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ABC MADRID 22-09-2013 página 18
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ABC MADRID 22-09-2013 página 18

  • EdiciónABC, MADRID
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18 OPINIÓN DOMINGO, 22 DE SEPTIEMBRE DE 2013 abc. es opinion ABC A LOS CUATRO VIENTOS El silencioso ejemplo de las FF. AA. Año tras año, los Presupuestos de Defensa se ajustan al escenario de recortes en el que vivimos, como ha vuelto a recordar el ministro al señalar que los de 2014 serán muy estrictos Y año tras año, no se oye una sola voz de protesta en el seno de las Fuerzas Armadas, conscientes de que están realizando el mismo esfuerzo que la inmensa mayoría de los españoles, que es mucho. Los militares españoles encarnan como ningún otro colectivo la capacidad de sacrificio que necesita este país para salir de la crisis. No queda otra opción. Mensajes implícitos y Iberia necesita ser tiempos políticos más competitiva En el arte de la política, el de los mensajes implícitos es uno de los géneros más sutiles para responder sin perder el control de los tiempos. Ana Botella, alcaldesa de Madrid, ha sido clara al decir en una entrevista que tiene horas que son suyas y puede emplearlas en trabajar todo el tiempo que sea necesario amén de tener la misma ilusión que cuando entró en el ayuntamiento. Pero eso continuaba no quiere decir nada más que eso Ahora, que pregunten a otro, o a otra. El ministro de Industria reconoció hace pocos días que la fusión con British no había sido buena para Iberia Pero un informe auditado por PricewaterhouseCoopers incide en la falta de competitividad de la compañía en relación con sus competidores, en parte porque entre 2001 y 2011 la plantilla de Iberia disminuyó un 27 y, sin embargo, los gastos de personal se redujeron sólo un 5 La consecuencia inmediata es que el coste unitario medio se incrementó en ese periodo un 30 Las alzas fueron del 34 para el colectivo de pilotos y para el personal de tierra y del 26 para los tripulantes de cabina. VIDAS EJEMPLARES LUIS VENTOSO EN EL JARDÍN Un anciano reposa sereno a la caída de la tarde, sabedor de que hizo lo debido E L final de septiembre trae alivio a La Ciudad tras los rigores de la canícula. En julio y agosto, el empedrado de las calles milenarias ardía. En las horas más crueles daban ganas de emular a Anita Ekberg, de zambullirse alocadamente en las fuentes renacentistas y chapotear junto a ninfas y tritones. Por el contrario, el declive del verano es una de las épocas más gratas. La luz, más tamizada, otorga una nitidez precisa a los contornos. El termómetro marca los perfectos 21 grados. Aquí, en el corazón de este jardín de 23 hectáreas, corre una brisa levísima y perfumada. Cae la tarde. Un anciano descansa bajo un limonero, acomodado en una silla móvil. Al fondo solo suena el rumor de una fuente las cascadas artificiales diseñadas por Vasanzio y el parloteo inconexo de una colonia de loritos que anida en los cedros. Una gorra blanca protege al hombre. Las gafas de leer se le han escurrido en la nariz. En su regazo reposa un libro abierto. Al acercarnos, percibimos que duerme. El sueño fue venciéndolo mientras recreaba en su mente unos compases de Mozart. Le fascina Mozart: En él todo está en perfecta armonía, cada nota, cada frase musical. Incluso los opuestos se han reconciliado El hombre se despereza. Es una persona frágil, de 86 años, con problemas cardíacos. Al fondo, una nube de estorninos corre frente a la gran cúpula de Miguel Ángel y Della Porta. El anciano ha abandonado el mundo. Ahora, tranquilo, puede evocar los afanes de una vida plena. En sus años de brío, su mente era un zafiro que cortaba tinieblas. Fue, tal vez, el mayor teólogo del siglo XX. Como los sabios verdaderos, eligió la claridad frente al narcisismo manierista. El profesor devino en arzobispo, en cardenal, y al fin, en Papa. ¿Quién nace preparado para algo así? Alcanzó la cátedra de Pedro tres días después de cumplir 78 años, con las fuerzas al ralentí. Pero cumplió. En cinco años escribió tres encíclicas. La última, Caritas in Veritate, bruñía la doctrina social de la Iglesia, la anclaba en Cristo, le daba un aliento trascendente y era al tiempo un afectuoso homenaje intelectual a Pablo VI. Allí escribió: La riqueza mundial crece, pero aumentan también las desigualdades Se sigue produciendo el escándalo de las disparidades hirientes. Lamentablemente, hay corrupción e ilegalidad tanto en los países ricos como en los pobres. La falta de respeto de los derechos humanos de los trabajadores es provocada a veces por grandes multinacionales La caridad fue el eje de su último gran esfuerzo intelectual. Tímido, sin fotogenia, su intelecto era lo mejor que podía dar a los creyentes; y lo dio. El anciano recuerda horas amargas. Encaró el escándalo de los abusos sexuales, pidió perdón y les puso coto; un acto de enorme valentía, tan poco ensalzado. Recorrió el planeta para predicar lo que nunca podrá cambiar. Periplos extenuantes que desbordaban sus límites físicos. El sabio recuperó la pulcritud en el culto. ¿Se engalanaba con los mocasines rojos y rescataba viejos atributos estéticos del pontificado por vanidad? No. Lo hacía porque sabía que la solemnidad enfatiza el valor del mensaje, porque creía que todo es poco para alabar a Dios, porque intuía que una institución bimilenaria tiene un tesoro útil en su tradición. Por último, perdonó a quienes conspiraron contra él, y cuando entendió que la biología le impedía culminar su intento de oxigenar la jerarquía vaticana, tuvo la humildad de hacer lo imposible: renunciar. Lo vemos. Confinado por propia voluntad en el convento Mater Ecclesiae, levantado contra la muralla que construyó León IV en el año 847 ante los saqueos sarracenos. Rezando. O contemplando desde detrás de las rejas los arcos de ceibos con flores escarlatas, en cuya perfección cree atisbar la gloria de la creación. A veces se le añora. ABC Y SUS LECTORES La postura de Prada sobre EE. UU. Normalmente me suelen agradar los artículos de Juan Manuel de Prada, pero su actual inquina contra los Estados Unidos me parece un poco exagerada señala ANTONIO S. CARRO. El lector de ABC considera que nuestro columnista no tiene lo suficientemente presente que sin la crucial intervención de EE. UU. en la II Guerra Mundial, el mundo occidental no sería el que conocemos hoy en día MANUEL ALMAGRO también se refiere al artículo Una ocasión histórica donde en su opinión Juan Manuel de Prada plantea unos razonamientos cuando menos sorprendentes como el que clasifica las intervenciones militares americanas de dos clases cuando logra embaucar a una cohorte de tontos útiles o de pescadores en río revuelto El lector se pregunta ¿cuántos tontos útiles embaucaron los americanos en cada una de las dos guerras mundiales? En cambio, sobre sus artículos contra el absurdo

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