ABC MADRID 26-05-2013 página 6

6 ENFOQUE DOMINGO, 26 DE MAYO DE 2013 abc. es ABC Alejandro Talavante El día después Sombra y luz en Las Ventas La redención de un torero ROSARIO PÉREZ Exaltación colectiva. La marabunta enloquecida por el entusiasmo de ver a una figura por la Puerta Grande. La desolación de una victorinada sin alma tendió un vía crucis de estaciones eternas. El 18 de mayo, Alejandro Talavante había abandonado Las Ventas con el vacío de una herida que sólo podía sanar la comunión con el toro. El diestro de Extremadura se sacudió el desasosiego y aparcó esa fecha angosta que amputó ilusiones, reverdecidas con mayor intensidad la tarde del 24- M, con la mente y el corazón totalmente fortalecidos. Talavante hizo explosionar todas sus municiones con Artillero Fue una obra de emociones, un cuadro de pureza y entrega. En los tendidos, el público asistía asombrado a la redención del matador. No había más clave que la capacidad de superación, la materia prima, la verdad y la fe en sí mismo. Y Alejandro creía en Talavante. Por la Puerta Grande se lo llevaron, en la salida a hombros más ardua que se recuerda, como un cristo yerto al que arrebataban bordados y alamares. Aquello nos trasladó al epílogo de El Perfume como evocó el enjuto torero, con un gentío que se le abalanzaba y codiciaba un pedazo de su luz tras sombras pasadas. Talavante rememoró ayer con ABC esa aventura mágica desde su refugio del Palace. Había desaparecido ese rictus de amargura de la encerrona. Era un artista en plenitud. En los aledaños, frente a los leones del Congreso, rugía la conversación de algunos partidarios. Cuatro adolescentes posaron con la fotografía que Ignacio Gil inmortalizó en nuestro periódico, mientras aguardaban la salida del ídolo. Hay perfumes que dejan huella. Arriba, Talavante en un estatuario; a la derecha, gesto de emotiva victoria. En la imagen central, ayer durante la entrevista concedida a ABC Cuatro jóvenes muestran la fotografía de ABC con la Puerta Grande de Talavante, firmada por el torero