ABC MADRID 27-05-2013 página 46

46 ABCdelDEPORTE Liga BBVA Jornada 37 LA BOTA DE PANENKA LUNES, 27 DE MAYO DE 2013 abc. es deportes ABC DAVID ÁLVAREZ ILUSIONES DIFERIDAS El Mónaco y el Barcelona viven ya de promesas por las que han pagado para dentro de unos meses l final corresponderá al fútbol levantar el último velo. Y eso sucederá en Mónaco. El poder del dinero ha mirado siempre bien de disimularse. Ha fingido especialmente esa aceptada distancia suya de lo sentimental y sus alrededores: el dinero no lo compra todo, hay cosas más importantes del dinero. Con ese soniquete de fondo, desfilan jugadores rumbo al Mónaco, equipo de magnate ruso recién ascendido a la primera francesa. Forman una insólita hilera de futbolistas, en la que se ha confirmado la presencia de las dos joyas del Oporto (James Rodríguez y Moutinho) y a la que no dejan de asomarse Radamel Falcao y Víctor Valdés. El portero de la cantera del Barcelona aclara especialmente el asunto: cambia el paraíso por una grieta fiscal, que es una promesa de felicidad. El Mónaco, al contrario que el Oporto, el Atlético de Madrid y el Barcelona, no podrá jugar la Champions el año que viene. Pero después, enseguida será otra cosa. Eso prometen los millones del ruso Dimitri Rybolovlev y la anomalía tributaria monegasca, que hace que todo les resulte más barato tanto al magnate como a los futbolistas, lejos del alcance de impuestos que trituran a sus rivales. En esas condiciones, a la luz de la Costa Azul, el tiempo de espera se diluye. El dinero, que asegura que no lo compra todo, tiene sin embargo el tiempo a su alcance, tal como demuestra el fútbol. Para eso viene también Neymar al Barcelona. Queda mucho de aquí al principio de la próxima temporada. El Barça ganó la Liga en noviembre con tanto adelanto que ya no les sabe a nada. Sin un presente que celebrar, resulta imprescindible situarse en el futuro, y hasta ahí sólo pueden llevar los más de 50 millones que han pagado por la promesa (en todos los sentidos) brasileña. Dentro de un año, habría llegado gratis, pero un año es demasiado vacío, sobre todo si existe el atajo de un montón de euros. De modo que el Mónaco y el Barcelona viven ya de ilusiones que han pagado para luego. Mientras, Florentino Pérez ve correr el tiempo a la espera de encontrar dónde colocar el dinero que transporte al madridismo más allá de Mourinho. A El Atlético festejó con su gente la Copa del Rey y la Supercopa de Europa EFE El Mallorca aún respira Los baleares, en la fiesta de homenaje del Calderón al Atlético, sacan un punto en una tarde en la que faltó gol ENRIQUE YUNTA MADRID 0 ATLÉTICO Courtois Juanfran Godín Miranda Filipe Luis Gabi (62) Mario Arda (57) Koke (87) Diego Costa Falcao Óliver (57) Adrián (62) C. Rodríguez (87) 0 MALLORCA Aouate Hutton Geromel Bigas Luna Martí (74) Tissone Javi Márquez Giovani Víctor (82) Hemed (32) Nsue (32) Alfaro (74) Pereira (82) El Calderón, agradecido, dignificó a sus héroes en una tarde extraña, más emotiva que otra cosa para un Atlético al que no le iba nada en la pelea porque los deberes estaban hechos desde hacía ya un tiempo. Ayer tocaba celebrar, abrazarse después de tantos años de tortura por culpa del vecino rico, honrar a los campeones que una semana antes asaltaron el Bernabéu para conquistar la décima Copa del Rey en la historia del club. El Atlético ha descubierto en estos tiempos de Simeone que también tiene derecho a ser feliz y se contentó con una tarde insulsa de fútbol, ajeno al problemón de un Mallorca al borde del abismo. El resultado sólo importaba a los visitantes, que se consuelan con llegar con mínimas opciones a la jornada final. Es colista, recibe al Valladolid el domingo, y está a dos puntos de la salvación. Hay vida. En el adiós a un curso notable, Simeone quiso premiar a los que le han llevado hasta aquí. La cita se prestaba a un equipo de circunstancias, oportunidad para jóvenes emergentes que ilusionan, momento ideal para satis- cho más plano, inofensivo por momentos. No tenía nada por lo que luchar. El Mallorca sí, tanto que llegó a asfixiarse en su propia ansiedad, obligado a una carrera angustiosa desde no se sabe cuándo. Es cierto que controló la situación, pero apenas generó peligro durante el primer acto, penalizado por la lesión de Hemed a la media hora. Sin su hombre del gol, quedaba pendiente de otro milagro para mantenerse en Primera. Giovani, muy cerca Hubo una pizca más de intensidad en la reanudación y el Mallorca aceptó que la permanencia pasaba por marcar, sencillísimo el razonamiento. Dio un paso al frente y dispuso de la mejor oportunidad en un lanzamiento de Giovani, una falta fantástica del mexicano que rescató los reflejos de Courtois. Luego, Víctor se encontró con un balón muerto en el área y su cabezazo se quedó sin fuerza. El Mallorca quería más, necesitaba más. Pero también el Atlético, alegre y activo con la entrada del ilusionante Óliver. Diego Costa agitaba a la defensa balear, Falcao perdonaba un mano a mano y Mario apuntaba mal con la cabeza en unos minutos de pasión colchonera. Sufría el Mallorca, pero agradecía seguir latiendo, vivo hasta el último suspiro y dueño de una ocasión muy clara cuando agonizaba la fiesta. Faltaron los goles en el que, presumiblemente, era el último trabajo de Falcao como rojiblanco. EL ÁRBITRO F. Teixeira Vitienes. Amonestó a Diego Costa, Víctor, Gabi, Miranda, Nsue, Javi Márquez. Mario Suárez, Godín, Pereira. facer a los que han visto los toros casi siempre desde la barrera. Pero el argentino entendió que la afición merecía un premio y también los jugadores que alzaron la Copa, por lo que el equipo fue el más competitivo que podía presentar, el mismo que puso Chamartín patas arriba. Obviamente, el objetivo no era tan jugoso y el Atlético, que se ha pasado estos días exhibiendo trofeo en Singapur, resultó mu-