ABC MADRID 03-10-2013 página 31

ABC JUEVES, 3 DE OCTUBRE DE 2013 abc. es internacional INTERNACIONAL 31 exministra de Educación Maria Stella Gelmini reconocía: Nuestros destinos se han separado. Punto final Berlusconi tuvo una nueva reunión con sus parlamentarios, en la que se percató de que eran unos cuarenta los senadores del PDL que estaban dispuesto a votar la confianza a Letta. Así que, ante la fuerza de los hechos, in extremis, se decidió por la opción que le parecía más favorable para él y para el partido: apoyar al Gobierno Letta, buscando así evitar la escisión del amplio grupo de disidentes que no estaba dispuesto a ver caer al Ejecutivo. La incontestable realidad política es que por, primera vez, el partido en el que Il Cavaliere era dueño y señor inapelable apareció dividido en dos grupos: por una parte, el PDL, que volverá a llamarse Forza Italia; y por otra, el sector liderado por los ministros Angelino Alfano, Gaetano Quagliariello y Maurizo Luppi. Caos en el PDL La situación actual del PDL es de caos absoluto. Sólo en los próximos días se verá cómo se articula esa escisión, si es que se produce finalmente. Anoche, veintiséis parlamentarios, encabezados por Fabrizio Chicchitto, se reunieron con la intención de crear un grupo parlamentario propio bajo el liderazgo de Angelino Alfano, el que fue lugarteniente de Berlusconi hasta que le dio la espalda y lideró el grupo de disidentes en el partido. Il Cavaliere buscó hasta el último minuto la reconciliación con Alfano. Pero la herida parece demasiado profunda para que pueda cicatrizar. Así que, con el PDL sumido en el caos, Letta celebra su clara victoria política, que le ha permitido decir: Basta de chantajes, existe una mayoría política Letta ve ante sí un horizonte despejado hasta el año 2015. Tiempo necesario para realizar las reformas prometidas: una nueva ley electoral y cambios económicos estructurales que frenen la sangría del paro. Enrico Letta espera aguantar al menos hasta el segundo semestre de 2014, cuando Italia asume la presidencia de turno de la Unión Europea. Enrico Letta (izquierda) junto a Angelino Alfano, hasta ahora hombre de confianza de Berlusconi AFP sado todas sus maniobras para coaccionar al Gobierno y al Parlamento para que le busquen algún tipo de indulto Y ahora cuenta con un partido roto por una profunda escisión. En un intento desesperado por evitar la división de su partido, Il Cavaliere estuvo hasta altas horas de la madrugada telefoneando a sus senadores. Le acompañaba uno de los duros del partido, Denis Verdini, coordinador del Pueblo de la Libertad (PDL) quien le aseguraba que apenas una docena de sus senadores votarían la confianza a Letta. Pero por la mañana un grupo de 25 senadores hizo público, con nombres y apellidos, su deseo de abandonar a Berlusconi, y de formar un grupo parlamentario propio. La Letta, eufórico, pero lo más difícil está por delante Sentado junto a un Alfano de semblante serio durante casi toda la sesión, el primer ministro Letta reaccionó ayer con una sonrisa, entre la incredulidad y la satisfacción, al anuncio de Il Cavaliere de que votaría a su favor. Por su parte, Berlusconi no abandonó el rostro sombrío que mantuvo durante toda la sesión al volver a sentarse, aplaudido por los suyos tras su alocución en favor de la continuidad del Gobierno. La victoria de ayer de Enrico Letta en la Cámara Alta (con una mayoría incluso mayor que la alcanzada para la investidura) no asegura la gobernabilidad de Italia ni el futuro de la actual coalición. La ruptura provocada por Angelino Alfano en el PDL no garantiza a Letta un número suficiente de parlamentarios para obtener la mayoría absoluta. El camino sigue, pues, plagado de obstáculos. Fotogalería de la moción de confianza de Enrico Letta