ABC MADRID 29-05-2013 página 55

ABC MIÉRCOLES, 29 DE MAYO DE 2013 abc. es cultura CULTURA 53 Contundencia El barco está siendo registrado en Algeciras, bajo las instrucciones del juez de La Línea Distopía Si España hubiera tratado igual a Odyssey nos habríamos ahorrado mucho tiempo y dinero pañola: entre ellas, la de 1704, en plena Guerra de Sucesión, apenas una semana después de la invasión de Gibraltar. Eco de tantas historias resulta el hecho de que en esas mismas aguas Odyssey Marine Exploration estuvo prospectando (aseguraba probar sus equipos) durante más de 6 años antes de expoliar la fragata Mercedes Hoy parece impensable lo que ocurrió: se concedían permisos, se miraba a otro lado, porque se suponía que buscaban un barco británico con cobertura del Gobierno de Londres. Vuelta al lugar del crimen LIBROS La Feria del Libro rinde tributo a Antonio Mingote y Eugenio Trías ELENA JORRETO MADRID Momento en el que la Armada intercepta al Endeavour ARMADA Mar de Alborán Las naves de Seaway Offshore han vuelto al mismo lugar donde investigaba Odyssey Marine Exploration tras recibir insólitos permisos (2000- 2007) Asignatura pendiente Además de este alarde de defensas contra los cazatesoros, España está impelida a estudiar con decisión el patrimonio sumergido en sus aguas y el resto del mundo, a través de proyectos concretos, pues junto a Portugal fundó la primera navegación global de la historia. Lo que España no conoce Quienes han podido ver los resultados de esa investigación relatan con asombro la cantidad de patrimonio cultural subacuático detectado por Odyssey entre las más de mil anomalías investigadas. Buques y aviones de la Segunda Guerra Mundial, los restos del destructor Almirante Ferrándiz hundido en 1936, decenas de jabeques, pecios púnicos y africanos, naves berberiscas, incluso un jet clavado por el ala de babor en el lecho marino. Todo ese conocimiento hurtado por la incuria mantenida durante años no lo tiene España, no lo investiga aún España. Quienes denunciaban aquella situación en los años de Odyssey, como Javier Noriega, de Nerea Arqueología (Málaga, premio europeo de empresa socialmente responsable en 2009) celebran la reacción actual de la Armada, la Guardia Civil y los juzgados, pero recuerdan con amargura cómo informaron entonces a las autoridades competentes sobre la presencia de los cazatesoros en nuestras costas. Y no olvidan que esa investigación sobre lo que hicieron aún está pendiente de resolución. ¿Se imaginan al Endeavour recibiendo ahora permisos durante seis años para re- Registro Tras expulsar a la primera nave en diciembre de 2012, se registra ahora la segunda que volvió para prospectar en el mismo lugar y comprobar qué están haciendo. Contrastes Llama la atención la información que tienen las empresas cazatesoros de nuestras costas y fondos, fruto de la incuria de décadas. Como contraste, otros países europeos avanzan. El viernes abre el nuevo Museo del Mary Rose en Portsmouth. Señales La señal para los cazatesoros es clara: nunca serán bienvenidos a nuestras costas, si se arriesgan en uno de los mares más vigilados del mundo. gistrar nuestro patrimonio? se pregunta Noriega. Quienes como él tienen conocimiento de la riqueza cultural de nuestras aguas celebran la gran victoria que supone este cambio. Todo parece indicar un cambio proporcional en la respuesta. Cuando en diciembre de 2012 fue interceptado el Seaway Invincible la Armada se limitó a expulsar de nuestras aguas al barco sospechoso. Poco después, en enero, hubo otra denuncia de actividad de barcos asociados a la firma, como informó en su día José María Lancho, abogado especializado en patrimonio su- bacuático. Solo fueron objeto de seguimiento. La insistencia de los cazatesoros, al volver el pasado domingo con el Seaway Endeavour demostró su resolución para probar hasta el límite la respuesta española. Solo el caso Odyssey y el interés creciente de la sociedad civil por luchar contra los cazatesoros han permitido esta nueva política. Videoanálisis sobre la presencia de cazatesoros, por Jesús García Calero Ayer se presentó la 72 edición de la Feria del Libro de Madrid, que se celebrará a partir del viernes y hasta el 16 de junio en el Parque del Retiro. La Feria de este año está dedicada a los libreros y los niños, dos figuras fundamentales para la supervivencia de la lectura. Pero también recordará a tres intelectuales recientemente fallecidos: Antonio Mingote, Eugenio Trías destacados colaboradores de ABC y José Luis Sampedro. La inauguración de la Feria por parte de Su Majestad la Reina el viernes dará paso a encuentros entre escritores y editores para analizar el futuro de la literatura en plena era digital. También se inculcará a los niños el valor de la biblioteca, a través de talleres y lecturas. El libro, ese objeto precioso y peremne que siempre está conectado Así definió Pilar Gallego, presidenta de la Feria, el espíritu de esta edición. Bajo el lema El libro es la respuesta la organización quiere fomentar nuevas formas de comercialización del producto que más aporta al PIB cultural. En un momento de profunda crisis económica en el sector, destaca la presencia de 457 expositores, más que el año pasado. El presidente de la Feria, Teodoro Sacristán, apuntó como causa el gran escaparate que es esta cita internacional. Con el mismo presupuesto que otros años (40.000 euros) y el respaldo de la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento y el Banco Sabadell, la Feria ha crecido en el espacio y en el tiempo. Sus actividades se extenderán más allá del Paseo de Coches en edificios como el Círculo de Bellas Artes, la Biblioteca Trías o el Pabellón Samsung. Después de todo, como dijo su secretario Fernando Valverde: Hay vida para el libro en Madrid