Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 18-08-2013 página 66
ABC MADRID 18-08-2013 página 66
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 18-08-2013 página 66

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página66
Más información

Descripción

66 DEPORTES DOMINGO, 18 DE AGOSTO DE 2013 abc. es deportes ABC Ruth Beitia estalla de alegría con uno de los saltos que le dieron la medalla de bronce Beitia da un salto de altura La cántabra, bronce, le da a España la segunda medalla en el Mundial un año después de amagar con la retirada EMILIO V. ESCUDERO Una vida dedicada al atletismo no había sido suficiente. Quizá por eso, tras la decepción que supuso su cuarto puesto en los Juegos Olímpicos, decidió poner el punto y final a una carrera plagada de éxitos, pero a la que le faltaban méritos. Tan sólo una medalla lograda al aire libre parecía poco para uno de los grandes talentos de la última década en el atletismo español, así que entre unos y otros le animaron a seguir. Fue entonces cuando comenzó a gestarse un bronce que se hizo realidad ayer en el estadio Luzhniki de Moscú. Medalla que no por inesperada es menos merecida. Beitia llegaba a la capital rusa con la única intención de disfrutar del que podría ser- -ella se resiste a confirmar o desmentir- -su último gran campeonato antes de decir adiós de manera definitiva. Su estado de forma, sin ser malo, estaba lejos del que le llevó al cuarto cajón en los Juegos Olímpicos y eso le quitaba presión. Las rusas y Barrett son las favoritas, pero yo me he encontrado bien y si tengo algo, es experiencia advertía. El día apareció nublado, como a ella le gusta. Presagio de lo que se iba a venir encima. Beitia sabía que ninguna de sus rivales habían aterrizado en Moscú al cien por cien y que iba a ser muy importante hacerlo bien en el primer tramo del concurso. La española, que este año llegaba con una marca muy pobre de 1,95 conseguida en el Nacional, asumió con superioridad las dos primeras alturas. Superó el listón hasta en tres ocasiones sin mácula y le pasó la presión al resto. Chicherova, la gran favorita, y Barrett, su verdugo en Londres, la emularon con suficiencia, mientras que Shkolina- -la cuarta en discordia- se unía al trío de cabeza, aunque ella había hecho un nulo sobre 1,95. Con el listón situado en los 2 metros, empezaron los problemas. Paradójicamente, fue Shkolina la que primero lo superó y junto a la americana se situó a la espera de rivales para luchar por el oro. Beitia y Chicherova, atascadas, no pudieron con la altura. La rusa, demasiado presionada por el ambiente, fracasó en su cita con la gloria; la española, sin ese punto de forma que acostumbra, tuvo en sus piernas el salto que le habría permitido luchar por el oro, pero derribó el listón con el talón cuando ya lo había superado. Green y los homosexuales El bronce tenía que esperar. Emma Green, protagonista involuntaria por haber coloreado sus uñas en favor de los homosexuales en Rusia, tenía la última palabra. Si saltaba por encima de los dos metros, Beitia se quedaría de nuevo con la miel en los labios. El ninguneo de la televisión rusa con Green, a la que no sacaron en pantalla nunca durante el concurso, alargó la incertidumbre. La sueca tuvo que esperar a que concluyera el 5.000 femenino para saltar, lo que hizo más larga la espera de Beitia y Chicherova, que esperaban para celebrar. Finalmente, el fallo de Green fue la alegría de España. De Ruth Beitia. Un fallo que convertía a la cántabra en la segunda medalla española de los mundiales y que ponía el broche a una carrera de oro que nadie sabe si Ruth Beitia, exultante ¡Qué regalazo! Después de la vuelta he conseguido dos medallas. Estoy feliz, feliz, feliz... Aún no sé si seguiré

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.