de ayer en ABC sobre el fin de la pretendida superioridad moral que se autoatribuye la izquierda ha generado una amplia respuesta entre nuestros lectores y en las redes sociales. En esta época en que la información nos desborda, los periódicos deben servir también de ágora para la reflexión serena. Intentar aportar luz en unos tiempos donde escasean los referentes intelectuales es uno de los roles que ha desempeñar la prensa responsable. Y por fortuna, nuestros lectores nos acompañan en ese intento. JOSÉ MARÍA CARRASCAL Preocuparse por todos los símbolos La traumática Historia de nuestro país hace comprensible la preocupación de la sociedad ante cualquier símbolo que nos retrotraiga a una época en la que el enfrentamiento político derivó en drama. Pero resulta sorprendente que para algunos esa alarma solo exista cuando se trata de los símbolos preconstitucionales de una de las partes. Mientras que la colocación de bombas por parte de grupos de ultraizquierda en catedrales y basílicas la Almudena o El Pilar, nada menos no les provoca la mínima congoja. DEMASIADAS MENTIRAS El problema catalán no se arregla con federalismos, terceras vías, trampas ni subterfugios, sino abierta, honesta y legalmente Q UE hay remedios peores que la enfermedad lo sabemos todos, y los remedios que intentan aplicarse al problema catalán empiezan a parecerlo. Tanto el federalismo del PSOE como la tercera vía de Durán tienen esa pinta. Sacar del baúl de los abuelos el federalismo, cuando ya lo tenemos de hecho en las Autonomías, sin que nos haya servido para articular el país sino para todo lo contrario, sólo puede ocurrírsele a un partido sin programa, sin líderes y sin rumbo. En cuanto a la tercera vía de Durán, peor aún, pues lo que propone es la confederación mantenernos unidos, pero separados, como esos matrimonios en que cada uno se va por su lado, pero manteniendo los negocios juntos. Que es lo que han buscado siempre los catalanes listos: nosotros somos los dueños de nuestra casa, pero con pleno acceso al solar, o mercado, español. E incluso encargándose Madrid de sus grandes gastos, infraestructuras, Ejército, etcétera. Para eso, prefiero lo de Junqueras: dos Estados y cada uno en su casa. La actitud del gobierno Rajoy ha sido hasta ahora la correcta: estamos dispuestos hablar de todo, siempre dentro del marco constitucional, dice. Y la Constitución no puede ser más clara al establecer la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles Mientras se mantenga en eso, nada que objetar. Pero si empieza a hacer distinciones entre los españoles o a conceder privilegios a alguna Autonomía, la unidad se rompe. Y, además, de la peor manera: cediendo al chantaje nacionalista, que, no nos engañemos, por muy moderados que sean, aprovecharán esas ventajas para promover su proyecto, que no es otro que la secesión. En otro caso no serían nacionalistas. Conceder a Cataluña un pacto fiscal a la vasca o navarra, aumentar las inversiones estatales en aquella Comunidad, favorecerla en cualquier aspecto sobre las demás no solucionaría el problema catalán. Todo lo más, lo aplazaría y, a la larga, lo agravaría al aumentar el foso con ella. Sólo estoy de acuerdo con los independentistas en que estamos en un momento muy serio, muy grave, crucial incluso. Pero precisamente por eso, no puede resolverse con componendas, cataplasmas y medias tintas. Toda nación es un proyecto común, que no puede funcionar si alguna de sus partes no participan en él. Y menos, si lo boicotea. La pelota está en el tejado de los catalanes, no en el los españoles, que estaremos encantados de seguir juntos, no para vivir de ellos, sino para convivir con ellos, pero no con trampas electorales, mentiras históricas o caminos inciertos, sino honesta, leal, legítimamente. Sabiendo todos lo que nos jugamos, que es mucho. Trampas, mentiras, argucias, ya hemos tenido bastantes. Demasiadas. CARTAS AL DIRECTOR Cumplir las leyes Los contribuyentes estamos hartos del Sr. Mas y sus mariachis montando el gran teatro del mundo con el fin, como siempre, de sacar más dinero de la Administración central que luego tiran por los sumideros del poder. El Tribunal Constitucional tenía ya que haberse pronunciado en una actuación de oficio. En un país serio, el Sr. Mas, adláteres y otros más, que en su toma de posesión juraron o prometieron se supone, con lealtad cumplir y hacer cumplir las leyes, estarían ahora sentados ante un tribunal. Si no quieren ser españoles, se les pone la maleta en la mano y se les invita a marcharse. Pero antes tendrán la obligación de presentar ante los ciudadanos las cuentas de su gestión; ingresos y gastos que deberían ya estar presentados y revisados por el Tribunal de Cuentas. Un Estado no puede estar continuamente sujeto a los intereses de quienes desprecian las leyes. FRANCISCO MATEO MADRID Tan catalán como español Soy catalán y estoy harto del debate político sobre la independencia. Entiendo que la gente tiene derecho a expresar su opinión, pero ya equiparan una posible consulta con un resultado favorable a la ruptura de España. No se contempla un resultado negativo a sus pretensiones separatistas. Somos muchos catalanes los que amamos nuestra tierra, pero también nos sentimos tan españoles como el que más, y me indigna que nuestra opinión no se tenga en cuenta. Gran parte de los independentistas afirman que se sienten oprimidos históricamente por el resto de España, pero, en el hipotético caso de que Cataluña consiguiese la independencia, ¿no serían ellos los que oprimirían a los catalanes que nos sentimos españoles? Nos obligarían a dejar de lado nuestras raíces y sentimientos. ¿Por qué debo dejar de formar parte de España si no quiero? Esta pregunta me ha conllevado muchas discusiones ya sea con amigos o con algunos familiares y ha llegado el punto en el que muchas veces no expreso mi opinión porque los separatistas se me tiran al cuello. Así que yo sí me siento oprimido. Me hacen sentir como fuese un extraño, pero ya no lo voy a tolerar más. ANTONIO MUÑOZ GARCÍA BARCELONA El holocausto de la inmigración Algunos historiadores cuentan que habiendo terminado la II Guerra Mundial y preguntado en las poblaciones cercanas a los campos de exterminio nazi, los vecinos disimulaban, miraban para otro lado o, como mucho, concluían que aquello estaba allí, que se sabía, pero que nadie dijo nunca nada. Seguían con sus vidas, y poco más. Hace pocos días hemos conocido por los medios de comunicación una nueva tragedia que por culpa del imperio de insolidaridad en que hemos convertido nuestro mundo, se ha cobrado centenares de vidas; de hombres, mujeres y también niños, cerca de la isla italiana de Lampedusa. Un drama tan habitual en esa zona tan cercana a las costas africanas que motivó el primer viaje al exterior del Vaticano del Papa Francisco. ¿De algún dirigente más? JOSÉ MANUEL CIDRE MÁLAGA Motus Terrae Esta era la frase que decía mi viejo profesor de Geografía cuando cursé primero de Bachillerato y alguien hacía algún ruido extraño en el aula: ¡Movimiento de Tierra! La plataforma Castor ubicada en el Delta del Ebro, con sus inyecciones de gas en el subsuelo del fondo marino, puede ser la causante de la alteración de las fallas y placas tectónicas que originan esta cadena de sismos de baja intensidad, que han llegado a 4,2 en la escala de Richter. La población de estos municipios no sólo está asustada y alterada, sino también muy indignada, y con toda la razón. Estas plataformas de almacena-

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